One Shots Batfamily

Damian Wayne

Advertencia: Cute y algo corto

Personaje: Damian x Tn

Partes: 1/1

Nota: Espero les guste y comenten de quién quieren el siguiente

"Nadie decide enamorarse, Tu corazón va a latir y no necesita de tu permiso"

Quien diría que terminaría enamorándome de aquel chico que parecía tan rudo y egocéntrico por fuera, pero por dentro era una persona que se preocupaba por los demás, era hasta en cierto punto un chico triste .

Miraba su perfil y cada rasco muy bien definido de su rostro mientras sonreía y jugaba un pequeños mechones de mi cabello que revoloteaban por el viento, estire mi mano y acaricie su suave y sedoso cabello azabache, vi una sonrisa a parecer en sus labios por aquel tacto, me gustaba estos pequeños momentos, donde simplemente eramos nosotros mismos, sin presiones de ningún tipo, sin nadie que nos diga que estaba mal o bien, sin nadie que no presione para ser perfectos, eramos dos almas libres y enamoradas, con miles de emociones saliendo a flote, Damian detuvo el auto en un semáforo en rojo y sus hermosos ojos jade se toparon con los míos haciendo que por un momento salga de la realidad.

- Hey, al parecer hoy estas muy feliz, más de lo normal diría yo- vi su sonrisa y como tomaba mi mano-

-Lo estoy porque es la primera vez en mucho tiempo que te tengo solo para mi, sin que tengas que irte por meses al otro lado del mundo a resolver misiones, sin los chicos gritando al rededor, sin las peleas a cada paso con Tim o con escarabajo o incluso con Jonh, solo somos tu y yo

-Soló Damian Wayne y su preciosa novia T/N, la cual me ha soportado en todo momento y a estado a mi lado a pesar de ser un idiota en muchas ocasiones

-No más de eso Dami, sabes que te amo-

-Gracias por llegar a mi vida y hacer que todo cobre sentido, sin ti creo que hubiera sido un caso perdido y ahora estaría solo, Te amo T/N T/A- Tomé su rostro entre mis manos y lo besé, el semáforo cambio y nos separamos, me sentía tranquila con el, me sentía segura, el siguió conduciendo, en todo el camino pase molestándolo, cantaba a todo pulmón muy desafinada por cierto, bailaba, me pegaba a el, le dejaba besos en su mejilla, y me quejaba de que tenía hambre, Damian se limitaba a reír, en ocasiones me seguía las canciones o simplemente me decía que estaba loca y que me dejaría en la primera parada que vea, sabía que jugaba conmigo, el me quería tal como era, Dami se estaciono en una tienda de autoservicio para cargar combustible y comprar algo de comida, me baje corriendo y él detrás de mi, me abrazo y yo sonreí .

"Aún recuerdo la primera vez que te vi, había algo especial en tus ojos, en tu mirada, en ti"

-Dami....- lo mire con una enorme sonrisa mientras me paraba frente al el, el me miro con un ceja elevada-

-La respuesta es No- le hice un puchero y el empezó a reír-

-Cargarme Dami, como caballito-el se inclino frente a mi, indicándome que saltara a su espalda-

-Su transporte espera princesa apestosa- pude escuchar su risa, salte y el me sujeto, tomándome de mis piernas y avanzando-

-!Sii! Corre caballo, corre- golpee su trasero con mi pierna y el empezó a reírse mientras corría hacia la tienda, algunas personas nos miraban raro, otras nos miraban con ternura pero sinceramente nos daba igual, solo eramos el y yo, dos locos enamorados.

Despues de casi vaciar el autoservicio seguimos el viaje entre risas, yo lanzandole algunas gomitas y pequeños chocolates, cantando a todo pulmón canciones de Blink-182, The neighbourhood, Elle King, yo suspirando enamorada cuando veía su rostro iluminarse por los rayos de sol entrando por la ventana del auto, el al darse cuenta de eso, me comenzó a molestar hasta el punto de ponerme roja como un tomate, así era nuestra relación, podía ser la mas intensa y apasionada o la más inocente e infantil.

Llegamos a nuestro destino luego de varias horas de viaje, al ver nuestro destino sonreí con nostalgia, en esta playa Dami se me había declarado, además aquí fue cuando me enamoré de el, nos instalamos en una cabaña hermosa era algo alejada de todos y todo pero tenía una preciosa vista al mar, pasamos todo el día jugando y riendo, por la tarde Dami se recostó en el sillón y se puso a leer un poco, estaba dispuesta a salir pero me encontré con la imagen más hermosa y tierna que puede haber, Vi a Dami profundamente dormido, su cabello estaba ligeramente despeinado, su rostro estaba relajado, permanecía acurrucado en el sofá como un pequeño niño, con la boca entre abierta, en eso susurro mi nombre, una corriente recorrió por todo mi cuerpo, sonreí, besé su frente y me acurruque a su lado quedándome profundamente dormida en sus brazos 

"Te quiero como para escuchar tu risa toda la noche y dormir en tu pecho, sin sobras ni fantasmas, te quiero como para no soltarte jamás"