Criatura del bosque (Soukoku)

Chuuya es un adulto de veintiocho años, lleva mucho tiempo trabajando, hace poco sufrió un colapso por culpa del estrés, había tenido tanto trabajo que ni siquiera se daba cuenta de lo que hacía mal hacia su salud

Akutagawa era uno de sus amigos más cercanos, él había notado el estrés y cambios físicos en Chuuya, la preocupación lo invadió y prácticamente obligó al pelirrojo a tomarse un descanso. El pelinegro le ofreció ir a un onsen en medio del bosque

—¿Hay un onsen en medio del bosque?

—Si

—Eso es raro..¿No será un onsen maldito?

—No seas idiota. El onsen es de mis abuelos, no va mucha gente allí, así que podremos ir y disfrutar unos días, ya hablé con tu jefe, te dio dos semanas de vacaciones

—Él jamás haría eso..

—Fue porque lo obligue a ver a Mori

—¿Quién?

—Mori es el doctor que te atendió cuando sufriste el colapso, él hablo con tu jefe y lo convenció de darte vacaciones para que tu salud no empeore

—Ah..gracias Akutagawa

—No hay de que

Ambos estaban en la casa del pelirrojo, Chuuya estaba usando su pijama y estaba acostado en su cama mientras hablaba con Akutagawa

—¿Llevarás a Atsushi?

—Si, sabes que jamás salgo de casa sin mi gatito

—¿A qué hora iremos?

—Mañana vendré por ti a las siete de la mañana, empaca lo justo y necesario, ¿Bien?

—Si si

—Deje comida en la mesa, cuando te dé hambre solo calientala

—Si

Akutagawa se fue de la casa de su amigo dejándolo solo. Chuuya se quedó en cama mirando el techo, el bosque más cercano era conocido por sucesos "paranormales", muchos decían ver seres mitológicos, como hombre lobo, hombres mitad lagarto, hombres gato, hombres zorros, perros, corderos, caballos, era muy raro ya que las personas que decían haberlos visto sólo veían a los haberes mitad de un animal, no había rastros de mujeres, entonces ¿Cómo se seguían reproduciendo?

Dejo de pensar en idioteces y empezó a empacar cosas en su maleta, solo eran rumores inventados por gente aburrida de su vida que no tenían nada mejor que hacer

                                 [• • •]

A la mañana siguiente ambos iban en el auto, Akutagawa iba conduciendo mientras Chuuya jugaba con Atsushi en el asiento del copiloto

—¿Dónde lo encontraste?

—En el bosque al que vamos ahora

—Es muy tierno

—Si, cuando lo vi lo adopte enseguida, el pobre tenía hambre y estaba maullando

—Awww, cosita

Luego de unos minutos llegaron al onsen, bajaron del auto y se dirigieron a la habitación en la que se quedaría, Chuuya estaba impaciente en probar las termas y poder relajar sus músculos con esa caliente agua que le recorrería el cuerpo

—Chuuya

—¿Si?

—Tengo que ir a comprar unas cosas, tú empieza a relajarte, volveré en dos horas

—Si

Chuuya espera a que Akutagawa se fuera antes de desnudarse, camino a la terma y se sentó rápidamente, sentía como la temperatura de su cuerpo empezaba a subir, se relajo mirando el techo. No se salió hasta que empezó a marearse por el vapor, salió de la acogedora terma, se secó con una toalla y se puso una de las yukatas que ofrecían en el onsen, se puso unas sandalias y salió a caminar, veía todos los árboles, las hojas que se movían por las leves ráfagas de viento, le gustaba el bosque, era lindo y había muchos animales bonitos como lechuzas, búhos, conejos y pájaros carpinteros. Camino recto para no perderse y llego a una roca grande, gotas empezaron a caer del cielo, una tormenta se acercaba, decidió volver al onsen para no enfermarse, camino allí se encontró con una criatura que nunca antes había imaginado que existía, los míos era reales

Había un pequeño humano mitad zorro, parecía un bebé, el pobre tiritaba de frío. Se acercó y le extendió la mano, quería llevarlo al onsen y calentarlo. Dazai, la pequeña criatura, estaba sorprendido, normalmente los humanos al verlos salían corriendo y gritando, o intentaban matarlos, se sorprendía de que un humano se acercara sin miedo y le extendiera la mano

El pequeño zorro se transformo, ya no era pequeño, era un humano alto con orejas y cola de zorro, Dazai se acercó y acorraló a Chuuya en el suelo

—..¿Qué eres?

—¿Eso importa?

—..........

—Mi nombre es Dazai, mucho gusto

—..........

—¿Cómo te llamas?

—Nakahara..Nakahara Chuuya

—Mucho gusto Nakahara..¿Ibas a llevarme contigo?

—Si

—¿Y ahora?

—..Creo...no lo sé, estoy confundido

—¿Me vas a dejar solo en una tormenta? Qué malo ChuChu

—..Bien, vamos, pero...Mm..¿Puedes transformarte en zorro?

—Si

El castaño se transformó en un lindo y pequeño zorro bebé, Chuuya lo cargo y camino al onsen, estaba confundido, no sabía que era lo que acababa de ocurrir, pero poco le importaba, no podía dejar a alguien congelandose por la lluvia, al llegar al onsen vio como Atsushi se acercaba al zorro que dejaba en el suelo. Dazai rápidamente se transformo en adulto con sus orejas y cola al aire

—¡Atsushi-kun!

Chuuya abrió los ojos a más no poder al ver al lindo gatito transformándose en un humano de cabello blanco, cola y orejas

—¡Dazai-san!

Akutagawa entro a la habitación y vio la situación, rápidamente se acercó a Chuuya y lo sentó antes de que su amigo se desmayara

—Te explicaré todo...

—¡Empieza!

—No sé el nombre de su especie, pero son reales, habitan por todo el bosque, cuando un humano encuentra a uno es una señal

—¿Señal?

—Señal de amor..tú y ese zorro están destinados a estar juntos

—..¿Es una broma?

—No..a mí me pasó lo mismo con Atsushi

—..Ósea que...yo y el zorro..

—Si

—Sera un gusto ser tu novio ChuChu, jamás imaginé que un humano me encontraría

Chuuya se desmayó cayendo sobre el suelo, Dazai rió y se acercó al humano, le dio un beso en la mejilla antes de quedarse viendo la linda cara de su destinado

—Será divertido aprender a convivir juntos, Chuuya

Susurró el castaño sonriendo mientras acariciaba las lindas de piernas de su destinado, esto sería divertido

      —Fin—
No quede conforme con cómo quedó, probablemente lo borré en un tiempo