Héroe del Haki

Entrenamiento y una Nueva Amiga

_Bien, entonces solo uno entre un millón posee el Haoshoku Haki_ dijo el peliverde leyendo el contenido de uno de los rollos

Luego de eso, guardó los rollos en una mochila y se marchó al bosque, con permiso de su madre claro está, para practicar todo lo leído de los rollos.

_Bien, lo primero es practicar el Busoshoku Haki para que pueda hacerlo pasar por mi quirk_ se dijo a si mismo antes de intentar despertar y usar el Haki de armadura

Así fue como comenzó el entrenamiento al que se sometió el peliverde. Al principio no logró ningún avance, no fue hasta el sexto mes cuando pudo materializar un poco de Busoshoku, lo suficiente para cubrir su mano completa.

_¡Yeii!_ gritó el pecoso_ ¡Finalmente!¡Finalmente pude hacerlo!_ festejó mientras derramaba lágrimas de felicidad

Izuku, llevado por la emoción, golpeó un árbol viendo como dejaba la marca de su puño en el tronco. Emocionándose aún más, trató de partir una gran roca de un golpe ocasionado que terminará por lastimarse debido a que su Busoshoku se acabó justo un segundo antes de que lograra impactar su puño.

_¡AUUCHH!_ se quejó. Viendo su mano herida, se dio cuenta que, además de dominar el Haki, debía fortalecer su cuerpo

Después de esa experiencia, además de entrenar para despertar los otros Hakis y dominar el Busoshoku, comenzó a fortalecer su cuerpo con una rutina de 100 flexiones, 100 sentadillas y correr 10 kilómetros cada día. Al principio se le dificultaba mucho, pero al avanzar los días, pudo adaptarse a su entrenamiento.

Cuatro años habían pasado desde que despertó el Busoshoku y empezó su entrenamiento para fortalecerse físicamente. Ahora poseía un control decente del Busoshoku ya que podía recubrir con este ambos brazos y mantenerlo por un gran período de tiempo. También pudo despertar el Kenbunshoku Haki al encontrarse de nuevo con aquella jauría que lo atacó el día que descubrió de la existencia del Haki, para el peliverde no fue mayor problema derrotar a todos los perros gracias a su Busoshoku y su recién adquirido Kenbunshoku.
Uno de esos días, Izuku se encontró con cierto hombre de apariencia 'graciosa' que lo ayudo en su control del Haki y le enseño una extraña arte marcial, además de lo básico en el uso de espadas. Pronto, aquella persona se convirtió en alguien importante para el peliverde y es por eso que le fue muy difícil digerir la noticia de que la persona a la que llamo sensei debía marcharse del país sin saber cuando volvería. Pero antes de irse, prometieron que volverían a encontrarse y que cuando ese día sucediese, ellos se enfrentarían para ver cuanto había crecido el peliverde en su ausencia.
Y así, el pecoso continuó con su entrenamiento, fortaleciéndose para el día en el que tendría que dar el examen para ingresar a la UA y dar el primer paso para demostrar que todos pueden cumplir su sueño, que solo debes creer en ello y lo lograrás.

Aún así, Izuku nunca descuido sus estudios y gracias a eso podría presumir ser el más inteligente de toda su escuela, aunque no es como si alguno de sus compañeros fueran a felicitarlo o algo así, es mas, lo más probable es que se burlaran de él por ser quirkless. Él planeaba cerrarles la boca a todos cuando ingrese a la UA, es por eso que nunca contó o presumió de sus habilidades y las mantuvo ocultas, aunque eso no fue por mucho...
A veces, generalmente al principio de su entrenamiento, varios chicos de su edad y algunos mayores trataban de agredirlo, y aunque al principio funcionaba, cuando despertó el Kenbunshoku nadie podía tocarlo gracias a que él predecía todos los movimientos en su contra y terminaba por humillarlos en su propio juego. Esto causo que más chicos, incluso de otras escuelas tratarán de derrotarlo, teniendo como resultado que terminaran siendo humillados gracias a que en todo ese tiempo el peliverde adquirió una gran fuerza gracias a su entrenamiento.

Y así fue cómo otros tres años pasaron en un abrir y cerrar de ojos. El peliverde, de ahora trece años, se encontraba caminando tranquilamente por las calles después de enseñarle una lección a un grupo de chicos unos años mayores que él.
Con el pasar del tiempo se hizo conocido como 'Midori no Shi' ya que siempre que lo enfrentabas sentías que estabas frente ante la muerte misma.