En contra de los ideales. Min YoonGi +18

10. Un poco de mi

►POV HA-NEUL◄

YoonaGi me tenía contra la pared besándome, deje de luchar en cuanto sus boca ya no sabía tan mal, mis brazos se enredaron en su cuello y sus manos las bajo a mi cintura. Me caro y enrede mis piernas en su cintura, me llevo directo a la cama, sin importar que mi ropa estuviese mojada me recostó en esta.

Sus manos comenzaron a subir hasta llegar a uno de mis senos y acariciarlos, cuando la cordura entro en mi rápidamente lo aleje.

—No puedo hacer esto después de que te acostaste con esa mujerzuela en los baños del club

Suga se quitó de encima de mí y se quedó por varios segundos callado.

— No  tuve sexo con ella, de hecho no he estado con nadie desde que me case contigo.

— Eres un Mentiroso, solo lo dices para acosare conmigo. Cuando recién vivíamos juntos llegaste con la camisa embarrada de labial.

— Si, eso es cierto y creo que he dado señales de que te eh engañado pero no, yo eh querido estar con mujeres, eh querido saciar mi instinto de hombre pero, no puedo y no tan solo por ti, sino porque hace muchos años estuve metido en el mundo de las drogas, dinero y mujeres. Lisa no merece eso.

— ¿lisa? ¿Por qué dices eso? Y ¿Cómo es eso de que estuviese en drogas? — pregunte curiosa, poco a poco iba descubriendo cosas nuevas de YoonGi y eso comenzaba a gustarme.

— no quiero hablar de eso. — dijo sin ninguna expresión en su rostro

— ¡Por favor! Dímelo. Tengo curiosidad.

— Te voy a contar pero si me sirves un wiski

Me pare rápidamente de la cama y fui a bajo para traer la botella de wiski, Tome dos vasos de vidrio y subí rápidamente cuando entre al cuarto no vi a YoonGI. Me senté en el sofá que se encontraba bajo la tele y puse la botella y los vasos en la mesa de centro que se encontraba frente a mí.

Vi salir a YoonGi del baño con una toalla entre sus manos, se sentó a lado de mí y me puso la toalla en mi espalda. Tomo los vasos y los lleno de wiski, me dio uno y el otro se lo quedo él. Después de darle un sorbo a su vaso hablo

— cuando cumplí los 18 años tome la carrera de administración de empresas y turismo, tome clases de idiomas y muchos cursos de computación, me esforzaba mucho para que mi padre se sintiera orgulloso de mi, pero jamás sucedió. Mi madre por otro lado siempre se la pasaba de viaje en viaje, salía con sus amigas a todos lados y prácticamente siempre estaba solo en casa, ella es muy amorosa al igual que papa pero siempre estuvo primero Jackson. No puedo quejarme de mi crecimiento, fui muy bien educado la verdad es que nunca me falto nada pero al saber que jamás podría superar a mi hermano decidí dejar de esforzarme comencé por darme gusto a mí y a nadie más – dio un trago más a su vaso- ahí fue cuando yo comencé a probar el alcohol, cada fin de semana eran fiestas, antros y alcohol, así dure por un buen tiempo hasta que uno de mis amigos, que en ese entonces éramos inseparables, me dio a conocer la cocaína, comencé a consumirla constantemente hasta que se me hizo una adicción, cuando tuve mi primera vez con una mujer estaba drogado y muy ebrio y desde ese entonces mi vida estaba echo un desastre. Las mujeres, las drogas y el alcohol eran mi vida, la escuela paso a ser segundo plano y lo que mi papa y mama opinaran ya no me importaba. — dio un suspiro al recordar esa época de su vida.

— ¿Cómo saliste de eso? — dije sirviéndome un vaso más de wiski

— Pues así dure un año, cuando cumplí los 19 años la escuela me amenazo en darme de baja por mi faltas seguidas, la verdad es que no me importaba mucho pero tuve que poner más atención es mis estudios, la verdad es que solo iba por asistencias –rio- cuando comencé a estar más presente en la universidad se hablaba mucho de una chica extranjera que llego a la universidad. Me llamo la atención el hecho de que decían que era la chica más bonita del campus y para mi mente retorcida era la mujer perfecta para probar mis habilidades de casanova. La investigue por unas semanas y la verdad es que si era muy bonita y de descendencia coreana y australiana, se llama Lisa, mi ex novia