Cαρเ́ƭµℓσ ⟦6⟧

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Lo que más amaba Yoongi era su cama, y por supuesto, dormir.
¿Lo que más odiaba? Que hagan ruido cuando estaba en aquel apocento de ángeles.

Habia nacido con el don de dormir tan pesadamente, que el mundo se podría caer a pedazos y el apenas lo notaría. Sin embargo, antes de que sus ojos se cerraran para dar lugar a la paz, sus oídos se agudizaban de tal manera que cualquier sonido, por más leve e efímero, se volvía estridente, alarmante.

Por aquello es que se levantó irritado de aquel colchón divino, dispuesto a ir por aquel que osaba joderle la siesta, molerlo a golpes y posteriormente volver a dormir.

Azotó la puerta tras el y descubrió que el ruido molesto provenía de la habitación de Jungkook.

Se escuchaban...¿Quejidos, sollozos?...Okey...Si era el hormonal de Jungkook y su esposa en algún acto impuro iba a quejarse con Seokjin.

Este pensamiento casi lo convenció para dar vuelta y dormir en la sala, más algo en el quiso acercarse, ¿se le podría decir instinto?

Sin hacer ruido se acercó a la puerta. Asomando apenas su mirada, con cuidado de no ser visto.

Pero Jungkook no estaba en la habitación.

Solo Sunhye. Llorando.

Min Yoongi no era un chico que solía entrometerse, mucho menos entrometerse en la vida de los demás. Normalmente, hubiera dado la vuelta.
Pero este era un caso especial, ¿por que?
Simplemente porque algo en aquel rapero se estrujo al ver las lágrimas cristalinas de aquella mujer caer cual cascadas.
Sunhye estaba acurrucada en una esquina, sollozando fuertemente, intentando-inútilmente- callar aquellos ruidos con su mano, cual hacia presión en su labios.

Un golpe de confianza azotó a Yoongi y decidió acercarse, colocándose al lado de la muchacha, que recién se percataba de su entrada.

-¿Fue Jungkook?-pregunto simplemente.

La joven pareció entender y negó.

Yoongi estaba feliz de que la muchacha fuera de pocas palabras, odiaba a las mujeres charlatanas.
Le gustó aún más que lo entendiera y no demandará nada mas que su apoyo.

-Si a sido él, el que te ocacionó este dolor, puedes decirme, te prometo que no tomaré partidos-argumento decidido.

-J-Jungkookie nunca me hace llorar, el es bueno...

Si dejaba llorando a su esposa de este modo, sola, no era tan bueno que digamos. Al menos eso pensaba Yoongi.

-Entonces...

-El problema soy yo- sollozó decidida, viendo a un punto fijo en la pared.-El problema es mi familia.

En peleas familiares tenía bastante experiencia, sabía muy bien lo doloroso que era sentirse odiado por las personas, que algún día, fueron tus pilares y que hoy se derrumban en desprecio y repudio hacia su persona.
Sabía lo que era odiarce a sí mismo, pensando egoístamente, que no tenía a nadie.

Sin embargo esto no siempre era cierto. En su tiempo Yoongi tuvo a su hermano mayor, y posteriormente a Bagtan.
Y Sunhye tenía a Jungkook, y aparentemente, ahora lo tenia a el.

-El problema es que traigo desgracia a cualquiera que me cruce.

Yoongi no sabia como expresar todo lo que quería decir.
Todo el apoyo que quería brindarle. Aunque no la conociese, algo en él quería reconfortarla. Pena ajena.

Porque sí, Yoongi sentía pena por aquella joven, alejada de sus padres, con un marido ausente.

Sentía pena, pero sabía que no debía sentirla.
Porque ella tenía a alguien que lo hacía ya. Su marido.

-Yo no lo creo así, haces que Jungkook este feliz, eso no es una desgracia para nada - declaró seguro.

-Eso no basta...-susurró, más para ella que para él, ahora undiendo su rostro entre sus piernas.

-¿Que?-no entendía lo que aquella chica decía. Para ser exáctos no entendía nunca nada de lo que las mujeres decían.

-Estoy feliz cuando estoy con Jungkook. Pero eso es cada mil años, tengo constantemente miedo, ansiedad, soledad...-sollozó desganada, dirigiendo su mirada por primera vez a aquel pálido joven.

-¿Miedo, de Qué?-preguntó inquieto. Extrañamente encantado por aquellos orbes claros, que lo miraban aguados en desdicha.

-De que él me encuentre...-confirmó, mientras una solitaria lágrima hacia su recorrido por toda su mejilla.

-¿Quien es él?

Pero Sunhye no respondió. Solo miró hacia la nada con dolor. Apretando sus labios con los dientes, causando un fuerte color carmesí en estos.

- ¿Se lo dijiste a Jungkook? ¿que te sientes sola?-decidió preguntar de nuevo, esta vez con otro tema. No le gustaba rogar respuestas, por más interesado que estuviera.

Ella negó lentamente. Sin ánimos, su cabellos antes bien recogido se veía desarreglado, causando un efecto lamentable, poco bello.

Más a Yoongi le gustó.

-Si se lo dices, estoy seguro que tratará de solucionarlo. Ambos lo harán- intentó convencer, procurando ser cálido. Cosa que raramente le salía.

-A veces tengo miedo del mismo Jungkook - susurró inaudible.

Más Min Yoongi la escuchó. Estaba a punto de preguntar de nuevo cuando una nueva presencia en la habitación lo interrumpió.

-¿Sunhye?

Yoongi pudo apreciar como los ojos de la antes nombrada se iluminaban de gozo al sentir tal aparición. Pudo ver como una sonrisa débil se asomaba en su rostro.

Una vez que estuvo fuera de la habitación, no necesitaba darse vuelta para saber que se abrazaban.

Supongo que eran el remedio perfecto para el otro.











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Pués bueno...Por fín un nuevo capítulo. No me gustó del todo. Pero bueno.

Además, también quiero informar que Cómo tengo mucho trabajo en la escuela, no puedo permitirme el estrezarme por las actualizaciónes.

No interpreten esto erróneamente, voy a actualizar frecuentemente , pero esperaré que cada capítulo tenga un número estimado de vistas. Así no me preocupo tanto por esto y a la hora de actualizar no lo haga con irritación.
🙇💜
S

orry por los errores 😔✌

Gracias por leer -a los pocos y fieles que lo hacen-

❛❛Do not leave me//JK❜❜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora