ZOMBIES?

Final.

一Qué demonios...
Estaba atónito, observando el mensaje. Era la primera palabra que habíamos tenido del mundo exterior que aún existía.
Electricidad, televisión.
¿Estaba nuestro mundo volviendo a nosotros?.

Sentí revolverse a Clark tras de mí y sentarse en el sofá, le acompañé. Jon y Dog bajaron poco después, Dog vino a mi lado, y le rasqué las orejas. La carta desapareció, y una imagen familiar que pensé no volvería a ver en mí vida, apareció.

—Hola—dijo, claro y firme— Soy Bruce Wayne. Este es un mensaje para los supervivientes de la nación. Ofrecemos esperanza, dejando saber que aunque nuestra situación ha sido dura estos últimos meses, ahora nos estamos reagrupando y dirigiendo a la supervivencia. Hemos establecido una base central en Coast city.

Clark gimió, recordándome que no estaba lejos de donde estábamos.
Obviamente ese era el por qué teníamos ahora electricidad.

—He invitamos a todos los supervivientes a unírsenos aquí. Hemos restaurado la electricidad, y la ciudad está fortificada para protegernos de la amenaza de aquellos afectados por el virus. Estamos trabajando en una evacuación inmediata a un país vecino para proceder con la eliminación de las zonas infectadas, que tomara lugar después de los semanas a partir  de este momento. Evacuar es nuestra mayor prioridad.
Esperamos que os unáis a nosotros aquí, en las siguientes dos semanas. Este mensaje será repetido de hora en hora, en todas las frecuencias de televisión y radio. Para aquellos que están escuchando, buena suerte.

La transmisión término y la carta diciéndonos que esperásemos volvió. Me giré para mirar a Clark.

Lo menos impactante no fue que Bruce siguiera con vida, fueron sus palabras "Proceder con la eliminación de las zonas infectadas", ¿Acaso planea bombardear o algo así?, ¿Estábamos en una película?, ¿esto es real?. Dos semanas para evacuar.

No sé cuánto tiempo estuve metido en mis pensamientos que no sentí la mano de Clark sobre mi hombro, hasta que me sacudió con cuidado.

—Yo... Ha dicho todos los ciudadanos.

Clark gimió, pero no sonó muy optimista

—No podemos quedarnos aquí, no sabemos que planean hacer para eliminar el virus —Sentía pánico—Podría hablar con Bruce, conversarlo de sacarlos pero... —pero no podría converser al resto de que eran diferentes, siendo realista, en mis adentros ni siquiera me sentía seguro de poder converser a Bruce.

Comenzaba a frustrarme, llevé mis manos temblorosas a mí cabeza, ¿Que podíamos hacer, que quedaba?. No tenía idea de que era lo que pasaría.

Jon se abrazó a mí, sentí que simplemente me rompí. Y lo acepte, era el fin. No esperaba un final feliz donde ambos volvieran mágicamente a la vida y escapáramos, que nuestros problemas se esfumaran como espuma en el mar, no, pero tenía esperanza, esperanza de poder tener lo que ya había perdido, poder empezar una nueva vida.

Sentí a Clark abrazándome por la espalda, estuvimos así un buen rato, solo compartiendo ese momento en silencio.

Volvimos a la habitación, apagando las luces y el televisor, tomamos nuestros lugares en la cama y solo caímos en los brazos de Morfeo.

A la mañana siguiente cargamos un coche que conseguimos a unos kilómetros de la granja. Comida, ropa, latas de gasolina, todo lo necesario y las armas que había tomado de nuestro anterior suceso.
Nos estamos marchando, lo más lejos posible de ambas ciudades, de todo, haría todo para poder conseguir un barco o bunker con el tiempo que teníamos.

Ayudé a meterse a Jon y Dog en el asiento de atrás, se acomodaron en su cama improvisada felizmente.

Cerré la puerta y miré a Clark. Estaba apoyado contra la puerta del pasajero de delante, aparentemente aprensivo.

—¿Listo? —pregunté. Asintió lentamente.
—Oye— dije, tomándolo en mis brazos —Gracias, por lo de anoche, lo necesitaba.
Quiero que recuerdes que, no importa qué pase, estoy contigo, con ustedes. No importa dónde termine llevándonos esto.

Se apartó y le sonreí nervioso. Esperé lograr haberle comunicado bien el mensaje, porque yo estaba sencillamente igual.

El tubo de escape petardeó cuando conducíamos lejos de la granja, ahora, por el resto del tiempo.

Esperé que el tiempo que nos quedase fuese algo más animado. De vuelta a la carretera abierta, el coche luchó por alcanzar la velocidad límite. La carretera se extendía, tan larga y vacía como había estado antes.

Pero ahora mí único propósito era disfrutar de ellos, de nuestra extraña familia. Era lo mejor que teníamos.

Mientras mí mano descansaba en la palanca de cambios, la de Clark se colocó encima. Temblaba ligeramente, pero me dio fuerza.

Di una última mirada a Jon durmiendo abrazado a Dog, quien también dormía con tranquilidad.

Volví mí mirada al frente, más tranquilo y dispuesto a aceptar lo que viniera con ellos a mí lado.

Fin.
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Muchas Gracias por leer.