Capitulo 1

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Yerin

Era una mañana normal en mi oficina cuando la Sra. Hwang irrumpió en ella con ojos suplicantes y una cara decaída.

"¿Tía Tiffani qué estás haciendo aquí?" pregunté mientras le daba algo de agua y la dejaba sentarse en el sofá, ella me miraba directo a los ojos "Yerin nuestra compañía está cayendo" ella sostenía mi mano firmemente.

"Por favor sálvanos, eres la única persona que puede salvar todo lo que hemos construido con tanto esfuerzo". Ella agacho su cabeza y lágrimas caían por sus mejillas.

"Mi esposo ha estado engañándome por mucho tiempo, además, se ha llenado de deudas de juego y ha vendido las acciones de la compañía... y SinB es muy joven para manejar todo esto. Yerin por favor ayúdanos".

La tía Tiffani es la mejor amiga de mi madre además es mi madrina, cuando mi mamá murió ella me preparó perfectamente para ser la nueva CEO de nuestra propia compañía y sin ella no sería capaz de estar donde estoy hoy en día.

"Lo hare, pero ¿cómo?".

"Cásate con mi hija..." dijo ella firmemente.

Estaba sin palabras.

"...Y mantén mi compañía por 2 años... después veremos qué es lo que sucede y decides si quieres presentar el divorcio después de esos 2 años. Pero deseo que puedas hacer que ella se enamore de ti".

-

Mis pensamientos se pararon y fui traída de vuelta al presente al ver a SinB casi arrastrándose para ir a la cocina. Inmediatamente la ayude.

"No me toques" dijo ella y me empujo pero ella estaba muy débil para lograr hacerlo.

"Solo déjame ayudarte" sostuve su cintura pero ella seguía empujándome.

"Solo esta vez" la sostuve firmemente mientras la guiaba a través de la cocina y le pasaba un vaso con agua que ella solo acepto sin mirarme.

"¿Qué estás haciendo aquí? Ella pregunto mientras se alejaba un poco. Yo tenía una reunión de trabajo en Tailandia y mi vuelo de regreso era la próxima semana pero cuando Yuju, mi secretaria, me llamo y dijo que mi esposa estaba enferma, encontré el vuelo más rápido para volver.

Me encogí de hombros "Mi esposa está enferma así que necesitaba estar allí... para ella" sonreí y limpie su cara con una toalla húmeda.

Ella golpeo mis manos "no lo estoy. Y tú no tenías porque" murmuro ella y salió lentamente de la cocina.

Suspire y le di un vistazo al reloj eran las siete y media de la mañana. Me quite mi abrigo y fui de vuelta a la sala de estar y lleve mi maleta de vuelta a nuestra habitación e inmediatamente fui escaleras abajo a cocinar algo para desayunar.

Tan pronto como termine. Puse algo de mazamorra*, jugo de naranja y algunas medicinas en la bandeja y la traje a nuestra habitación.

Golpee suavemente a la puerta pero no había respuesta. La abrí y vi a mi esposa acurrucada como un ovillo en medio de la cama. Puse la bandeja en la mesilla y me agache para mirar a SinB más de cerca.

Su piel blanca como la leche.

Su mentón.

Sus pestañas.

Y sus labios.

La primera vez, y la que pensé sería la última vez que probaría esos labios fue el día de nuestra boda. El día que ella más desprecia. Ha pasado un año de ese día. El día en que ella lloro no a causa de la alegría, sino a causa de la tristeza. Ella empezó a moverse por lo que retrocedí y ordene la bandeja.

Me senté a un lado de la cama mientras sostenía el tazón con mazamorra. Sin decir nada ella también se sentó en la cama y apoyo la cabeza en cabecera y comencé a alimentarla, cuando ella termino le di los medicamentos y la deje que se acostara nuevamente.

"¿Por qué estás haciendo esto Yerin?" me pregunto mientras miraba a la pared.

"¿Hay alguna razón para que no lo haga?" pregunte de vuelta pero ella no me respondió así que solo limpie la bandeja pero mis ojos se quedaron atrapados en el espejo y mire a mi reflejo.

Luzco terrible.

Suspire, todavía estoy llevando puesto la ropa desde el vuelo, mis ojeras se están volviendo más oscuras y mi cabello es un desastre.

Necesito descansar.

Camine fuera de la habitación y rápidamente me acosté en el sofá y dormí un poco.



N/A: *prefiero pensar que se trata de una avena hervida

Corazones fundiendoseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora