Si fueras mía | ChaeLisa |

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pasó entre la multitud de estudiantes que se encontraban en el comedor, tomó una bandeja para colocar lo que iba a consumir. no tenía apetito pero no tenía de otra más que solo comer
pidió una manzana, unas galletas saladas acompañada de queso en crema y un refresco, se dirigió a la mesa donde estaban sus amigos y se sentó en silencio

—¿como te fue en la clase de cálculo?

—un asco en realidad— rió — siempre detesté todo lo que tenga que ver con números desde primaria

—como es que aprobaste Manoban..?

—supongo que los profesores ya no me aguantaban y para no volverme a ver el siguiente año me aprobaban

—eres todo un caso perdido— negó con la cabeza mientras se echaban a reír

no estaba prestando atención a lo que hablaban el par, estaba tan pérdida que incluso estos lo habían notado.
Taehyung le hizo señas a Lisa para que notará el extraño comportamiento de su amiga

—¿..-Rosé?

Lisa dirigió su vista a la nombrada que hasta ahora no le había dirigido la palabra

—mmh-...—levantó la cabeza notando que los dos la estaban mirando

—¿sucede algo? estás muy callada hoy

—s-si...- solo no dormí bien es todo

—Rosie sabes que puedes confiar en nosotros— no le había convencido su respuesta para nada, algo más le estaba pasando

—lo sé

—no haz tocado tu comida y es raro porqué siempre tienes hambre— habló esta vez Lisa

—comí antes de venir aquí

—¿segura?

—si..-estoy bien— se levantó de su asiento. le estaba incomodando que le hicieran tantas preguntas —pueden comérselo— extendió su bandeja hacía ellos y salió de allí

Lisa la miró extrañamente desde su asiento como esta se alejaba cada vez, algo le había ocurrido, estaba muy segura de ello

—¿crees que esté bien?— preguntó taehyung tomando una galleta de la bandeja que había dejado la rubia

—está mitiendo.— respondió segura

—como...-

—vamos Tae hasta un ciego se daría cuenta. Rosé es malísima para mentir y cada vez que lo hace mira hacía bajo

—no había notado ese detalle. Lalisa si que conoces bien a tu esposa— dijo dando pequeñas palmadas

—por dios cállate— le dió un leve empujón— iré a ver que le ocurre

se levantó y fue en busca de su mejor amiga. Desde muy temprano tenía ese comportamiento raro, algo que se le hizo extraño a Lisa, no le gustaba que Rosé ahora le oculte cosas ya no le contaba lo que pasaba como lo solía hacer antes incluso hasta el más mínimo detalle le comentaba y ahora era todo lo contrario. todo había cambiado desde que llegó Park Jimin, cada vez que su Rosé hablaba de él fingia prestarle atención pero en el fondo moría de celos.

miraba hacía los lados de el pasillo para ver si en alguna parte se encontraba su pequeña pero no, no había rastros de ella
pensó en donde más pudo haber ido y no se le vino nada a la mente, rendida ante esto volteó para ir de regreso a su salón de clases, ya había finalizado la hora de la merienda por lo tanto pronto iniciaría la siguiente materia
pero primero pasaría por el baño femenino para poder lavar sus manos y retocar su maquillaje.