Audrey y Holden Green, disfrutaron de una relación muy linda entre padre e hija.
La niñez de Audrey se define como inolvidable y envidiable desde cierta perspectiva. Su padre hacía algo que a la vista de una niña de 5 años era hermoso y admirable, no hubo día del padre al que Holden faltara, él trabajaba a las afueras del estado e igualmente asistía.
Aunque algunos vean un día del padre como algo insignificante, para la pequeña fue fundamental para reforzar la amistad con su padre.
Escasas veces reprendieron a Audrey, su infancia estuvo llena de risas, travesuras inocentes, un par de caídas y una que otra lágrima.
En fin, es algo bueno para resaltar en la vida Audrey, que aunque era tan pequeña, aún recuerda con un poco de cariño esos momentos.
Sólo que, tristemente, esos momentos jamás regresaran.
Ella detestaba ese día, pero el tiempo transcurrió y deseó que lo obvio hubiese ocurrido.
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Cartas para mi padre.
Short StoryTe lo juro, pensé que me amabas. Tan perfecta que intenté ser, la pequeña de tus ojos, creyendo que así me prestarías atención. Esos fueron unos de los pensamientos que reinaron durante mi adolescencia. Mi vida se volvió un infierno después de un r...