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Lalisa

podía notar en sus ojos que había estado llorando, estaban hinchados y rojos se veía cansada. lo más probable era que no tuvo una buena noche

—¿por qué no fuiste hoy?— traté de sonar lo más calmada posible. no quería iniciar otra discusión nuevamente, no con ella y mucho menos ahora

se sentó en su cama con la mirada agachada, sí, estaba triste. quería abrazarla protegerla y hacerle sentir que conmigo estaría segura, quería saber la verdadera razón de sus lágrimas, quería saber que era lo que no la dejaba tranquila

—n-no me sentía bien en la mañana..-

y lo podía notar pero estaba segura que no solo era eso, sus palabras no me convencían del todo —¿que es lo que pasa?

ya había olvidado de cuántas veces le repetía esta pregunta. tan difícil se le hacía responder con la verdad? o quizá no quería preocuparme
podía notar a Rosé que últimamente había cambiado, su estado de ánimo no era el mismo ni sus actitudes, incluso nuestra relación de mejores amigas cambió, la sentía más distante y podría jurar que desde que está con el idiota de Jimin

—n-no es n-nada..— habló

mentira.

no es nada

nada, nada era lo que siempre respondía el nada no la dejaba dormir y la hacía llorar. yo no era estúpida claramente no me iba a conformar con esa misma respuesta que siempre daba, ya estaba harta

y me sentía tan mierda porqué esto pasaba en mis narices, seguía permitiendo que le hicieran daño y no hacía nada. no podía hacer absolutamente nada si ella no me decía con exactitud que ocurría

ni siquiera podía protegerla como tanto decía, ahora sí me sentía idiota

—eso es una total mentira. —me acerqué a ella —te encuentro aquí con los ojos llorosos y dices que no te pasa nada? ya ni siquiera hablamos como solíamos hacerlo antes

no me miraba, su vista estaba en el suelo, estaba perdida, quién sabe si me estaba escuchando pero seguí

—¿que es lo que pasa Roseanne? por qué de repente te comportas así. te cierras a todo, yo estoy aquí chaeng y siempre estaré contigo..— quería darle al menos seguridad en mis palabras —r-recuerdas la promesa que hicimos? prometimos que pase lo que pase estaríamos juntas y si alguna de las dos tenía problemas no encargaríamos ambas de salir de ello

pude notar que si me estaba escuchando, sus ojos empezaron a llenarse de lagrimas otra vez, ya entendía lo que pasaba

—Rosé. es tu mamá? n-nuevamente estás teniendo problemas con ella?— su madre no era el tipo de persona en quién confiar siempre me di cuenta de eso, es egocéntrica, egoísta y algo interesada. Absolutamente diferente a Rosé
anteriormente ya habían tenido muchos problemas por alguna razón siempre salía involucrada

lo único que pudo hacer bien es traer a Rosé al mundo y no, no estoy exagerando.

—r-rosie..-

—mi papá se fue— habló —no va a regresar él se fue. Lisa no quiero estar aquí— soltó el llanto frente a mí

no tenía idea de que hacer, me rompe el corazón verla así. No podía hacer nada respecto a su familia y eso me frustraba, sin decir más la abrasé
sentí un nudo en la garganta y muchas ganas de llorar al escuchar su llanto pero tenía que mantenerme fuerte para ella, Rosé no podía verme débil

—y-yo..-siempre estaré contigo— traté de tranquilizarla y darle seguridad conmigo.

estaba temblando

Si fueras mía | ChaeLisa |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora