CAPITULO 4

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—Descansa— Papá se va a su habitación y yo subo a la mía, la casa no es pequeña y eso me preocupa, solo somos dos personas los que vamos a vivir aquí y esta casa parece como para dos familias enteras.

En mi habitación todavía las maletas están sin desempacar y las cajas están apiladas a un extremo de la habitación, los muebles llegan mañana, así que mañana podría empezar a deshacer las maletas de recién.

Busco en mi mochila y saco mi ropa de dormir, me cambio y voy directo a la cama.

Miro el techo, tratando de conciliar el sueño, pero se me es casi imposible, cuando estaba lográndolo de repente se abre las puertas del balcón de golpe.

Maldición

Me levanto de la cama y las cierro poniendo el seguro.

Vuelvo a la cama, me siento un rato procesando todo lo que paso este día y me vuelvo a recostar, cierro los ojos de nuevo y trato de dormir.

Al día siguiente me levanto temprano, voy al baño, me pongo unos shorts y una polera, y bajo a la cocina.

—Buenos días— Dice papá mientras toma una taza de café, en la mesa veo otra taza de café y un tazón con cereal.

—Buenos días.

—¿Qué tal dormiste la primera noche? — Me mira un poco extrañado casi podría decir preocupado.

Sonrió para aliviar el ambiente y respondo — Tranquila, dormí como un bebé.

Suelta un suspiro de alivio y asiente con la cabeza.

Estamos desempacando las cosas de la cocina, cuando llega el camión de mudanza, el camión no era muy grande, puesto que la casa es semiamoblada, por lo que papá decidió donar los muebles que no utilizaríamos.

—Buenos días señor Miller— Saludan a papá los señores de la mudanza y comienzan a descargar.

Trato de ayudar llevando algunas de mis cosas del camión, cuando estaba bajando mi caballete del camión parece que hice mucha fuerza para jalarlo y terminé cayendo del camión, estaba preparada para el impacto con el suelo y cerré los ojos, pero nunca paso.

—Debería tener más cuidado, Bella dama —Escucho esa voz y abro los ojos.

—Harry —Suelto en un jadeo.

Él sonríe y me ayuda a ponerme de pie.

—¿Usted es propensa a estos accidentes o me equivoco? — Su sonrisa parece divertida y yo igual sonrió.

—Todo el tiempo, parece que tuviera dos pies izquierdos — Me rio de mi propio comentario y él también lo hace.

Su risa es muy bonita y se podría decir que familiar ¿Lo abre conocido en otro lugar antes?

—¿Te conozco de algún lugar? —EL me mira y se pone algo serio—Tu cara se me hace muy familiar a alguien, pero la verdad que no se a quién.

Le sonrió un poco tímida, él me mira unos segundos y sonríe.

—No podría olvidar nunca a una mujer con la belleza como la que usted posee, Bella dama — Se me ponen rojas las mejillas y suelto una sonrisa.

—NOAH, VEN AQUÍ —gritó mi papá desde la puerta de la casa.

—Mi papá me llama—sonrió como disculpa y él asiente con la cabeza, mira hacia la casa y luego me mira con el ceño algo fruncido.

— Claro que no hay problema, nos vemos en otra ocasión—Me da un beso en la mejilla y me dice cerca del oído—Hasta pronto Bella dama.

Se me suben los colores a las mejillas y yo solo asiento, me doy la vuelta y voy donde mi papá.

—¿Sucede algo? —Pregunto, puesto esta con el ceño fruncido y con la vena de su frente muy marcada.

—¿Quién era ese chico? —me dice tratando de regular su tono de voz, pero lo conozco bien y sé que está preocupado por algo.

—Un chico que conocí en el restaurante, nada mas —Entro a la casa y veo a los de la mudanza en la cocina.

— ¿Te dijo algo? —Ahora pregunta más nervioso, que sucede con mi papá.

—No solo paso a saludar, ya que me vio bajando del camión —Lo digo como si nada, pues esa es la verdad y ahora yo frunzo el ceño.

Papá me mira unos segundos y los de la mudanza también me miran.

Eso es raro.

— Esta bien, solo ten mucho cuidado—Me da un abrazo—Y sobre todo no invites a nadie que no conozcas bien a entrar a la casa —Lo dijo tan serio que solo asentí con la cabeza.

Luego de esa charla, seguimos acomodando todo y ya en la noche teníamos todo listo.

Los dos nos sentamos en el sofá de la sala y suspiramos.

—Fue un día muy agotador — Papá se levantó del sofá para poner una película, mientras yo me arropaba con una manta.

Papá se volvió a sentar, me acurruque junto a él y comenzamos a ver la película.

Estábamos creo que a mitad de la película que me comienza a dar sueño, voy cerrando los ojos, a mi mente viene la imagen de una cascada con el agua azul como la del cielo y con esa imagen entro al mundo de los sueños. 

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⏰ Última actualización: Nov 16, 2020 ⏰

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