¿Tae Hye es varón?

03

Todo el arduo trabajo que me había costado estar esperando como un tonto a que un hombre salga se vio interrumpido por esa pequeña de voz chillona y ojos gigantes. No pude ver por donde se fue el hombre, ni vi si estaba acompañado... Así que el primer día no tuve progreso.

— ¿Por qué le tomabas fotos a mi papá? —volvió a preguntar, esta vez dentro de la cafetería y sentada frente a mí. Su postura era a la defensiva.

¿Cómo se debía lidiar con mujeres?

Taehye no solía ser escandalosa, ni mucho menos causaba problemas.

Nadie debía saber el verdadero propósito de mi trabajo, mucho menos la hija de la señora Shin. Eran órdenes de ella y sonó muy amenazante cuando me lo dijo.

— ¿Y tú eres...? —obviamente sabía quién era ella, pero quería ganar tiempo mientras pensaba en una mentira convincente. Con las justas podía cargar con la mentira de ser Taehye, no podría soportar más.

— Soy la hija del señor a quién tomabas fotos. Ahora me dirás por qué lo estabas haciendo o llamaré a la policía —la chica sacó su celular y puso un dedo encima de este, dándome a entender que iba en serio.

La mentira que se me ocurrió no fue la mejor pero al parecer se lo había creído. Suspiré de alivio, como si algo grande se me hubiera quitado de encima.

— Para una re-revista —bien Taehyung, trábate, convencerás a todos así.

—¿Eres de esas reporteras que escriben sobre la vida de algún millonario o famoso? —Asentí —¡Lo sabía! —Chilló de felicidad —Lamento haber sido tan descortés contigo unnie, espero que escribas una buena reseña sobre nosotros.

— Claro.

Me quedé sonriendo con cierta confusión en el rostro mientras ella hablaba de lo feliz que le hacía que escribieran sobre su familia.

Me llegó un mensaje al celular así que lo saqué con cuidado de que la chica frente a mí no me vea y revisé la información que la señora Shin me había dado, al parecer su esposo estaría ahora en un lugar exclusivo.

— Lo siento pero debo irme ahora, es una emergencia.

— Está bien, espero encontrarla nuevamente unnie —Estaba por darme la vuelta cuando ella continuó —Mi padre estará feliz cuando se entere de esto.

No, él no debía saberlo.

— Tu padre no se debe enterar de esto —Dije rápidamente.

— ¿Por qué, unnie? —Ese término ya empezaba a incomodarme.

— Porque tu madre dijo que es una sorpresa, y las sorpresas no se dicen ¿no?

— Cierto —Dijo con una mano en su barbilla —Guardaré su secreto —dijo alzando un meñique.

Rápidamente uní nuestros dedos y salí disparado de allí, debía encontrar al señor Shin.

***

Gracias a la señora Shin pude entrar al restaurante donde estaba su esposo, y vaya que se veía lujoso. Con esto me hice una idea de cuánto dinero debe tener el señor... y cuántas mujeres quisieran estar con él.

Logré divisarlo así que me escondí detrás de un macetero, ya saben, lo típico. No pasaba nada fuera de lo normal. Un mesero empezaba a mirarme extraño así que debía sacar la mayor información posible antes de que me boten.

Fueron seis minutos del señor haciendo... nada. Solo tipeaba en una laptop y tomaba café. Empecé a creer que las cosas en su matrimonio estaban bien y que la señora Shin solo estaba malentendiendo las cosas. Pero no debía sacar conclusiones apresuradas, todo podía pasar en un abrir y cerrar de ojos.

— Señorita, debe retirarse.

Mierda.

***

La cara de esa niña cuyo nombre no pregunté rondaba en mi cabeza toda esa semana. De no haber sido por ella quizá habría podido conseguir algo. Parecía muy ingenua para su edad. ¿Cúantos años tendría? Tenía un gigantesco parecido a la señora Shin. Indagué en las redes sociales sobre la familia pude dar con su nombre. Jian. Tenía 19 años y era imagen de una marca de ropa muy famosa. Mis hyungs y yo también habíamos trabajado con esa marca. Me di cuenta que los Shin eran muy influyentes.

Llame a Tae Hye, la verdadera, para molestarla un rato, pero me colgó pues parecía que la casa de Big Hit estaba más interesante. Extrañaba mucho a los chicos, sin embargo las charlas con Chanli cada vez parecían menos irritantes.

— Hye, tienes los dedos más grandes que he visto. —Chanli desde hace un rato iba pintándome las uñas. — Debes disfrutar mucho —me lanzó una mirada sugestiva que a la primera no entendí.

Oh vaya. Debí no haber intentado entenderlo.

— Siento que no puedo tocar nada con estas uñas. —cambié de tema rápidamente— Ni siquiera podré enfocar la cámara en clases.

— No es para tanto. —dijo riendo— Lo pones en automática y ya. Hoy la tecnología nos ahorra mucho. —hizo una mala mueca.

— No le veo la gracia si es así. Además, no entiendo eso de "capturar emociones y transmitirlas". Todas mis fotos son aburridas. Son sólo imágenes.

— ¡Beso de tres para reforzar la amistad! — Yeol hizo su aparición en mi habitación, toda despeinada y con poca ropa, como recién levantada de dormir. Chanli rió. Tuve que presentarlas. Después de eso ella siguió hablando — Pero Taehye, tú eres la mejor en tu grado, tienes una reputación intacta. —hizo el OK con su mano derecha y guiñó.

Mierda, otra vez. Olvidé que Hye es el cerebrito de acá y la talentosa en cuestión de eso.

— Tengo un bloqueo temporal. —reí nervioso— Ya sabes, cambio hormonal.

Las dos se miraron y luego sonrieron confundidas.

— Con tal de que tu bloqueo no dure hasta la presentación final todo bien. —dijo Yeol, su oración sonó tan desinteresada, pero a mí me produjo algo en el estómago. ¿Qué pasa si arruino la carrera de mi hyung?

Ella se estaba esforzando y yo era consciente de eso. Estaría muy decepcionada si malogro por lo que tanto luchó.

El proyecto final consistía en transmitir "la verdad". Nosotros presentaríamos las fotografías y tres profesores calificados las interpretarían. Sería la nota más importante y lo que definiría nuestro pase al siguiente ciclo con calificación alta.

¿Qué carajos es la verdad? Yo no sé que es la verdad, nadie sabe que es la verdad.

La verdad es que la iba a cagar si Taehye no me ayudaba.

— Eres Taehye. Eres una con la cámara. —Chanli me dio ánimos.

Cierto, esa es Taehye. Yo soy Taehyung.

sorry por lo corto del cap. 

gracias por leer :)