¿Crees estar enamorado? ¿Estás seguro Christopher?
La obsesión, de este chico por su novia, lo hace cometer locuras, muy grandes. Inseguro de sí mismo, cree que su novia no le corresponde en sentimientos, por lo que comienza a pensar que esta lo en...
—¿te quedarás ahí como idiota?—un metro más allá, Gage le habló
—no molestes Storm—se dirigió al auto y entró—no estoy de buenas—encendió el auto y comenzó a conducir
—Uy—lo molestó—ya tengo hambre, llevame a comer.
Christopher negó con la cabeza mientras miraba al frente. Definitamente su amigo no lo entendería si le contaste lo que en ese momento sentía. El sentimiento en el pecho le estaba doliendo una vez más, y se preguntó el porqué.
¿Por qué recien era conciente de todo?
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Despues de un largo baño para quitarse la sal del cuerpo, se cambió de ropa y disfrutó la tarde...o eso quería lograr
Se sentó en su cama y trató de calmar su respiración. Recostó su cabeza en la almohada y se dijo que nada cambiaría... Le había costado asumir y dejar todo atrás , ahora no vendría Christopher a arruinarle los planes e inquietarla una vez más, además ¿no lo vería mas cierto?, se preguntó. Que ella se hubiera encontrado con él, no había sido más que un hecho fortuito e inesperado, si ella se hubiera ido con sus amigod y Richard nada hubiera sucedido, no lo habría visto y todo seguiría igual.
—cariño—su padre entró en su habitación, pero ella se mantuvo ahí acostada—tienes visita
—¿visitas?—preguntó frunciendo el ceño—¿quien es?
—tus amigos—Andrew se apoyó en el marco de su puerta—estan abajo—_____ no dijo nada y el ruloso se extraño—¿te sucede algo linda?
—no papá—se levantó de la cama—no te preocupes.
Dicho esto, bajó las escaleras y encontró a sus amigos junto a Richard sentados viendo la televsión
—¿ya me extrañaron?—bromeó para no demostrar lo afectada que estaba por ver a Christopher—nos vimos en la mañana—se sentó al medio de todos y rió levemente
—es que no podemos vivir sin ti—le siguió el juego Erick—eres esencial en nuestras vidas
—lo sé—estiró las piernas bajo el sofá—¿para que soy buena?—preguntó
—yo cro que para muchas cosas—le dijo Richard, ella lo miró y se sonrojó—Y bueno además te tenemos una propuesta
—¿Propuesta?—preguntó ella
—si—dijo esta vez Joel—hemos pensando que hoy sería un día genial para ir a una fiesta, ya sabes, volver al viejo ambiente—la molestó
—no creo que sea buena idea—titubeó ella.
Era cierto su ambiente antes eran las fiestas hasta altas horas de la madrugada, pero ella había cambiado y desde hace mucho no salía a una fiesta.
—será genial—dijo Richard—vamos _____—la miró tierno—yo iré, tu vas, ellos iran, la pasaremos muy bien te lo aseguro—le sonrió
¿Como resistirse a esa sonrisa?, se preguntó interiormente.
