Ángels Of Darkness

Capitulo 1 -El inicio del fín-

Desde mi corta edad he visto cosas que no debía haber visto. Mi madre siempre nos cuidaba, mi hermano Kayn y yo nos manteníamos juntos todo el tiempo ayudándonos y jugando a lo que queríamos ser de grandes, mientras que nuestros padres observaban y reían juntos.
     No demoramos mucho tiempo en darnos cuenta que nuestro padre ocultaba algo a todos. No sabia de que se trataba, pero se podía notar por su forma de actuar, no era el mismo hombre. Nunca supimos de que trabajaba, suponíamos Kayn y yo que podría ser los cabrones que gobiernan el mundo entero con sus crueles leyes que atormentan a todas las personas sin piedad, torturando a todos sus trabajadores quienes no pueden cometer un solo error si quieren seguir viendo a sus familias. No, no los matan a ellos, matan a las familias sin excepciones; esposa, hijos, madre y padre si aun tienen, no dejan ni un crio con vida, en caso de que lo hagan lo hacen para convertirlo en otro asesino más para su dictadura imparable.
      Sabía que algo andaba mal pero…nunca hablé o pregunte a mi padre sobre lo que sucede, parecía que no quería tocar ese tema. Pero cuando teníamos el tiempo de hablar en la cena el no llegó, creímos que era algún retraso por el trabajo o cualquier cosa. Pero no creímos que ese día el había dado su vida a cambio de que no llegaran a nuestras puertas para matarnos. Al segundo día nos dimos cuenta que ya no regresaría, nos dolió mucho a todos sobre está terrible notícia, nunca nos dejaron despedirnos aun que sea, nunca le pudimos dar un digno entierro a ese hombre que dio su vida por nosotros.
     Pero no era una razón para caer. Kayn se convirtió en un guardia de la realeza en unas tierras no tan lejos de casa, se convirtió en comandante por su gran habilidad con la hechicería y forma de dirigir a sus tropas. Yo por mi parte con mi mejor amigo de la infancia con quien siempre jugábamos mi hermano y yo, ahora éramos buenos creadores de electrónica, pensamos en abrir una tienda y así lo hicimos.
      Mi madre había muerto por una enfermedad. Kayn a pesar de haber conseguido un trabajo con buenas ganancias los hospitales no contaban con los medicamentos necesarios y los hechizos de Kayn no eran útiles para curarla ya que nunca había probado ponerlo en práctica, yo también con algunas cosas que vendía no fue suficiente para que ella viva. Tiempo después aceptamos que ya no se podía hacer nada y pasamos tiempo al lado suyo contando lo que hacíamos, cosas maravillosas, reímos y entre otras; hasta que un día…cerro los ojos. Ahora dependíamos de nosotros mismos para seguir adelante. Estábamos tristes también, pero sabíamos que al menos ya esta en un lugar mejor y pacífico con nuestro padre.
      Meses después Kayn y yo ya no habíamos hablado mucho ya que el debía dirigir a su ejército. Lo ultimo que supe de el fue que tuvo que combatir contra unos seres extraños que no pudo detener antes que se lleven a la hija de la reina. No se supo nada de ella hasta el día de hoy. En los últimos años mucho ha cambiado, se levantaron fuerzas militares que no hacían nada en contra de estos terroristas. Fue por eso que mi amigo y yo creamos una resistencia, la C.D.A, cazadores de asesinos, lo mejor que se nos ocurrió. Unimos fuerzas con más personas que querían lo mismo que nosotros. Libertad.

