Nightmares [Stony]

Tres

Se hundió en la fría tina llena de hielo flotando y deshaciéndose a la vez, tratando de poder relajar sus músculos eso después de la dura misión que tuvo hace unas horas junto a Natasha, la mujer tampoco dejaba de quejarse de cómo sus manos y piernas dolían, pero la satisfacción de haber hecho algo bueno era lo mejor al final del día.

-Steve... -Se escucha la perfecta voz rusa al otro lado de la puerta.

- ¿Si?

-Me iré con Bucky... Cuida de Tony ¿está bien?

Ella sabía de las pesadillas que Tony tenía porque Pepper se lo había contado, las razones también pero no se lo diría a Steve, eso era algo entre Tony y él, ella no tenía que ver nada en ese asunto, le preocupaba su mejor amigo si, pero sabía que con Steve junto a él iba a estar bien.

No tenía que preocuparse de nada, tal vez solo el que esté lo vuelva a lastimar como la última vez porque esa si no se la iba a perdonar y ella misma iniciaría aquella guerra otra vez.

-Lo haré y por favor... No traigas al tonto de Bucky borracho.

-No te prometo nada...

Steve solo ríe, lo bueno de aquella guerra fue que Natasha y Bucky pudieron arreglar sus problemas y darse una oportunidad para volver a amar, su relación era algo rara, Natasha parecía más dominante de lo que Bucky podría serlo en su vida, pero eran felices y eso era lo único que importaba.

Sale de la gran tina una vez que relajo todo su cuerpo para después ponerse una ropa cómoda y acostarse en la cama, no quería dormir, quería estar al tanto de cualquier sonido proveniente del cuarto de Tony, pero no pudo su vista lo estaba traicionando cayendo en un profundo sueño que no pudo detener.

Despierta luego de unas horas al escuchar los fuertes gritos de Tony llamándolo.

- ¡STEVE, STEVE!

El rubio no dudó en levantarse de golpe de la cama yendo hasta su cuarto.

-Aquí estoy Tony ¡Perdóname!

Se acerca rápidamente a él abrazándolo fuertemente sin dejar de decir que lo sentía.

-¿Eres tú?

-Soy yo...

El ojiazul agarra su mano para poder acercarla hasta donde estaba su corazón y este pueda sentirlo palpitar.

-Estoy aquí...

El castaño el cual se encontraba con sus ojos llorosos y temblando a la vez, asiente limpiando sus lágrimas con su otra mano.

-No me dejes, por favor...

-No lo haré Tony, me quedare siempre aquí.

Esa noche decidieron ver una película logrando finalmente que Tony pudiera dormir plácidamente a la mitad de la película.

Steve no pudo hacerlo, sentía miedo de que Tony despertará y él no pudiera estar despierto para cuando eso pasará, así que se quedó despierto toda esa noche solo para demostrarle a Tony que no se iba a marchar, esta vez no iba a ser así y era algo que iba a cumplir.