𝚝𝚊𝚔𝚎 𝚖𝚎 𝚝𝚘 𝚌𝚑𝚞𝚛𝚌𝚑 - Ineffable Husbands [Good Omens OS]

take me to church

Mi amor dice que estoy loco, tal vez enfermo, porque su Dios así se lo hizo ver.
Él dice encontrar bondad en mí, y yo creo ciegamente en todo lo que él me diga.
Pero no acepta mi amor, y eso duele como fragmentos de cristal atravesando todo mi ser. Es como ser bañado en el agua más sagrada, para después rezarme los falsos párrafos de la biblia.

Es lo único en lo que no puedo creerle, en que no me ama.

Él es un santo en toda la extensión de la palabra, es bondadoso y amoroso; yo creo que es mi Dios, mi religión. Él dice no ser tan bueno y piadoso como su Todopoderosa, pero está equivocado.

Azirafel definitivamente es un ser creado por el cielo.
Sus ojos son tan azulados y delicados que me recuerdan a lo hermoso que se ve el cielo, sus labios son gruesos y rojizos, incitan a probarlos.
Su piel, es como tocar las nubes, es tan delicada y suave: de porcelana.
Pienso que mi religión podría ser su cuerpo, como un templo, lo idolatro demasiado.
Lo adoro hasta cuando me rechaza.
La forma tan suave y delicada en la cual lo hace me incitan a caer más; parece ser que él no es consciente de lo que me hace.
Es aquel que me hace tener fe en algo.
Aquel que me hace sentir como un ángel, aunque sea un caído.

Si el cielo pudiera hablar, sería definitivamente la voz de mi ángel.
Las suaves y melodiosas palabras que salen de sus gruesos labios me arrullan y consuelan cuando más lo necesito.
Me hace sentir especial.
Si Dios fuera tan piadoso como los humanos especulaban, si enviase mesías para asegurar a la humanidad que existe un paraíso, definitivamente sería él, mi todo, mi amor.
Él, tan ingenuo e inocente, tan creyente de que el bien existe y que siempre dominará ante el mal, él que tiene fe en todo lo que le rodea, hasta en mí...

Pecar es parte de lo que soy actualmente, no siempre he sido así.
Pecar por ti, es lo mejor que he hecho.
¿Acaso no puedes apreciar lo que hago por ti?

¿Por qué ese afán de rechazar mi amor?
Siempre es la misma excusa, querido.
"Somos un ángel y un demonio"
Entiende que por tu solo cariño, renunciaría a todo. Soy capaz de hacer cualquier cosa.
Créeme, cuando te digo que aún tengo recuerdos de lo dulce y cálido que era el cielo... contigo a mi lado.
Déjame decirte que estar contigo es como regresar a mi hogar, es como volver a amar a Dios.
Escucharte hablar de tus anécdotas, tus tristezas y tus anhelos son las únicas cosas provenientes del cielo que quiero escuchar.

Y no me importa ser señalado por mis colegas, tampoco por mis superiores, si es por ti, si es por estar contigo.
Pero al parecer tú no planeas hacerlo, eso hiere.
Me hiere el escucharte decir que no existe "nuestro lado". ¿Cómo puedes ser tan cínico para decir eso?
Cuando tú, querido Azirafel, fuiste el amable. Cuando no hiciste por alejarte cada que te hablaba.

Señalamientos, miradas de desprecio hacia mí, murmuros que trataban sobre lo idiota que me veía.
Ángeles y demonios señalando mi torpe existencia al estar enamorado de un principado que se rehusaba a admitir que era mi amigo.
Cuando, estando a solas, nuestras conversaciones fluían como los ríos. Cuando estando solos, era capaz de sacar las más finas, dulces, agraciadas y tiernas risas de él; sus sonrisas eran por mí, para mí.
Pero estando en público, su temor a ser rechazado aumentaba, me negaba con tanta frialdad y naturalidad que me sorprendía cuando me pedía perdón por no presentarme como su amigo.

Me tiene sangrando, enfermo y herido.
Hace miles de años abrió una profunda herida que no sana, siempre logra abrirla con el mismo cinismo y ardor.
Duele amar y no ser amado, pero, de esto se trata ¿No?
Un ser tan perfecto no puede ser para mí, porque soy un pecador, un alma impura que no merece ser amado como pide, un pobre demonio que sufre amando en su eternidad, un caído.
No sé exactamente porque debería rendirme, si lo amo.
Y él ha demostrado sentir lo mismo para mí.