CAPÍTULO 3

4 2 0
                                    

Erick la tomo y yo le agradecía al encargado; todos esos papeles eran importantes y era peligroso que alguien se enterara que yo los tenia, pondría en riesgo mi vida y mi trabajo, llevaba meses investigando a Urriaga y si lograba atraparlo mi carrera mejoraría, me ascenderían a un mejor puesto.

Iba tan perdida en mis pensamientos hasta que mire por la ventana y note que no conocía nada a mi alrededor, al principio pensé que Erick había tomado un atajo para llegar más rápido o que talvez iríamos a comer, sin embargo, algo en su rostro me decía que todo iba mal.

-Erick, por aquí no es- lo mire confundida y el simplemente se limitó a sentir.

-Desde hace tiempo se todo de ti- dijo serio sin quitar la mirada del camino

- ¿De qué hablas? - dije asustada, jamás lo había visto tan serio.

-De Enrique, María- alzo la voz e hizo una pausa- Sabia en que trabajabas, a quien perseguías, sabia absolutamente todo- dijo mirándome de reojo con un semblante serio.

-Eso es imposible, ¿Cómo lo supiste? - dije mirándolo nerviosa y confundida.

-Porque yo también lo busco- dijo y me miro de una forma aterradora.

-Dame mis papeles- susurre asustada y lo mire estirando mi mano hacia él.

-Eso no será posible, tienes aquí todo lo que me ayudara a atraparlo- dijo escondiendo la maleta a un lado suyo y miro la carretera.

- ¡No puedes hacer esto!, lo he seguido por meses, esos papeles yo los conseguí, ¡son míos!, eres mi mejor amigo, no puedes hacerme esto, ¡dámelos! - dije desesperada tratando de alcanzar la maleta.

- ¡Basta! - grito y por un momento me sentí pequeña- alguien como tu jamás lo hubiera logrado, estos papeles me sacaran del embrollo en el que estoy metido- dijo alzando la voz y girando hacia un lugar solitario.

- ¿Embrollo?, ¡de que estas hablando!, te ayudare, lo juro, pero por favor vamos a casa- susurre asustada mirándolo.

- ¡Solo cállate! - dijo desesperado estacionándose enfrente de una casa un poco descuidada.

- ¿Qué hacemos aquí?, dijiste que jamás me dañarías, no te atreverías- lo mire asustada, empezaba a dudar- ¿Verdad? - dije asustada y me arrincone en el asiento.

Erick mantuvo la cabeza baja, parecía que no quería hacerlo; me acerque un poco a él tomando su mano y mirándolo tiernamente.

-Por favor, vamos a casa, no tenemos que hacer esto, saldremos de esta juntos, te lo prometo, jamás te dejare solo- dije asustada tratando de mantener la calma- vámonos- acaricie su mano.

-Aléjate- susurro tomando un suspiro.

-Erick, por favor, solo- se soltó bruscamente de mi agarre, abrió la puerta del auto y bajo.

-Bájate- dijo mirándome desde afuera y recargándose en la puerta.

-Por favor, no quiero hacer- me interrumpió de un grito.

- ¡Que bajes! - grito pegando bruscamente en el auto y dando la vuelta acercándose a mí.

-----------------------------------

PaoCon🍃

El secreto de María Donde viven las historias. Descúbrelo ahora