Jungkook, un idol famoso, lleva poco tiempo saliendo con un chico que conoció en un hotel en Seúl. Casi no se conocían aún, pero había mucha química entre ellos. Se llamaba Jimin. Y lo que Jimin no sabía era que, siendo un estudiante normal, salir y enamorarte de un idol, que están constantemente viajando, es enamorarte de la forma más cruel, porque tu corazón sufre cada vez que te dice que se va, y no sabes cuando volverá. Él desde que lo conoció se dijo que no se llegara a enamorar tanto. Pero le resultó imposible.
Jungkook despertó. La luz entraba por la ventana y arrojaba luz sobre él y el otro chico que había en la cama. Se incorporó un poco y lo miró atentamente. Llevaban tres días saliendo, por decirlo de alguna manera. Él trabajaba en la cafetería del hotel en el que Jungkook se alojaba. El último día de su gira buscaba un poco de compañía, y lo eligió a él. Realmente era un muchacho precioso. Le contó que estaba estudiando en Seúl aunque era de Busan. Que trabajaba en ese hotel para pagarse el alquiler y la comida porque sus padres no podían hacerse cargo de todo ellos solos. Él era un idol famoso, pero cansado, aunque sólo tuviera 24 años, ese mundo era muy difícil y agotador. Jimin parpadeó y se apoyó en sus codos para mirarlo.
—¿Kookie?
Jungkook sonrió.
—Tengo que irme, Jimin. Tengo que estar en Nueva York en el menor tiempo posible.
Había temido este momento desde que se conocieron por primera vez. Había aprendido que las despedidas costaban mucho.
—¿Puedo ir contigo?
Su voz reflejaba tristeza.
Se le partía el corazón en dos, porque con Jiminnie todo había sido diferente. En vez de irse de fiesta y emborracharse, le había llevado por los rincones de Seúl. Recordaba el segundo día en la cafetería a la que le había llevado, cuando probó el café especial y casi se atraganta de lo fuerte que era. Él se rió, y su risa era mágica, hacía que todo se disipase. Que él ya no fuera Jungkook 'el idol', si no Jungkook 'el chico normal que se había enamorado'. Después fueron de compras, y miró su dedo en ese momento. Llevaba un anillo con diamantes. Compró dos a juego para ellos. Cuando llegaron a la habitación del hotel, hicieron el amor, y se había sentido tan bien... Quería volver a esos días. Además, había sido realmente dulce, porque Jimin era virgen. Y tras acabar, se quedó dormido en su pecho desnudo. Lo observó mientras dormía, su cuerpo apenas cubierto por la sábana, un cuerpo pequeño pero fuerte, que parecía tallado en mármol por el mismo Dios, si es que existía. Y miró su cara. Una cara que no quería olvidar nunca, por muy lejos que se fuera. Hicieron el amor varias veces tras esa, y siempre sentía un placer de otro mundo, algo que no había experimentado con nadie jamás.
Se inclinó y le besó dulcemente.
—Te prometo que volveré.
Realmente no sabía si volvería, lo único que sabía era que no quería irse.
Hundió la nariz en el pelo de Jimin. Olía a vainilla. Todo en él le atraía tanto... Pero su smart watch vibró indicándole que el taxi estaba de camino para llevárselo al aeropuerto.
Y antes de hacer las maletas y darle un último beso, dijo algo que nunca había dicho en su vida.
—Te amo, Park Jimin.—salió por la puerta antes de que pudiera llegar a contestarle.
Jimin quedó apoyado sobre sus codos mientras las lágrimas empezaban a brotar de sus ojos. Ahí se iba el amor de su vida, y quien sabía si lo volvería a ver algún día, en algún sitio que no fuera en la multitud de uno de sus conciertos.
Jungkook estaba ya casi llegando al aeropuerto, cuando recibió un Whatsapp.
«Jimin: Vuelve... Ven aquí.»
Cerró los ojos. Estaba a punto de hacer una locura. Y la iba a hacer.
Se inclinó para hablar con el taxista.
—Por favor, pare. Vuelva al hotel.
«Jungkook: Estoy volviendo. Ya voy.»
ESTÁS LEYENDO
come back... be here. | kookmin one-shot
Fanfiction«Vuelve... Ven aquí, Jungkook.» ✧ one shot basado en la canción 'Come Back... Be Here', de Taylor Swift.