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 Toca la campana de salida, guardo mis cosas así nomas en mi mochila y bajo las escaleras, estaba feliz, había aprobado la lección de física con un 10 gracias a que Pau me ayudo, aunque el no era muy bueno en las materias. 

La verdad, este año estoy bastante sola en en los recreos, el año pasado estaba con Paulo, pero ahora no tengo ningún amigo o amiga con quien pueda pasar el tiempo en la cárcel. De todas maneras, este año egreso, por lo que me chupa medio huevo no tener amigos. 

Salgo de la escuela y miro para todos lados, los lunes Paulo siempre me pasa a buscar para ir juntos a comer al Mc. Agarro mi celular, abro Whatsapp y le tiro una llamada. Dos tonos, tres tonos, cuatro tonos, no contesta el muy pijudo. 

Me siento en el cordón de la calle a esperar ¿A donde se metió el boludo? No creo que se olvide, todos los lunes viene a buscarme a la salida. 

Recibo una llamada, atiendo al toque desplazando mi dedo por la pantalla con bronca.

—¿Donde mierda te metiste? Me van a secuestrar si sigo acá sola en la calle.— levanto el tono de voz y la gente que pasa por la vereda del cole me ve mal. 

 — Mile, ya estoy yendo, se me re paso la hora. Voy con Mora, vayamos a comer juntos y te la presento, vas a ver que es re piola. —dice y me rasco la nariz, me había re olvidado que la wacha de Paulo iba a venir con el. 

Le corto y en unos minutos veo al rubio de la mano con una minita de pelo castaño ondulado, ambos caminaban a paso rápido, aunque la piba no podía alcanzar a Paulo. 

Me paro del cordón de la calle y sacudo mi pollera entablada azul, me tiene hasta los ovarios este uniforme choto. 

—Perdón Milanesa, tabamos haciendo algo y nos re colgamos en buscarte. —dice el rubio agitado, como si hubiesen venido corriendo.

El cierre de su pantalón estaba medio abierto, seguro estos dos estuvieron cogiendo y se les re paso que tenían que buscarme. 

—Tu mejor amigo me obligo a tomar el bondi. —se queja Mora después de darme un beso en la mejilla. Tiene pinta de milipili, pero por ahí subestimo mucho a las personas, grave error. 

Hay un silencio incomodo, me ahorro putear a Paulo por tenerme esperándolo mas de una hora. 

—¿Vamos al mc? Tengo alta lija. —propongo y Paulo sonríe, pero Mora niega. 

—Soy vegetariana, no como esa grasa que venden en los restaurantes de comida rápida.— afirma la milipili y hago un intento de sonrisa. —Acá cerca hay un lugar vegetariano, podemos ir ahí de ultima. 

Solo me quedo aceptar, arrancamos a caminar, Paulo agarro la mano de Mora y yo quedaba ahí como un adorno. Paulo siempre me lleva en su espalda, pero esta vez, camino arrastrando los pies. 

Después de unos veinte minutos caminando, llegamos a una esquina. Paulo le abre la puerta a Mora, y como yo voy atrás de ella, la puerta golpea sobre mi rostro y me caigo al piso. 

Toda la gente del lugar se da vuelta para mirarme, Mora se da cuenta que me caí pero sigue caminando hasta donde esta Paulo. 

—La puta madre. —me agarro la nariz, veo mis manos y tengo sangre. 

Me levanto como puedo y esquivo a Paulo y Mora, yendo al baño a lavarme. Mientras tiro agua en mi cara, Mora entra en el baño, la veo por el espejo. 

—Ay, Mile ¿Estas bien? ¿Que te paso? Paulo me mando a ver que andabas haciendo. —ah pero esta boluda me esta tomando el pelo. —Perdón por no ayudarte antes, no sabia que te habías hecho mal. —hace puchero y me acaricia el pelo. 

—No es nada, posta, siempre me doy palazos, soy re brusca. —se ríe. 

Volvimos a la mesa, Paulo miraba la carta frustrado. Me iba a sentar adelante de el, pero More llego antes tirándose junto al rubio y dejandole besos en los cachetes. 

—No hay nada rico acá. —se queja Pau mientras Mora no deja de enterrar su cara en el cuello del mismo, el no se veía muy cómodo. 

Paulo desvía la mirada de la carta para mirar los labios de la castaña, dejando un beso en los mismos. Miro a la ventana ¿Tanto me cuesta ver a mi mejor amigo con novia? 

— Mile. —llama mi atención Paulo. —¿Como te fue en la leccion? —pregunta y doy gracias a Dios por que se acordó de mi existencia en esa mesa.

—Para el orto. —lo jodo, soy buena actriz, su carita expresa preocupación. —Mentira wacho tonto, me saque un diez. — sonríe achinando los ojos. 

—Gracias a mi, sin mi no haces nada, tarada. —me jode estirando su brazo para darme una cachetada suave, me rió y agarro su mano. Entrelazamos nuestros dedos, como los buenos amigos que somos, pero Mora carraspea y Paulo aparta su tacto del mio. 

—¿Que queres hacer después?— interrumpe Mora mirando de muy cerca a Paulo. —Podemos retomar lo de esta mañana.— dice con tono seductor, revoleo los ojos sin disimular, Paulo me mira y lanza una carcajada. Pongo mi peor cara de orto, Mora me ignora. 

—Podemos ver una peli con Mile, no se, estaría bueno. —dice Paulo mirándola, Mora frunce el ceño y acto seguido sonríe falsamente mirándome.

La verdad, no tengo ganas de pasar tiempo con ellos dos, menos con Mora. La conozco hace minutos y ya me cae para el orto. Prefiero ir a dormir siesta a mi casa.

—Nono, yo tengo alto sueño, posta. —bostezo. —Mírenla ustedes, yo después de acá me voy para mi casa a dormir, la escuela me tiene jodida. —meto una excusa que mas o menos safa, Paulo sabe que estoy mintiendo, me conoce como si fuera... mi mejor amigo. 

Cuando terminamos de comer salimos del local, menos Mora, que fue al baño a retocarse el maquillaje o no se que mierda. Mientras la esperábamos, me cruce de brazos y evite mirarme con Paulo. El me agarra del brazo y me tira cerca de su cuerpo. 

—Dale Mile, te conozco, deja de hacer esa cara de orto. —susurra muy cerca mio, lo miro a los ojos relajando mi expresión. 

—¿Y que queres que haga? No puedo evitar hacer cara de culo si me traes con esta mina, mas vale andate vos con ella a coger, a chapar, lo que quieras, pero a mi no me incluyas en nada que se relacione con ella.— me cruzo de brazos, seguro parezco una nenita chiquita quejándose. 

Mora se acerca a nosotros y me callo, separándome de Paulo a un metro, mas o menos. 

—Igual, me encanta tu cara de orto.— me dice Paulo antes de que Mora se le tire encima, me hace reír y muerdo mi labio inferior para controlar mis ganas de cagarlo a piñas. 

—¿De que hablaban sin mi? ¿Me perdí de algo?— pregunta con voz chillona la milipili, mientras pone sus manos en el cuello de Paulo y le mira los labios. 

—Nada. —digo sarcástica y Paulo me mira con cara de "sácame esta pesada de encima", por lo que me rio contagiandolo a el. Es increíble como solo con miradas nos entendemos tan bien.— Me voy a casa. —añado mirando el reloj del celular. 

—Te acompañamos con Mora. —propone el cordobés y niego, no quiero estar ni un segundo mas con esa garrapata. 

—Nono, me tomo el bondi sola. —me acerco a Mora para darle un beso en el cachete, después me pongo de puntitas para darle un beso en el cachete al rubio. —Pasala lindo con la milipili, gobernado de mierda. —susurro en su oído jodiendolo, el pone cara de orto. 

Me tomo el bondi de la esquina y me apoyo en la ventana, cuando arranca veo como Mora y Paulo se chapan ahí nomas en la vereda, las manos del rubio bajan y suben en su espalda, Mora agarra su cara con desespero. 

Esta piba no me gusta nada, y menos me gusta que Paulo y yo perdamos relación por culpa de esa wacha. Siento celos, no por que me atraiga mi mejor amigo, sino que me re cuesta verlo de la mano con otra mina que no sea yo. 

Hola gente, espero que les vaya gustando la novela, se me hace que va a estar re zarpada (dea alto autoestima) pero posta, si le dan apoyo actualizo todos los dias (no me la creo ni yo pero bue) voten y comenten si les gusta, los amo y gracias por los mensajitos que me escriben.











Querido Amigo ➳ Paulo Londra Donde viven las historias. Descúbrelo ahora