Na JaeMin ¡JaeJun!

8: "-Toma hijo. Un lubricante nunca está de más-"

JaeMin caminaba a mi lado. Mientras tanto yo escuchaba su conversasión con su mamá

—Mamá. Mi novio me invitó a dormir a su casa porque afuera hay mucho peligro. ¿Me puedo quedar?— Estamos separados por al menos, lo que cuento yo, dos personas más o menos y aún así escuché el grito de felicidad de su mamá

—M-Mamá. M-mi novio está a mi lado, por favor cállate— Sonreí un poco al escuchar a su mamá bufar. Ella mencionó un si y cortó mientras gritaba

—Bien, tu madre y la mía estan locas— Ambos reímos en susurros con algo de incomodidad. Nunca estaba solo en la calle y menos con alguien tan guapo como lo es JaeMin

Caminamos hasta llegar a la puerta de mi casa. En donde mi mamá comía un bollo mientras nos miraba llegar. JaeMin tomó mi mano y yo sonreí nervioso. JaeMin es lindo, pero no quiero que esto valla tan rápido

RenJun. 'Esto' es una farsa

—Hola, Mamá— sonreí y besé su mejilla. Era incómodo mirar a mi madre besar la mejilla de mi reciente amigo nuevo

—¿Tienen hambre? Hice pastel de chocolate— mi madre tomó el brazo de JaeMin y lo metió dentro de la casa. Yo los seguí. JaeMin se veía nervioso y divertido por la situación

Mi mamá nos sirvió en los platillos una rebanada de pastel a ambos. Llendose de la cocina para sonreír antes de cerrar la puerta. La cocina es grande. Color blanca, alfombra negra, mesón de cerámica blanca y todo así. Blanco y negro. JaeMin comía energético su pastel mientras yo decidí dejarlo de lado. No tengo ni el más mínimo apetito

—¿Nof comeraf?— preguntó, Mirándome. Yo negué y el comió también mi pastel. ¿Cómo es que es tan delgado si no deja de comer?

—¿Estás lleno?— le pregunté. Sonriéndole

—Sip, espera— empezó a pasar la lengua por sus dientes. Se veía muy sexy haciendo eso. Tapé mis ojos y me sonrojé— ¿Qué pasa?— agregó

—¿Sabes que hurgarte los dientes en la mesa es de mala educación?— respondí. Tapándome

—Bien, vamos— me sonrió. Ignorándome.

Antes de poder subir las escaleras mi hermana tomó a JaeMin del brazo y le mostró una foto de pornografía homosexual. Me sonrojé

—¿Q-Qué haces viendo eso?— le preguntó a mi hermana

—Esta posición le gusta a mi hermano. Sino la haces así, Vete despidiendo de él— me sonrojé notablemente otra vez. Levanté mi pierna en forma ninja y pateé su celular, viendo como caía directo a la pecera del señor Almeja. Ella palideció y JaeMin me miró preocupado

—Vamos arriba— subí con JaeMin a mi habitación y cuando por fin creí que podíamos hablar sin tener que decirnos estupideces o fingir algo que no somos, mamá entró mostrando un lubricante. Otra vez mis colores subieron y los de JaeMin también

—Toma hijo. Un lubricante nunca está de más— dejó el artefacto sobre la mesita de noche y yo lloré de vergüenza

—RenJun. Tu mamá y mi mamá harían una linda pareja— rió. Tomando una camisa de mi cajón— mjm— carraspeó— tus camisas me quedan chiquitas. ¿Me puedo recostar sin camisa?— quedé atónito

¿Yo, Huang RenJun de Caracas Venezuela, junto con, Na sexy hasta las pelotas JaeMin?. Es un puto sueño

—Si puedes— me metí al baño y me coloqué mi pijama. Mi pijama consistía en un short que me llegaba hasta un poco más abajo de la mitad del muslo. Rosado a preferencia de mi mamá. Una camisa larga que tapaba un poco el short. También rosa pero llena de gatos. Me sentía estúpido. Pero no tengo más pijamas. Salí del baño y ví a JaeMin sonreír como idiota al teléfono. Me acerqué en silencio y ví como en su celular una chica corría en la playa con un traje de baño. Sus senos rebotaban y según alguien Heterosexual eso sería sexy. El vídeo terminó y JaeMin aún no se daba cuenta de que estaba a su lado. Él rápidamente tecleó en su celular 'Es cierto. La chica está muy buena. Yo comparto hoy la habitación de un chico. Pero no está mal. Él tiene cuerpo y cara de chica'. ¿Qué diablos le pasa?
Esto de compartir mi habitación con un macho pecho pelado me estaba frustrando.

Empujé su celular con mi mano y él me miró asustado. Me apuntaba con su zapato. Se había sacado la camisa y en verdad se veía resplandeciente

—¿Veías mis mensa...— abrió su boca y miró mi cuerpo de arriba hacia abajo. Puto. Lo odio

—¿Me dijiste cara de mujer y cuerpo de mujer?— Mi cara estaba roja de furia y vergüenza, tenía los puños apretados y la mandíbula también. Abulté los labios y lo miré mal

—Por Dios, si es que esto de ser novios fuera verdad tu cuerpo sería mi templo, Joder—

Me recosté en mi cama y él se sentó a mi lado. Tocó mi pierna y yo la moví. Dándole a entender que no me tocará

—Tengo un colchón abajo. Dormirás en ese— me agaché y tome el colchón de abajo. No quería salir. Estaba tirando con fuerza. Cuando por en medio de mis piernas ví la cara de JaeMin. Él estaba mordiendo su labio y una mano de su cuerpo estaba cerca de su entrepierna. ¿Era por mi culo?. Me levanté rápido y me sonrojé

—¿Q-Qué hacías mirándome el trasero?— tapé con ambas manos mis glúteos

—¿Yo? Y-Yo n-no hi— mi madre lo interrumpió

—RenJun, vas a tener que dormir con JaeMin en tu misma cama. Em. Vino la amiga de Jihyo y tu sabes cuánto tu hermana odia el contacto físico— Mi hermana menor estaba en la puerta, negando cada mentira de mi mamá. Ella salió por la puerta y se fue con mi colchón y mi hermana menor

—Tu duerme al rincón—me dijo. Entré primero a la cama y él me siguió

Estabamos apretados. La cama es de solo una plaza. Por lo cual es muy pequeña. Estábamos de lado. Chocando pecho con pecho. Sentía su aliento en mis labios

—Y...¿Dormiremos de inmediato o pondremos en marcha el lubricante?— Subió ambas cejas y yo me sonrojé. El estaba meneando el lubricante en mi cara

—No bromear con eso. Nuestra primera regla— avisé y él lo botó al piso, haciendo una divertida seña de llámame

Esta noche va a ser muy larga.