—Jinnie ya son más de las doce, ve a dormir —le dijo su madre viendolo en la cocina—. ¿Que tanto haces?
Jin estaba batiendo una mezcla de chocolate.
—Quiero hacer brownies —contesto un poco apenado.
—Puedes hacerlos el sábado con más calma.
—Es que se los quiero dar mañana a alguien —podia sentir sus mejillas calientes así que bajo la mirada.
Su madre sonrió, su hijo no era bueno para estar con la gente, les tenía miedo. Verlo cocinando para alguien fue adorable una vez que supo el propósito.
—¿Quieres que te ayude? Puedo hacer un sirope para que estén aún más deliciosos.
No importó que ambos estuvieran desvelados después, Jin estaba feliz y su madre aún más por verlo tan animado.
Pero no tan animado a la mañana siguiente, tenía ya todo listo. Sus postres en una cajita que compró ayer en el camino a su casa después de la escuela y una nota de agradecimiento, lo único que faltaba era un poco de valor para ir con Hoseok.
Hoseok se encontraba jugando nuevamente, tenía una sudadera amarilla que lo hacía lucir incluso más resplandeciente; “Como si su sonrisa no fuera suficiente” pensó Jin mientras lo veía contento corriendo por todo el campo.
Decidió sentarse en las gradas esta vez un poco más alejado. Suspiró, el veía como en los dramas la chica le gritaba o se acercaba cuando el protagonista estaba en un partido, seguramente esa chica no era insegura como él. Su mente le hizo pensar que si lo llamaba los demás jugadores nuevamente lo iban a llenar de miradas burlonas.
—Hola —no se dió cuenta pero Hoseok ya estaba tomando asiento a su lado—. ¿Has tenido un lindo día?
Jin movió la cabeza afirmando.
—Eso es un alivio, deberías regalarle al cielo una sonrisa para que no hoy llueva. Tengo entrenamiento en la tarde —Jin sonrió de repente, aunque su sonrisa fue pequeña y sin separar sus labios—. Si, eso será suficiente para que el sol este contento y no se oculte.
—Gracias... —se ánimo a contestar casi en un susurro.
—Y tu voz es muy hermosa así que tendremos un buen clima el resto de la semana —dijo riendo y juntando sus palmas como su estuviera agradecido—. Por cierto ¿Cómo te llamas?
—Kim Seokjin —extendio su mano aunque está temblaba un poco.
Hoseok enseguida la estrecho efusivo.
—¿Que tienes ahí? —pregunto curioso por la cajita azul que tenía Jin a un lado.
—Lo hice para ti, por lo de ayer —su tono de voz era tan bajo que tenía miedo a no ser escuchado.
Cuando Hoseok abrió lo que le entrego sus ojos se iluminaron.
—No era necesario, cualquiera te hubiera ayudado —Jin negó con la cabeza, por qué en realidad sin Jung ahí lo único que iba a pasar es que todos se iban a reír de él por más tiempo—. Entonces creo que fue una fortuna que yo estuviera para ti en ese momento.
Jin no entendía que pasaba, era la primera vez que su corazón estaba tan intranquilo y no por una situación que le causaba terror.
—Esto sabe delicioso —Hoseok acarició su cabello con su mano libre—. Creo que no te voy a querer compartir con nadie, así que mejor corre.
Y Jin lo que hizo fue inclinar su cabeza hacia él.
〜＊
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¿Desde cuándo siguen a BTS? Yo desde 2015 (no puedo creer que ya pasaron cuatro años), hoy ando bien curiosa ggg.
