4.54 Mientras quisiera, podría volver loco a cualquiera.

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El aroma de las feromonas llenaba la habitación. Xue Ling agarró con fuerza la mano de Agustín, se colgó de su cuerpo, se frotó contra su pecho y preguntó: "¿Cómo llegaste aquí tan rápido?"

Agustín no respondió. En cambio, lo sacó de su cuerpo y lo colocó en la cama antes de desabrocharse la ropa y arrojarla a un lado.

Aunque Xue Ling tenía un físico excepcional para un omega, no era particularmente robusto. Por el contrario, debido a que aún no había alcanzado la madurez, toda su persona parecía ser bastante pequeña. En los días normales, siempre hinchaba el pecho, caminaba con aire decisivo y levantaba la cabeza, lo que lo hacía parecer mucho más grande que otros omegas, pero ahora que estaba presionado bajo Agustín, se dio cuenta de que este cuerpo era ...

Más bien pequeño.

No había sido tan malo con el cuerpo de Bai Yue en la vida anterior, pero Xue Ling sintió que no tenía esperanza de recuperarse de esto.

Xue Ling llevaba ropa casual para el hogar, pero era más "real", lo que significa que probablemente estaba hecha de materiales especiales solo adecuados para la realeza. Era resbaladizo y liso, muy fácil de usar y muy fácil de quitar.

Su cuerpo se había vuelto extraordinariamente sensible debido a su calor, y Xue Ling tuvo un fuerte impulso de abrazar a la persona que estaba sobre él y subirse directamente, pero afortunadamente aún conservaba un poco de racionalidad. De lo contrario, incluso si el estado de su cuerpo fuera aún mejor de lo que era ahora, no podría resistir los medios de Agustín.

"Sé bueno, estás en celo". Agustín besó la punta de su nariz y lo consoló. "Solo sigue tus propios pensamientos y haz lo que quieras hacer. No te resistas ".

Xue Ling agarró la mano que lo desvestía y preguntó: "¿Por qué tu expresión sigue siendo tan tranquila?" Justo ahora, había visto claramente que los ojos de Lutero se habían puesto rojos, pero el hombre frente a él estaba terriblemente tranquilo. donde parecía haber entrado en un estado extraño.

Agustín bajó la cabeza para mirarlo.

El joven yacía debajo de él con la ropa medio desnuda, un par de hermosos ojos de zorro se fijaron en él con una mirada llena de encanto, como el más feroz **. Solo una mirada fue suficiente para colapsar por completo su racionalidad.

(Kameko: el ** se omitió pero el autor dió a entender que se veía más como un feroz zorr@)

Sus mejillas estaban enrojecidas de un hermoso color rojo, y los lunares lagrimales en las esquinas de sus ojos agregaban un toque de color brillante en esa hermosa cara.

En los días normales, siempre parecía la cara noble de un dios, pero en este momento era encantadora como la de un demonio.

Agustín emparejó lentamente la cara del joven debajo de él con la del niño en su sueño de setecientos años, y luego, frente a sus ojos, apareció una cara que era completamente diferente de esas dos caras. Todavía tenía un par de ojos de zorro y lunares de lágrimas, y seguía siendo igual de hermoso, pero ya no había esa sensación de incertidumbre y violación que hizo que Agustín se sintiera confundido.

Esa cara junto con ese par de ojos, era el verdadero él.

Agustín parecía haberse decidido por algo y bajó la cabeza para besarlo en los labios. Él se rió, "¿Qué tan loco quieres que esté? ¿Hmm?"

Xue Ling se suavizó por completo con su bajo "hmm". Envolviendo ambos brazos alrededor de su cuello, hizo un poco de esfuerzo para levantarse, frotando lentamente sus labios contra la cara de Agustín. "¿Eres tan indiferente porque no te atraigo en absoluto, o es porque no puedes hacerlo? ¿Eh?"

W.T.M.T.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora