Mikaela y Colton eran mejores amigos antes de que tuvieran que separarse.
Un error sería la punta del iceberg que desataría el inicio de una gran mentira.
Mikaela tenía una vida tranquila, estaba por empezar su último año de preparatoria y...
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COLTON
2018
Berna, Suiza.
Lunes.
—¿Es realmente necesario torturarme de esta manera tan cruel? —murmura Reece cruzándose de brazos.
Muevo algunas enredaderas de la pared para saber con exactitud dónde está el hueco que conecta mi casa con la de mi vecina, para esperarla en su patio como acordábamos unos minutos antes por chat.
—¿A qué te refieres? —cuestiono con fingida confusión, aunque ya me hago la idea de lo que dice.
Lo sé perfectamente.
—Sabes a qué me refiero, no te hagas el desentendido. En vez de irnos a dar la vuelta por la manzana, estamos en la casa de esa.
Sonrío y niego con la cabeza.
No tiene caso, jamás se llevarán bien.
—Esa solo quiere pasar sus últimas semanas con nosotros.
—Te equivocas y mucho, hermano —hace una mueca para después seguirme el paso hacia el otro lado—. Solo quiere pasar tiempo contigo, yo no la soporto. Es una pesada e histérica.
—Creo que exageras un poquito.
Me detengo para dejar que pase adelante, lo cual hace sin protestar.
—Colton, no estoy exagerando. Lo digo en serio.
—¿No tuvimos una conversación similar ayer? —Siento un ligero déjà vu como si en verdad hubiéramos tenido una charla parecida.
—Todos los días la tenemos. Y todos los días tengo la razón, pero prefieres ignorarme.
Y pensándolo un poco, tiene razón. Casi a diario tenemos la misma conversación, varía un poco a veces, pero es igual.
Reece se queja de Harriet, yo le digo que está exagerando y terminamos cambiando de tema. Es un círculo vicioso.
—Debemos de cambiar de dinámica entonces.
—¿Al fin te desharás de Harriet? —pregunta con ilusión reflejada en sus ojos cafés.
—¿Otra vez planeado cómo deshacerte de mí?
—Cada vez que se me presenta la oportunidad, monoeurona.
—Dame un segundo y seguimos discutiendo sobre ese horrible apodo —responde llevándose su móvil a la oreja y se aleja un poco para tener más privacidad—. No papá, si la tal Verónica sigue estando en nuestra casa, no me verás ni en pintura.
Verónica es la nueva novia de su papá. Digamos que todavía no se hace la idea de que su padre tenga un nuevo interés amoroso luego de su madre que falleció hace unos años.
