Lo se pensaban que no lo había dejado, pero no... bueno si mas la continuación espero que les guste y si no, pueden comenzar a tirar jitomates jaja
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Singto
Me levanto me doy un baño, me arreglo con el uniforme de la universidad, agarro mis útiles y me dirijo rápidamente al comedor para tomar solo un jugo ya que al ver el reloj me doy cuenta de que ya es un poco tarde y si no salgo ahora mismo con la distancia de aquí a su apartamento no creo poder llegar a tiempo.
Llego y me estaciono enfrente del edificio a las 8:20, gracias a que no hubo tráfico pude llegar temprano para esperarlo, saco mi celular y;
***Singto:
Buenos días pequeño Nong,
¿Como amaneciste?
¿Ya saliste para la Universidad?
***Krist:
Bueno días P'Sing ^//^
Amanecí muy bien gracias y ¿tú P'?
Todavía no P', de hecho, estoy preparando mis cosas para ya salir de mi departamento.
"Perfecto, tal parece que llegue justo a tiempo", guardo mi celular y espero en el carro, hasta que mi pequeño Nong aparezca.
Krist
Después de enviarle la contestación sigo acomodando mis cosas para la universidad, revisando a ratos mi celular, "que raro, P'Sing no me a contesta" me siento un poco mal porque el no me devuelve el mensaje, pero trato de apartar ese sentimiento negativo convenciéndome de que puede estar ocupado, así que termino de acomodar todo, veo la hora 8:45 "rayos tal parece que tendré que desayudar en la universidad" salgo apresurado del departamento para bajar corriendo por las escaleras, tan rápido iba que no me di cuenta y pise mal, haciendo que mi tobillo se doblara un poco, pero haciendo caso omiso al dolor sigo mi camino lo más rápido que podía, salgo del edificio, cuando siento como alguien me abraza por la cintura, levanto mi mano preparado para golpearlo cuando
*¿Porque tan apurado pequeño? – escucho cerca de mi oído para después sentir un beso en mi mejilla.
*P'Sing, ¿qué haces aquí? – lo volteo a ver entre sonrojado y sorprendido
*Bueno vengo por un lindo y pequeño Nong para acompañarlo a la universidad. – me mira directamente a los ojos haciendo que me apene un poco y de un paso hacia atrás, lo que hace que me tambalee por el dolor del tobillo lastimado, esperando un golpe solo siento como una mano se posa en mi espalda sosteniéndome con fuerza. – ¿Estas bien Krist? – miro a P' el cual muestra un rostro preocupado.
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LA APUESTA QUE NOS UNIÓ
Novela Juvenil¿Podrá una apuesta que unió un gran amor de dos personas con diferente personalidad, ser la causante del final de este mismo gran amor? Uno de ellos tendrá que aprender a luchar mas por ese amor después de la verdad y el otro tendrá que tratar de es...