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Al final del día, me puse a meditar sobre lo que ocurría alrededor de mi vida. Mi hermano se había ido para siempre y su amante le había acompañado años después, me mantuve en mi propio castillo, resguardándome del odio que la gente lanzaba en cada oportunidad y me mantuve solitario y triste por varios años. Creí que no existiría algún tipo de felicidad dentro de este podrido y rencoroso mundo, pero me equivoqué por completo.

En medio de una brisa nocturna y el murmullo de las ramas chocando entre sí, observé el suave movimiento de cabellos dorados en el camino, pasos sigilosos y manos nerviosas se mostraron tras las rejas de la entrada, un pequeño silbido lejano se escuchó y el cuerpo pequeño de un hombre aterrizó sobre la hierba.

Sentí que debí interferir y lograr ahuyentarlo de mi hogar, pero su rostro me impidió hacerlo.

Sus bellos ojos, sus bonitos y dulces labios, su piel de porcelana y sus hermosos y coloridos cabellos rubios, lograron exiliar todo mi odio y reemplazarlo por un cálido y desconocido sentimiento. Mis ojos lo observaron por varios minutos hasta que desapareció.

Así fue nuestro primer encuentro. Y de la misma manera fueron los siguientes.

Hasta que decidí hablarle a través del cuerpo de Taehyung.

Hasta que decidí entregarlo a un hombre que no era yo.

- ¡Señor Min!

Escuché su voz a la lejanía y vi su cuerpo correr con una dulce sonrisa en los labios. Sus cabellos se movían al compás del viento y dejaban correr con la brisa su dulce fragancia. Podía oler la exquisitez de su sangre desde mi posición, Hoseok era una maravillosa obra de arte, no solo era hermoso en el exterior, también su interior podía enorgullecerse de lo bondadoso que era, pues su sangre era tan dulce y apetecible que podía medir sus buenas e inocentes intenciones en cada accionar.

-Pude comprar un libro con el dinero que ahorré en mis ventas, - dijo con total entusiasmo- es difícil para un niño de mi clase poder obtener un libro como este, normalmente lo obtenemos de la pequeña biblioteca de la ciudad, pero quería tener uno para mí solo y ahora puedo obtenerlo.

Su sonrisa fue inmensa y pude ver aquel brillo en sus ojos, los cuales me incitaban a rodearlo con mis brazos y probar de sus dulces labios, aquellos que se mantenían vívidos y apetecibles frente a mí.

-Es una pequeña antología, aquí se encuentran muchas de las leyendas de mi pueblo. ¿Le he dicho que adoro lo misterioso y antiguo? Tengo planeado terminarlo en solo dos días, para poder comprar otro.

- ¿Dos días?

- ¡Por supuesto! Me encanta leer y sé que una vez que empiece este texto no podré terminarlo. Es más, empecé hace poco y ya he leído 50 páginas. No será difícil obtener mi meta de leerlo en dos días.

- ¿Te apasiona la lectura?

-Adoro la lectura, - confesó- siempre he logrado conseguir paz en los libros y las historias plasmadas en cada página y puedo alejarme de mi realidad por un momento, viviendo rodeado de fantasía y amor.

Mientras iba contándome sobre sus pasiones y aquellos hábitos extraños, iba dándome cuenta de los sentimientos que comenzaron a despertar gracias a él. Era la misma mirada que había visto en mi hermano años atrás, el mismo sentimiento y el mismo dolor al saber que un romance entre ambos era improbable y prohibido, tenía aquella incesante molestia en la boca del estómago, pues sabía que por mucho que deseaba tenerte en mi vida una eternidad, no podría ser real.

¿Qué hiciste conmigo, pequeño Hoseoki?

¿Por qué no puedo pensar en la soledad nuevamente? ¿Por qué cada vez que me deprimo por mantenerme en la oscuridad de mi castillo, apareces en mis pensamientos y llenas mi mundo de color?

The Truth Untold  [YoonSeok]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora