Boy In Luv ᵏᵛ

• XV •

Su vuelo había llegado a su destino, era hora de bajarse y pisar tierra americana.

Tomó su pequeño equipaje sin perder de vista a la señora Jeon y salió del avión, siguiendola mezclado con las demás personas.

Durante todo el proceso que le había tomado llegar hasta la salida del aeropuerto, no despegó sus ojos de la madre de Jungkook y la señora que le hacía compañia.

Solo quería ver a Jungkook cuando llegase a recogerlas. Deseaba verlo en persona luego de años.

No los iba a seguir hasta su lugar de destino. Ya tenía a alguien para ese trabajo.

Se colocó junto a sus maletas en una esquina algo apartada, de nuevo mezclado con varias personas.

Vio como Jungkook se bajaba de su gran auto para abrazarlas y darles un beso en la mejilla. Se le veía muy contento

El chico sonrió también, no se imaginaba lo que venía. Haría que esa sonrisa desapareciera.

Su celular comenzó a vibrar. Era su novio.

Atendió la llamada y le dio la dirección del lugar a donde se encontraba

— recuerda ocultar tu rostro

— está bien bebé

Cerró la llamada sin quitarle los ojos de encima a Jungkook. Tenía unas fuerzas muy grandes de ir hasta allá y usar su pistola antes de tiempo, pero era muy arriesgado y echaría abajo todo el trabajo que había hecho durante meses.

— b-bebé? — escuchó su voz a su lado seguido de unos toques en su hombro

El chico le sonrió al reconocer su rostro

— te extrañé corazón — admitió el otro, sonriendo y abrazandolo también

El castaño quedó desconcertado, nunca creyó que su novio al verlo luego de varios años lo abrazaria.

Correspondió el abrazo, ocultando su rostro en su cuello. Estaba esperanzado a que su relación a distancia mejorara ahora que estaban juntos.

Incluso podría olvidar a Jungkook si así fuera.

Porque él sabía que un punto débil en su novio era Jungkook. Si le daba celos tal vez reaccionaría y lo amaría de verdad.

Ambos fueron al auto del más bajo y subieron las maletas a la parte trasera. El chico coreano tomó el volante.

— hoy entra a trabajar Taehyung no? — preguntó encendiendo el motor

— no tarda en llegar — el menor chequeo su reloj — aunque con la llegada de su suegra y su compañía puede que llegue unos diez minutos tarde

— instalaste las cámaras en su lugar de trabajo como te lo pedí?

El castaño jugó con sus pulgares. Luego carraspeó

— no será necesario... Taehyung no se va tan tarde a casa

Hubo un silencio

Luego el castaño habló

— traiste... La pistola?

Su novio asintió. Su corazón comenzó a acelerarse de pánico al saber la presencia del arma con él. Estaba esperanzado a que se lo decomisaran en el aeropuerto, pero ahora tendrían que usarla.

A él no le gustaba esa parte

Se abrazó a si mismo, mirando las casas por la ventana hasta que vió una plaza con un lugar de helados.