Cinco

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Observa las manecillas del reloj dando vueltas una y otra vez, esperando volver a escuchar los gritos en el cuarto de Tony le era raro de que el reloj colgado en la pared marcase las 4:23Am y el de ojos avellanas parecía no tener ningún problema con seguir durmiendo.

Si, se había quedado despierto toda esa noche como lo llevaba haciendo durante semanas solo por él, quería ser la primera persona en correr hasta él para que se sienta protegido en sus brazos más no fue así.

Se levanta de la cama para dirigirse hasta su puerta y pasar hasta la de Tony, solo quería asegurarse de que realmente él estuviera bien.

Abre la puerta con sumo cuidado de no provocar ningún ruido con esta, pero se llevó la sorpresa de no verlo en la cama.

-Tony...

Susurra, no recibe respuesta alguna, empezó a buscarlo en todo el cuarto como un completo loco, su corazón parecía que quería estallar por el miedo que se estaba apoderando de este.

Fue hasta al baño y tampoco se encontraba allí, lágrimas amenazando con querer salir no faltaban, jamás en su vida experimento esa clase de miedo por perder a alguien, a alguien que amaba con toda su vida.

Para ser honesto si lo tuvo, en la guerra cuando estuvo luchando contra Tony por proteger a su amigo el cual no tenía la culpa de lo que estaba pasando, tenía miedo de lastimarlo aún más pero no había vuelta atrás, el daño ya estaba hecho.

Salió de la habitación buscándolo en las demás sin dejar de gritar su nombre, no encontraba rastro de este parecía como si se lo hubiera tragado la tierra.

No podía creer que le volvería a mentir, decirle que lo iba a cuidar de que nada le pasará que iba a estar siempre junto a él y ahora este no estaba en la habitación hacía que quisiera odiarse así mismo.

-Steve....

La voz suave de Tony detrás de él lo hizo sobresaltar, se volteó rápidamente para mirarlo asegurándose de que estuviera completo una vez que comprobó aquello se abalanza contra sus brazos para abrazarlo con todas sus fuerzas.

-Steve me vas a dejar sin aire...

-L-Lo siento... Yo...

-Steve ¿estuviste llorando? -Pregunta una vez que se separaron acercando su mano hasta su mejilla limpiando las lágrimas que aún seguían allí preocupándose por el ojiazul.

-Creí que te secuestraron o que algo te paso...

-Steve nadie me secuestrará, no por ahora. -Ríe al tan solo pensar en eso. -Estaba en el taller hasta que escuché tus gritos, está vez creí que el que estaba teniendo pesadillas eras tu. -Bromea logrando que el rubio ría.

-Perdona, me asuste al no verte... -Vuelve a respirar con tranquilidad al saber que nada pasó, que Tony seguía junto a él, Tony asiente sonriendo.

-Ven quiero contarte algo...

Agarra su mano caminando hasta su habitación sentándose ambos en el filo de la cama.

-¿Quieres saber sobre que eran mis sueños?

Era claro que Steve quería saberlo, llevaba esperando tanto tiempo hasta que Tony estuviera seguro en querer contarle lo que tanto sufrimiento le causaba en las noches, él realmente quería, necesitaba que se lo dijera de una vez por todas para poder decirle que esas horribles cosas que sueña no pasaran jamás porque se mantendría junto a él.

-Si.

Sale un suspiro de los labios del castaño acomodándose en la cama para poder estar frente al él cruzando sus piernas en modo indio.

-Todas las pesadillas que he tenido... -Hace una pausa tomando aire para lo que soltaría. -Son sobre ti, tú eras quien me hacía sufrir...

Aquello se lo tomó como un balde de agua fría, no se esperaba eso, Steve quien creyó que lo estaba protegiendo en las noches cuando despertaba era el causante de que Tony no durmiera por miedo a soñar, por miedo a soñar con él.

-Tony yo...

No podía articular alguna otra palabra, se quedó sin hablar durante minutos.

- ¿Quieres que te diga de que trataban?

El capitán no sabía si asentir o solo marcharse de allí para no hacerle más daño, pero solo asintió, tenía que saber qué era aquello antes de solo dejarlo, porque fue un cobarde la primera vez y ahora solo se marchaba por el bien que le iba a hacer a Tony.

-Luego de que la guerra terminará, llegue a casa destruido, mi corazón estaba destruido por ti... -Relame sus labios sintiendo que se iba a quedar sin aire. -Esa noche tuve la primera pesadilla, soñé que ibas a volver solo para lastimarme, para soltar otra mentira más, para romperme por completo...

Las primeras lágrimas saliendo de los ojos del castaño se estaban haciendo visible, Steve comenzó a sentir culpa tanta como nunca antes, su corazón se estaba rompiendo de la misma manera en la que se lo ocasionó a Tony.

-Después de eso, todas las noches se trataba de lo mismo una y otra vez, todas siendo peores que las otras, en todas me lástimabas Steve pero sabes algo eso no me dolía, lo que me dolía era en que todas me terminabas dejando, dejando como a un perro que te fue fiel siempre y dejarlo abandonado solo porque rompió tu camisa favorita o alguna otra cosa, rompiéndome a la vez como una funda de regalo que no serviría más, solo Steve completamente solo y roto. -Tony limpia sus lágrimas intentando poder seguir. -Cuando despertaba gritando tu nombre es porque esperaba verte, esperaba que aquello sean eso pesadillas, pero me dejaste viviendo con ese miedo... el miedo a que me dejes para no volver nunca más.

En ese momento fue que comprendió que dejarlo iba a ser peor, pero quedarse lo era también, Steve pasa su mano por su cabello sintiendo su frente sudar, entonces coge sus manos.

-Quiero... Quiero que me digas que es mejor...

-¿Que es mejor de qué?

No entendía de que hablaba, su ceño se fruncía.

-Quieres que me quedé o que me marché...

-Te valió mierda lo que te dije ahora.

- ¿Qué? ¡No! -Se apresura a decir negando con su cabeza repetidas veces. -No Tony, lo entiendo, pero no sé qué hacer no quiero lastimarte.

-Quédate y demuéstrame que aquello no es cierto.

-Tony...

- ¿Sabes qué? Mejor lárgate es lo único bueno que sabes hacer.

Tony iba a seguir hablando pero se vio interrumpido al sentir lo labios de Steve contra los suyos, se había olvidado por completo que era lo que iba a decirle.

-Me quedaré. -Susurra Steve sin separarse de sus labios pegando su frente contra la de él. -Me quedaré para que sepas que no me iré, no lo haré más Tony... -Entrelaza su mano con la de él. -Me quedaré e intentaré que nada malo te ocurra y sepas que aquello que sueñas...

-No es real...

El rubio asiente sonriendo pasando su mano por su mejilla.

Esa noche el capitán le hizo una promesa, una que hasta el día de hoy sigue cumpliendo, desde que duerme todos los días junto al genio nunca más volvió a despertar en las noches, nunca más volvió a sentirse tan vacío como hace algunos años atrás, las pesadillas nunca más regresarán mientras estén juntos, nada malo pasará.

-

Soy yo otra vez, muchas gracias como siempre por sus votos, comentarios y por tomarse el tiempo en leer esto.

No soy buena escribiendo algunas cosas pero hago el intento, perdón.

No vemos en la próxima.❤

Con todo el amor Nely💖

Nightmares [Stony]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora