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Capítulo VII

Después de todo lo que había ocurrido en su habitación Loki estaba demasiado cansado, con hambre y con sed.

Moviéndose un poco, vio que Thor seguía dormido, su pesado brazo estaba encima suyo, sus cuerpos juntos.

Viéndolo respirar pesadamente, se quitó el brazo del rubio de encima suyo, después de la última vez, Loki había decidió soltarlo de las manos, dejándolo atado únicamente de piernas.

Saliendo de la cama, tomó su bata, comprobando que Thor seguía dormido, vio su reloj, las 5 de la tarde, había pasado toda la noche y casi todo el día encerrado en su habitación con el fortachón que ahora dormía tranquilamente en su cama.

Sin hacer ruido, salió de su habitación, viendo a un castaño salir de la habitación de al lado.

—Tony—

El castaño volteó su rostro asustado, sonriendo cuando vio de quien se trataba —Hey— lo saludó —¿A la cocina?—

—¿Como lo sabes?—

—También tengo hambre y sed— le contesto levantando los hombros.

—Vamos—

Y sin más plática, ambos se dirigieron a la cocina, soltando un grito cuando vieron a un hombre esculcando su refrigerador.

—¿Que haces?— grito Loki.

Viendo al hombre levantar la vista, saco un arma apuntándoles.

—Perfecto, ¿Traes tu arma?— preguntó Tony a Loki.

—¿Parece que la tengo?—

—Cállense y díganme quien rayos son—

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—¿A donde vas?— había preguntado Steve mientras tenía abrazado a Tony.

—Tengo hambre, ahora regreso— le contesto dando un beso en la mejilla.

—¿Te acompaño?— le preguntó Steve mientras bostezaba.

—No, no tardo—

Tony se levantó, se colocó su bata mientras veía como Steve abrazaba la almohada que él acababa de dejar.

Sonriendo salió de su habitación.

Steve vio salir a Tony, quería acompañarlo pero se encontraba muy cansado para levantarse, abrazó la almohada que acaba de dejar Tony dispuesto a dormir más tiempo.

Pero antes de poder conciliar el sueño, había escuchado dos grito, uno de alguien que claramente no conocía, pero otro era de Tony.

Levantándose rápidamente y tomando la sabana que habían ocupado, cubrió su cuerpo y salió de la habitación, encontrándose con Thor.

—También estás aquí— le dijo a Thor mientras lo veía vestido de igual manera que el.

—Steve— saludó Thor.

—Cállense y díganme quien rayos son— escucharon ambos, viéndose y asintiendo con la cabeza, se dieron cuenta de que esa era la voz de Quentin.

Steve siguió a Thor, mientras seguían escuchando la plática.

—Tu eres quien debería contestar eso— hablo Loki.

—Y como rayos es que estás libre— dijo Tony.

Pero antes de poder contestar algo, Quentin vio a Thor y Steve detrás de los dos hombres que tenía enfrente, sonriendo al saber que tenía a sus amigos frente suyo se tranquilizó, pero el siguiente acto lo dejo confuso.

—Quentin, baja el arma— había hablado Steve mientras lo veía cubriendo el cuerpo del castaño.

Volteando a ver a Thor él había imitado la acción de Steve, cubriendo con su cuerpo al pelinegro.

—¿Que rayos pasa con ustedes dos?— les preguntó.

—Quentin— Quentin escuchó la voz de Peter, saliendo por el mismo lugar que Thor y Steve, lo vio sonreírle —Baja eso— le dijo mientras lo veía caminando llegando enfrente suyo, vio la mano de Peter bajando su arma.

Bajando su arma y tomando de la mano a Peter, colocándolo a su lado escuchó hablar al castaño.

—Peter, ¿lo soltaste?—

—Perdón—

—¿Que está pasando aquí?— preguntó Thor.

—Lo mismo quiero saber— esta vez fue Steve.

—¿Se conocen?— preguntó Tony desde atrás de Steve, sacando su cabeza viéndolos a todos.

Loki camino y se colocó al lado de Thor —Thor, ¿Quienes son ellos?—

—¿Peter?— preguntó Quentin.

—Bien, bien, parece que esto se está saliendo de control, Peter dame el arma—

Quentin vio como Peter le daba el arma al hombre que se la había pedido.

—Ahora, Steve ve a ponerte algo de ropa—

—Tu también Thor— le dijo Loki.

El gran maestro les había dado la ropa que habían portado en su captura, a él no le importaba tenerla y a sus compradores posiblemente si, después de todo no todos decidían comprarle ropa a sus adquisiciones.

Saliendo por su ropa, Thor y Steve tardaron menos de un minuto en regresas, los dos portando únicamente un pantalón.

—Bueno, algo es algo— dijeron al unísono Tony y Loki.

—¿Ahora me pueden decir qué sucede aquí?— preguntó Quentin.

—Que hacías tú en nuestra cocina—

—Tenía hambre— contesto lo obvio.

—Peter, ¿Por que lo soltaste?— preguntó Tony.

—Perdón, se veía muy mal, además ellos también están libres— señalo hacia Thor y Steve.

—Steve recibe un choque eléctrico cuando lo necesitó—

—Thor estaba amarrado— dijo Loki mientras se diría a Thor con duda reflejada en sus ojos.

Loki lo vio sonreír, sobándose la nuca hablo —tome las llaves mientras dormías— sonrió. Loki lo miro con enojo a lo que Thor soltó un pequeño —Lo siento—

—Friday— hablo Tony —Prepara comida para seis personas.

Dirigiendo Tony, Loki y Peter a su pareja respectivamente se sentaron en las sillas de su cocineta.

—Está plática estará interesante— hablo Quentin.