One Shots Batfamily

Damian Wayne

Título: The price of mistakes

Personaje: Bolita de odio 

Advertencia: Un poco triste 

Nota: bueno aquí esta el one shot con Dami ya que varias lo pidieron, ahora si necesito que comenten con quien lo quieren y como regalo pueden pedirlo con cualquier personaje de DC, espero les guste mucho, comenten y le den estrellita 

[T/N]'S POV

A veces las cosas salen mal y no es culpa de nadie, tenemos que aprender a aceptar que existen personas que se quedan para siempre en nuestro corazón pero no en nuestras vidas.

Todo aquello que que es casi perfecto, tendrá un erro si no no dejara de serlo, cometiendo errores es la única manera de llegar a algo en nuestras vidas, cometer un error no es un pecado, el pecado es ser cobarde y no admitir lo que hacemos mal.

Muchas veces el costo de nuestros errores es muy alto y este es un precio que tenemos que pagar por aquel error, estos pueden ser dolorosos pero con el tiempo se convierten en una colección de experiencias.

Mi mente se encontraba hecha un desastre, tenia un nudo enorme en mi garganta que cada vez crecía mas sentía como si navajas estuvieran en mi garganta, me sentía llena de frustración, en mi mente una y otra vez se repetía la misma pregunta ¿Cuando la culpa iba a dejar de atormentarme? y quizá la respuesta era clara y era cuando yo sea sincera y tenga el valor de hablar, suspire frustrada mientras dirigía mi vista al cielo, el día se acoplaba a la perfección con mi estado de animo, el cielo estaba nublado, era gris y en cualquier momento empezaría a llover, no había el típico sol que siempre iluminaba este parque por el contrario todo se veía tan triste y gris, mire hacia donde se encontraba Damian, una mueca de dolor y tristeza se poso en mi rostro, Damian pagaba el algodón de azúcar que me había comprado y me lo entregaba con una pequeña sonrisa y en ella había tanta ¿Tristeza? ¿Dolor?, sentí que mi corazón se encogía y mi pecho dolía ¿ Porque tenia que ser una verdadera idiota?, caminaba junto a Damian mientras le daba una mordida a mi algodón de azúcar, amos caminábamos sin pronunciar una palabra, mire con cuidado su rostro, aquel rostro imponente, firme y duro que siempre me había encantado, aquel rostro ya no tenía su típica sonrisa ladina y su ego que lo caracterizaban tanto, hoy su rostro lucia tan diferente, tan extraño ¿ pero que era lo que había cambiado?, mira el lugar extrañada para ser un día tan gris y triste había varias personas en aquel lugar, y más cuando claramente se venían una fuerte tormenta, habían desde niños hasta ancianos sentados alegres en las bancas de aquel lugar, veía familias felices y niños corriendo por todo el lugar, se escuchaba el crujir de las hojas y el rechinido de los juegos mecánicos del lugar, se escuchaba la risa de las personas, me preguntaba si era normal ver tanta alegría en un día tan triste como hoy, el día no era acorde con la felicidad que emanaba aquel sitio, para mi era un día triste, algo en mi decía que todo empeoraría, me sentía rara, nerviosa e inquieta y el silencio entre Damian y yo no me ayudaba en nada, me estaba matando, Damian siempre fue una persona que iba al punto cuando algo no le gustaba o le parecía mal ¿por que ahora no lo hacía? ¿por qué no me decía lo que le sucedía?, sentí como mi estómago se revolvía y como el nudo en mi garganta crecía, esta cada vez más nerviosa.

-¿D-Damian?- no obtuve ninguna respuesta, simplemente seguíamos caminando sin rumbo fijo, el silencio se empezó a tornar muy incómodo, el cielo se torno más oscuro y pequeñas gotas empezaron a caer, la tormenta se aproximaba, suspire cansada no obligaría a Damian a decirme lo que le pasaba, el es reservado pocas veces habla sobre como se siente, esta por darme la vuelta y regresar a casa cuando el habló.

-¿ Alguna vez has escuchado esa boba frase sobre todas las personas merecen una segunda oportunidad?- su voz era fría como dagas atravesando mi ser, su voz sonaba apagada y triste, esa misma voz que el había utilizado hace mucho tiempo cuando se enteró que su madre lo utilizaba solo como un arma para acercarse a Bruce, sentí como mi cuerpo se congelo, como mi corazón se paraba, asentí con miedo, sentí como me miraba y continuaba hablando- ¿Tu crees que sea verdad esta frase [T/N]- trague en seco el en muy pocas ocasiones me llamaba por mi nombre, siempre se refería a mi con apodos o sobrenombres algo tiernos, empecé a jugar con mis manos y volví a asentir sin mirarlo- ¿Por qué piensas eso?- el me miraba demandante como si examinara mi ser, me mordi el labio con nerviosismo, antes de responder algo, sentí que en cualquier momento mis piernas dejarían de funcionar-