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Giovanaderossi               2h

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Babe💍

-¿Donde estas?

-Saliendo del gimnasio a casa de Alessia

-Los chicos nos han invitado barbacoa en casa de Mike

-De acuerdo
-Ire a dejar a Ales y voy a casa

-Bien
-Salgo en una hora, apresurate

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-¿En verdad quieres ir?.

Levante los hombros tras la pregunta de Alessia. En realidad no tenia ánimos de hacer nada mas que acostarme, pero ya le había dicho que no la vez que viajo a New York.

Ademas, los chicos no eran tan malos. Lograban ser un poco divertidos, y para ser honesta no necesitaba encerrarme en mi habitación todo el día.

-Voy a estar bien. Son solo los chicos.

Ellos también conocían a Alessia, y la mayoría le caía bien. Sin embargo, Alessia había siempre intentado estar lo mas lejos de Dan posible, eso implicaba también a sus amigos.

Sabia que la lastimaba. El había sido su mejor amigo y me sentía culpable porque ellos se separaran, aun cuando quería convencerme de que en realidad yo no había sido la causante de todo.

-Me avisas cualquier cosa. Sabes que puedo pasar por ti a la hora que sea.

Asentí. Ella cerro finalmente la puerta del auto. Estaba cansada y necesitaba una ducha rápida.

Por eso agradecí que viviéramos a una cuadra de distancia. Aparque el auto sin cuidado y me baje con pereza. Podía ver a Dan en la ventana de la sala arreglando una pequeña maceta que se encontraba sobre la repisa de madera.

Sonreí de inmediato. Quería con toda el alma a Dan, pero no podía dejar de cuestionarme que yo no quería seguir en el mundo de mierda que el llevaba.

-¿Como estas? -. Me pregunto cuando me vio entrar. Camino sonriendo en mi dirección y dejo un beso distraído sobre mis labios para luego volver con la maceta.

-Bien. ¿Que haces?.

-Deje la ventana abierta y las cortinas la tumbaron. Ahora no recuerdo como lo habías puesto para que no se cayera -. Se rió concentrado

Sonreí con ternura. Dan era imbécil, pero también tierno y amigable muchas veces.

-Tienes que meter los dos tornillos en los dos huequitos de la maceta -. Camine en su dirección y señale los dos orificios.

Dan asintió e hizo lo que le dije, dejando la maceta fija en su lugar 

-Genial. Ahora ve y cámbiate, Mike nos esta esperando -. Aviso

Me di la vuelta y rodé los ojos cuando sentí su mano golpear suavemente mi nalga derecha. Era una mala costumbre que el tenia.

Entre a la habitación sin cuidado y me deshice de la ropa que traía en dos segundos. Dan estaba de buen humor, y me había animado un poco a ir con el y sus amigos. Adoraba a Dan cuando no era un maniático psicópata.

Me senté sobre la cama para quitarme los tenis y fue cuando me di cuenta del ramo de rosas que estaba colocado en medio de la cama que compartía con Dan. Eran preciosas, y había una nota junto a ellas.

¨Te amo,

                         Dan.¨

Sentí un escalofrío pasar por mi espalda y sonreí como idiota. En realidad el estaba muy feliz aquel día, y eso me había feliz a mi.

Dan no era romántico, mucho menos detallista, pero sin duda cuando actuaba de esa forma lograba derretirme por completo.

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Giovanaderossi               20m