        Un día normal como cualquier otro, James, amigo mío y yo, nos íbamos siempre a un pequeño puesto de electrodomésticos que habíamos abierto para intentar ganar dinero para mi madre, a pesar de que ella ya descansaba seguí con esto para seguir ganando dinero para comer al menos algo.
Al mediodía había entrado un sujeto de apariencia ruda vestido con un uniforme militar que provenía de otro país fuera de este, no tenia idea de porque venía a este lugar pero James se había le había dado la bienvenida como a cualquier cliente, pero este mantenía su expresión seria de igual manera a lo que se acercó al mostrador con un maletín que tenía en su mano derecha y lo puso encima. Ahí fue cuando dijo unas palabras antes de abrirlo  -El general me mando para solicitarles a venir con nosotros hasta la base militar y así tener una charla privada con el, no tengo detalles, pero este maletín contiene los papeles que el general ha escrito-. Dejo el maletín en el mostrador y se ha retirado, no antes de mencionar que teníamos hasta el otro día para aceptar o rechazar su solicitud, sin pensarlo, abrimos la maleta y leímos los papeles que mencionaba acerca de porque nos quieren allí, saben de la C.D.A pero no menciona como sabe de eso, sin más que dudar sobre esto o no, decidimos aceptar arriesgándonos a dar la cara a un ejercito mas grande que nuestro equipo. Llamamos a todos dando el aviso de que nosotros dos iríamos solos hasta allí, pero la mayoría se negaban y no confiaban en estos hombres, pero de igual manera discutimos sobre todo esto unas dos horas hasta que nos pusimos de acuerdo.
No quedaba de otra así que nos preparamos para ir, y en ese momento una chica de nuestro equipo, Madison, viene inspirada a contarnos su maravillosa idea de hacer uniformes para todos, si no resulta ser una trampa quizás algo que represente al equipo vendrá de maravilla, a todos les encanto la idea así que puso en marcha su creatividad para hacer el diseño de nuestro nuevo uniforme.
Ya pasaron los días y fuimos al punto de encuentro donde nos esperaban unos pocos soldados, 5 solamente, y abordamos el avión de camino a la base de donde fuimos llamados para algo que aun desconocemos, estábamos arriesgando nuestras vidas aceptando una invitación repentina.

Mientras andábamos en el vuelo, nadie soltó una sola palabra, así que James se levantó y fue a pedir algo de comer, no le rechazaron nada, 0ues todo estaba disponible aquí; pasamos un buen rato comiendo algo mientras llegábamos a nuestro destino. Disfrutamos bastante de hecho, esta clase de lujos en tiempos como estos no se pueden dar cualquiera más que los líderes de todo.
Pasamos unas 4 horas viajando hasta que finalmente aterrizamos a tierra firme, allí aguardaban varios soldados más que venían con blindados posiblemente para evitar las emboscadas enemigas. Bajamos del avión y uno dio 3 pasos al frente estrechando la mano y saludando.
-Es un gusto que hayan aceptado la invitación del general, los estaba esperando así que suban al vehículo por favor para llevarlos a la base-. Lo dijo de un tono bastante fuerte. No hicimos mas que saludar y subir al blindado, nos llevaron a la base y todo el camino fue muy seguro, sin ningún problema, hasta que finalmente después de tanto viajar, llegamos.
Donde estacionamos se encontraba el general firme y con una sonrisa que mostraba su alivio de que hayamos llegado, uno de los dos soldados a sus costados abrió la puerta y al bajar saludamos al general.
-Es un placer que nos haya invitado señor.
-El placer es mío, me alegra que hayan aceptado mi invitación, nos vendrá muy bien su equipo chico.
-Pero… por que nosotros? No somos un grupo especial ni nada, solo una pequeña resistencia a decir verdad.
-Pues, logre darme cuenta que para no ser un grupo militar, saben como tratar estrategias y atacar de muchas maneras. Podemos ayudarles a mejorar si aceptan trabajar con nosotros, seremos muy generosos con ustedes y tendrán toda la comodidad que gusten.
-Oyes eso Wayne? Toda la comodidad posible ¡podemos salir del basurero que vivimos con esos matones!
-Es posible… entonces traerá a todo nuestro equipo si accedemos?
-Así mismo, pero antes, necesito que nos ayuden con un favor antes de comenzar a traerlos aquí.
-¿Ah si? ¿De qué se trata?
-Veras, será mucho mas fácil mostrarles en nuestra sala de reunión, por aquí por favor.
Fuimos a la sala en donde nos indicó el viejo, nos contó sobre un agente importante que necesitaba que ayudemos a rescata, supuestamente teníamos algo que ayudaría a entrar en donde se encuentra su hombre y aceptamos tranquilamente nuestra misión. Los soldados se armaron, hechiceros que a pesar de usar mágica, requerían de armas de fuego por que no es fácil combatir de tal forma para ellos igual, pero James y yo, tomamos las mejores armas de la base para irnos a otro viaje más, pero hacer esto nos daría no solo un lugar para alimentarnos sin temor a ser atacados y dormir igual, si no que tendríamos entrenamiento extra sobre cosas militares, por lo que nos serviría mucho aprender algunas cosas más para luchar contra los terroristas con dominan las calles en todo el mundo. Pero no sabíamos en que nos metíamos, no tenía idea de lo que hacíamos, solo tuvimos qué pasar por lo peor para darnos cuenta de que.... fue una gran equivocación.