Es estresante ponerse a pensar porque las cosas buenas les pasan a otras personas, y uno solo piensa ¿Qué hacen ellos que yo no? Después piensas en que puedes hacer para que las cosas puedan cambiar, mejorar o simplemente avanzar y te das cuenta que no puedes hacer nada, y se basa solo en suerte; y te preguntas ¿Cuándo me tocará la suerte a mí? No hay manera de saberlo, ni siquiera sabes si algún día tendrás suerte o te pasarán cosas buenas y te toca seguir adelante. Es ahí cuando ves si eres fuerte o no, ya que están las personas que se aferran al pasado con el sueño de algún día regresar y luego están los que solo siguen adelante porque saben que eso que extrañan solo vive en su memoria y probablemente nunca regresará.