Mi ángel guardián

OJITOS DE GATO

Jennie POV

En Santa Mónica el clima cálido abundaba la mayor parte del año, en Northeast se encuentra la pastelería Soft & Sweet, su dueña Kim Jennie de 25 años, su ayudante y mejor amiga Kim Jisoo o Chichu como suele llamarle son las encargadas de que todo funcione perfectamente, no es muy grande y apenas le da lo necesario para pagar las facturas, el sueldo de su amiga y poder poner un plato de comida para su pequeña hermana Bella, pero también para las medicinas que requería, pues después de llegar a Los Ángeles a su hermana se le detectó una enfermedad respiratoria a causa del accidente.

Tras la muerte de sus padres en un trágico accidente automovilístico, dejó su vida en Corea del Sur para buscar un futuro mejor en Estados Unidos, con todos sus ahorros y una pequeña herencia de sus padres, tomó a su hermana y emprendió un viaje a un continente desconocido, con un ligero conocimiento del idioma y miles de esperanzas para ella y su hermana. Al llegar busco un hotel barato para pasar la noche, por la mañana dejo a la pequeña en una guardería que vio al frente del hotel, para dispuesta a todo, encontrar un lugar donde vivir y abrir el negocio que tenía en mente.

Desde pequeña su abuela se encargo de enseñarle todo lo que sabe sobre cocina, la abuela Kim tenía un pequeño puesto de pasteles y ella amaba ir a ayudarla, dejar su mente volar en las decoraciones, conforme creció aprendió las recetas y ella misma experimentaba creando así nuevas delicias para el deleite de quién las probaba. Antes de la muerte de sus padres tenía pensado entrar a una escuela de repostería y perfeccionar sus habilidades.

Nunca podrá olvidar las palabras que cambiaron su vida 180°.

FLASHBACK

Era un día frío de invierno en Corea, caminaba sin rumbo pensando en que hacer de su vida, sus padres y hermana habían salido al centro comercial para hacer compras navideñas, ella amaba esa época, pero prefirió no ir para ella buscar los regalos sin que se entere nadie, pero antes de llegar a su destino se encontró un pequeño parque que llamó su atención, a sí que aprovechando el tiempo y que conocía perfectamente a su madre, sabía que aquella vuelta por el centro comercial tardaría mucho más de lo usual, decidió sentarse y apreciar aquel hermoso paisaje, tomó asiento en una banca mientras veía el aliento salir de su boca. Sintió la vibracion de su teléfono celular.

-¿Hola?- preguntó confundida al no reconocer el número.

-¿Señorita Kim Jennie?- se oyó al otro lado.

-Si- respondió dudosa.

-Habló del hospital Gangnam Severance Hospital, sus familiares sufrieron un accidente, requerimos su presencia urgentemente.-en ese momento todo se nubló y temblando tomó un taxi. Apenas bajó del vehículo corrió hacia recepción y con voz temblorosa preguntó por su familia.

-Claro, deme un momento-respondió la mujer del escritorio. Sentía su pie moverse frenéticamente y sus manos húmedas.

La mirada de aquella mujer cambió a una de lástima y temió lo peor.

-Lo lamento mucho señorita, pero los señores Kim llegaron aquí sin presentar signos vitales, lo siento mucho, en la oficina de urgencias puede pasar por los papeles y llevarse los cadáveres-En ese momento sintió que el mundo se caía sobre ella, pero su hermana salió en su mente y rápidamente preguntó por ella.

-Disculpe, pero solo menciono a mis padres, ¿Dónde está la niña que venía con ellos?- Dijo con voz quebradiza.

-Oh pero claro, la pequeña se encuentra en observación en el área de urgencias, no presenta heridas graves, después del papeleo puede pasar a verla y hablar con la trabajadora social para arrgelar los detalles de la tutela- Respondió sin más la mujer y apartó la vista.

Con pesar en sus piernas se dirigió hacia donde estaban los cuerpos de aquellos seres que le dieron la vida y lloró, por lo que pareció una eternidad lloraba, pero la imagen de los ojitos de gato de su hermana se hizo presente en su cabeza, tenía que ser fuerte por ella, tenía que darle un futuro y sacar adelante a esa pequeña que la hacía feliz.

(...)

Dos semanas después, la joven Kim Jennie dejó Corea con todos los recuerdos de sus padres, solo con sus ahorros y algo de dinero que le entregaron de parte de sus padres, tomó a la pequeña Bella que no sabía con claridad que pasaba y emprendió un viaje, que ella esperaba, cambiará sus vidas para bien.

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Hola, espero que les guste esta pequeña historia que se me vino a la mente, tratare de hacer un buen trabajo y si pueden votar y comentar se los agradezco mucho.

Los amiii