Me despierto ansiosa. Miro el reloj, son las 6 p.m., su vuelo no llega hasta las 8 p.m. así que decido darme una ducha.
Dejo que el agua caiga por mis hombros y empape todo mi pelo y mi cuerpo.No puedo dejar de pensar en él. En su pelo rubio oscuro color miel, sus ojos azules brillantes y su hermosa sonrisa.
Nunca he creído en el amor a primera vista pero con el fue distinto nos conocimos hace ya 7 meses en la entrada de mi trabajo, mi hermana me había llamado que el parto se había adelantado y que fuese al hospital cuanto antes. Salí corriendo de mi oficina para pedir un taxi. Justo paso uno y levanté la mano para pararlo, sin fijarme que ya había alguien que había parado ese taxi, era un chico alto, guapo y vestía con traje, tenía un aire a empresario de alguna oficina o empresa que había en la misma calle que mi trabajo.
Cuando el taxi paró yo salí corriendo para montarme en el, al verme el chico que había parado el taxi también se apresuro para impedirmelo.-¡Ey!-me grito- este taxi lo he parado yo.
- Lo siento es una emergencia- le miré directamente a los ojos- por favor
- Esta bien- suspiró- yo tomaré otro
En ese momento me metí en el coche lo más rápido que pude y le pedí al conductor que me llevara al hospital. Cuando me di cuenta de que no le había agradecido ni me había despedido del chico que me había cedido el taxi.
Cuando llegué al hospital fui a ver a mi hermana y la encontré en una cama junto con mis padres, su marido y un precioso bebé entre sus brazos.
Entré gritando en la habitación: ¡Enhorabuena Gina!
En cuanto me vio aparecer intentó levantarse para darme una abrazo pero antes de que no consiguiera me abalancé sobre ella con cuidado de no aplastar al pequeño bebé.
Tan solo hacia 2 años desde que se casaron y ya han conseguido formar una verdadera familia. Estoy muy orgullosa de ella, siempre lo he estado, al fin y al cabo ella es mi hermana mayor.
Cuando salgo de la habitación no puedo creer lo que encuentro...el chico del taxi.
Me mira y empiezo a disculparme- siento mucho que me haya ido así sin agradecerte que me dejaras el taxi, y sin ni siquiera despedirme
-No te preocupes- echa un vistazo a la habitación sigue- entiendo que fuese una emergencia
Me río y le hago una propuesta- te apetece que tomemos algo para agradecerte el favor
- No tienes que agradecerme nada, tan solo te he cedido el taxi, aunque encantado bajaré contigo a tomar algo.
Desde ese día, empezamos a vernos más hasta el momento en el que empezamos una relación algo más formal.
Algo tan absurdo como ceder un taxi, había provocado en mi vida una relación de 7 meses con el chico más maravilloso que había conocido en mi vida.
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¿Te puedo hacer 2 preguntas?
Novela Juvenil¿Que pasaría si besases al primo de una amiga tuya sin saber que son parientes? En esta historia la vida de Sammy da un giro cuando después de romper con su novio decide volver a la acción y volver a enamorarse. Aunque todo se le complica cuando el...