🍒 Truco o Trato ; ; 2won

🎋; 02

4:32 p. m.
WH POV

Caminé relajado hacía el café, como tenía los audífonos puestos me sentía como en mi propio vídeo musical.

Tarareaba mi canción favorita "From Zero" del grupo Monsta X. Amaba ese grupo, he escuchado cada una de sus canciones. Desafortunadamente nadie conocía ese grupo entre las personas con las que hablaba a menudo. ¿Y si Hyungwon conocía Monsta X? Las probabilidades eran menos del 20%

Llegué. Tomé asiento en una de las mesas afuera del café y me quedé a esperar, aún era algo temprano por eso no iba a llamarlo alguien impuntual.

Me hice una idea mental de lo que hablaríamos; su tipo ideal, discutir con cuál podría llevarse mejor de los chicos que conozco (que pocos no son), algún fetiche... además a raíz de esto lo conocería mejor.

5:03 p. m.

– ¡H-Hey, hola! – Dijo el pelinegro que llegaba con bastante prisa. Algo me decía que el pobre se había perdido.

– Hola, ¿qué tal? toma asiento. – Me mostré amable frente a él. – ¿De casualidad te perdiste? – No pude evitar soltar una risita.

El chico tomó una silla y se sentó, acto seguido acomodó un poco su cabello. – Bueno, no te voy a mentir. Me perdí y me volví loco buscando el lugar... soy bastante malo ubicandóme y no sé usar Google Maps. – Rió nervioso.

– ¡No te preocupes! Es normal. – Expresé aquello para no incomodarlo y hacerlo sentir mal.

– ¿Pedimos algo? – Ofrecí. No íbamos a ir a un café e irnos sin picar algo.

Hyungwon solamente asintió con la cabeza, sabía que era una persona de pocas palabras.

Hice un ademán y un mesero se acercó a nuestra mesa. Hizo una reverencia y dejó los menús a nuestra disposición.

–  Un té boba, por favor. – Dije mientras le entregaba el menú. – ¿Y tú, Wonnie?~

– Quiero un café helado, gracias. – pidió amablemente.

El mesero se retiro con el pedido y nos dejó de nuevo solos. Hyungwon tenía un claro color carmesí en sus delgados pómulos, quizás no debí decirle Wonnie, me sentí mal.

Pasaron un corto período de silencio cunado yo decidí romperlo, pues no me agradaba la tensión que había en el ambiente.

– En fin Hyungwon, a lo que veníamos. Dame una definición de tu tipo ideal.

– Me suelen atraer los chicos sexys, que tengan interés y sobretodo que sean fieles. – Inseguro se rascó la nuca cabizbajo, pero con una leve sonrisa.

– Oh, ya veo. ¿Conoces a Son Hyunwoo? – Ese hombre era un Sugar Daddy perfecto. Nadie se resiste a él, me incluyo.

– He oído sobre él, ¿está en el club de baile, no?

– ¡Ese mismo! –  Expresé con emoción. – Hyunwoo tiene una dualidad increíble, ¿pruebas, o te muestro más opciones?

– ¿Qué más tienes para mí? – Con un tono de voz superior preguntó.

– ¿Qué tal... Hwang Hyunjin? – Mmh sí, yo sí le daba y no consejos. Un rey visual.

– ¿HABLAS CON ÉL? – Emocionado se levanto y se acercó a mi posando ambas manos sobre la mesa.

Hwang Hyunjin era deseado tanto como por chicos y chicas, un Dios (también estaba en mi lista de crushes). Una cosa destacable de él era su muy buena reputación en el Instituto. Suele tener una personalidad coqueto con todos; también es amable y generoso.

Reí. – Sí, pero sólo somos colegas. – Aclaré. – ¿Crees necesitar más opciones?

Elmo tiene a las perras haciendo fila.

– No, quiero probar con Hwang. Creo podernos llevarnos bastante bien.

– ¡Perfecto! – Exclamé con una sonrisa en mi rostro. – Hablaré y te reservare una noche de charla con él. –  Guiñé mi ojo derecho.

Chae se notaba ansioso, después de tanta espera su trato se haría realidad.

De la puerta del local salió el mesero con nuestras bebidas. Amablemente se acercó dejándolas en la mesa "Qué disfrute" fue lo que alcancé a oír mientras se retiraba, hice un leve gesto de agradecimiento como correspondencia.

Hyungwon inmediatamente saco su teléfono para tomarle una foto al café para lo más seguro publicarla en sus redes sociales.

Un pequeño sonido de fotografía se oyó en nuestro alrededor.

– ¡Ah! ¿Te gusta la fotografía? – Pregunté, aproveché para conocerlo mejor.

– Un poco, sí. Me gustaría ser modelo o un fotógrafo, aunque creo que soy mejor en lo último. –  La risa que soltó había sonado tan tierna.

– Deberíamos planear para hacer una sesión de fotos, en algunos de mis tiempos libres suelo hacerme sesiones de fotos con amigos. – Comenté. Acto seguido tomé un sorbo de mi té.

– Tú en verdad serías un gran modelo, no entendiendo porque no lo tomas en serio. –  El pelinegro se mostró dudativo ante mí.

– Oh, es que mi sueño realmente ser un Idol del kpop, ¿has oído del kpop? – Era mi momento de brillar.

– Pues sólo conozco a los beteese y unos tal ¿eighteen, o era nineteen? Ni idea.

– Seventeen, Hyungwon. – Lo corregí, pero fue inevitable estallar en carcajadas. – Deberías escuchar a Monsta X, casi nadie conoce del grupo, pero sobran de talento. Me gustaría tener un amigo con el cuál hablar mi grupo favorito.

– Estaré encantado. – Dijo con una sonrisa. –  Cuando llegue a casa buscaré algunas canciones de Monster X

– ¡No, Monsta X. Ese-Te-A! – Lo volví a corregir con gritos, aquí mi enojo se hizo algo presente.

Ah shit, here we go again.

7:09 p. m.

Caía el anochecer. Mi tiempo con Hyungwon pasó más rápido que una clase de matemáticas, nos quedamos hablando de otras muchas cosas; bastante interesantes. No quería llegar tarde a casa así pagué y me ofrecí acompañar a Hyungwon hasta su casa.

Durante el camino nuestra charla se expandió, lo que hizo el recorrió relativamente corto. Disfrute mucho, aunque la mayoría de veces era yo el que sacaba tema para conversar.

Ambos llegamos a su humilde casa. Desde afuera se veía muy acogedora, otro día quizás la conozca. Lo deje en la puerta y bajo el hermoso manto de estrellas que cubría el cielo me despedí con un abrazo.

Mentiría sí no dijera que me hubiese gustado seguir hablando de cualquier cosa, al final era divertido y entretenido.

¡Y de vuelta a la caminata hacía mi hogar!

Mientras caminaba me di cuenta que no vivíamos tan lejos, eso era algo bastante positivo. Abrí la puerta de mi hogar para que mi perro llegará corriendo a saludarme, me tome un momento para acariciarlo. Mis padres estaban desaparecidos, otra vez... ya era una costumbre llegar y que ellos anden afuera para llegar a las 3:00AM, ugh.

Me encerré en mi habitación dejando entrar a Pompidou.

Tomé una ducha rápida, me puse el pijama que era un bóxer casual y me tiré con fuerza a la cama. No pasaron muchos minutos para que me quedará dormido, el cansancio me mataba. Deseaba con ansias el viernes y apenas era lunes.

Mañana tenía el pendiente de hablar con Hyunjin, espero que salga bien.