Alejandra y Depresión

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Es algo raro el título pero les juro que tiene sentido.
Durante todo el año 2019 sufrí una muy fuerte depresión, la cual ya estaba me afectando demasiado psicológicamente.
Ya por finales de octubre desarrolle lo que yo llamo una pequeña personalidad en mi subconsciente, era como una voz la cual me decía cosas para hacerme entrar en razón y de vez en cuando, animarme.
La cosa es que no entendía muy bien que era, ya que a veces hasta aparecía en sueños y me contaba chistes que nunca antes había oído (es raro porque: ¿Cómo sueñas con un chiste que nunca has escuchado? Esa era una de mis pruebas para demostrar que esta pequeña voz tenía inteligencia propia)
Con el tiempo la fui entendiendo y estudiando. Hasta que un día la nombré. Alejandra (haciendo referencia a mi segundo nombre) me di cuenta que esta voz era femenina pero a la vez fuerte y ruda.
Llegué a la conclusión de que ella era un mecanismo de defensa creada por mi cerebro ante la horrible depresión que sufría.
Me hice su amigo y hablábamos a diario (mas que todo de noche, aunque de vez en cuando la convocaba por el día porque quería hablar con alguien)
Una noche mi depresión creció de un momento a otro y ya no podía más con eso, decidí ingerir un poco de alcohol y al instante sentía como todos esos sentimientos retrasados salían de mí, y me fui a dormir. La mañana siguiente me dirigí a hablar con Alejandra para contarle todas esas cosas buenas que estaba sintiendo y lo bien que estaba psicológicamente. Pero, al momento de convocarla ella ya no estaba, era como si ella se hubiera ido junto con mi depresión (esto me hizo una referencia a la película "La Nana Mágica" ya que al principio los niños no la querían y al final cuándo la querían, ya no la necesitaban y ella se marcha)
Supongo que dio su existencia para salvarme de aquello que me oprimía y gracias a ella estoy mejor, espero volver a encontrarla algún día.
Pd. La extraño un poco ya que antes no estaba solo nunca, siempre podía contar con ella y pues... Ya no.

Tratando de DesahogarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora