Sueño realizado

Capítulo 10

Narras tú

Ya habían pasado los dos años exactos estaba completamente aterrada, no me había llegado jamás un mail, ni una llamada, nada, no quería que dejara a Súper Junior eran su vida, pero a la vez estaba emocionada por que fuera verdad lo que había prometido, me arregle muy linda, esta vez con jeans, zapatos de lona y una playera con estampado de I love Súper Junior… estaba por llegar la hora pactada y ni rastro de él, llego la hora y nada, pero decidí seguir esperando, el cielo se fue nublando, paso una hora y no había rastro, ni una llamada, comenzaba a preocuparme que todo hubiera sido una mentira, pero me quede ahí firmemente debía creer en él, pasaron dos horas comenzaba a briznar, ya casi no había gente en la calle, la temperatura estaba bajando, comenzaba a dudar que hubiera sido sincero, la tristeza se apodero de mi y no quise moverme, más que por cualquier cosa, era porque me sentía burlada, había hecho todos mis trámites para el pasaporte y una visa de seis meses, me la habían dado ese mismo día, todas mis cosas estaban listas en la puerta de mi cuarto, incluso había aprendido coreano en una escuela autorizada por la embajada coreana, me sentía humillada, creí en cada una de las palabras de Ryeo Wook nunca pensé que también los coreanos pudieran ser tan crueles, el corazón me dolía, pero era por mi culpa, ¿Qué tonta se cree lo que le dice un idol que conoció de un día?, la lluvia comenzó a caer en gruesas gotas, al menos así nadie vería mis lagrimas correr por mi rostro, los autos pasaban a toda velocidad empapándome con el  agua sucia y helada que se acumulaba en el suelo, ahora estaba sucia y calada hasta los huesos… dieron las doce de la noche y no llego, limpie mis lagrimas con el dorso de mi mano que fueron reemplazadas por mas lagrimas y gotas de lluvia, me regañe a mi misma por haber sido una idiota y camine bajo la lluvia en dirección a mi casa.

No había dejado atrás del todo el restaurante cuando un auto negro se detuvo a mi lado, los vidrios estaban polarizados así que no veía a quien estaba adentro, salieron dos tipos altos y cubiertos con pasamontañas me sujetaron con fuerza, me asuste y reaccione con violencia, golpee a uno de ellos en la nariz haciendo que me soltara, al otro no lo pude golpear en la cara pero le di una patada en la espinilla que lo obligo a soltarme, emprendí la carrera para escapar de esos tipos pero resbale caí de espaldas golpeándome la cabeza

Desperté en una habitación de hotel aparentemente de lujo, fuera de ella se escuchaba una discusión.

- Te dije que era demasiado fuerte para mí- dijo una de las voces

- ves los inconvenientes de que fuera tan bajita- parecía molesto y dolido quien hablo

- debiste bajar tu- asevero una tercera voz- así al menos el único golpeado seria el que se lo merece

- tengo miedo… perdonen- cuando escuche esa voz me levante de golpe y corrí a la puerta abriéndola de par en par, ahí estaba, era Ryeo Wook- (tu nombre) ¿Qué haces levantada? Debes dormir

-dormir, dormir, ¿crees que quiero dormir?, te espere por horas, no solo eso, mira como estoy, todo por esperarte, eres un tonto, no pudiste simplemente decir que no fuera, que no vendrías, que habías mentido, ¿por qué someterme a toda esa humillación?- dije entre lagrimas si analizar realmente lo que estaba diciendo

- pero estoy aquí, vine a llevarte conmigo, ¿no lo entiendes?- dijo acercándose con los brazos abiertos

- no me toques- dije comprendiendo todo y soltando unas lagrimas

- pero (tu nombre) te amo, he venido…

- estoy muy sucia, fría y mojada, te enfermaras- el soltó una carcajada musical y me abrazo con fuerza

- eso es lo que menos me importa- dijo buscando mi mirada y cuando finalmente le devolví la mirada él me beso

- hey chicos seguimos aquí- dijo shindong- yo no hago esas cosas con Nari frente a todos ¿o sí?-Ryeo Wook me soltó y reímos, tomo mi mano y la apretó fuertemente, si los chicos estaban ahí significaba que el seguiría con ellos, ahora estaba lista debíamos afrontar el futuro, pero juntos no habría nada malo que pudiera pasar…

FIN