Contrareloj

400 36 47
                                    

〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰〰

—Qu. . .¡¿qué?!—me aparté de Golden—¡¿por qué me dices esto después de tanto?!—llevé ambas manos a mi cabeza mientras comenzaba a retroceder—¿acaso quieres confundirme más? —dirigi la mirada al suelo. Solo quería verlo luego de año y medio, no esperaba que me dijera tal cosa

Como si el momento no fuese lo suficientemente confuso, Golden comenzó a reírse mientras llevaba las manos a su estomago como si verme de aquel modo fuese lo mas cómico que hubiese visto en toda su vida

—Golden—me abracé—me estás asustando —aún así no pude apartar la mirada de él, por alguna razón no se veía como un lunático, mas bien, parecía ser de aquellas risas contagiosas y amistosas

—Lo siento, lo siento—vi como llevaba una mano cerca de su ojo izquierdo para limpiarse una lágrima que había brotado a causa de su risa—es solo que—pareció calmarse mientras suspiraba—no quería guardarme esas palabras por más tiempo—aún confundida, decidí acercarme lentamente a él, al menos no había entrado en estado de shock

—Sabes que eso es imposible—llevé mi mano derecha a su brazo demostrando lo apenada que estaba. Era cierto que en el pasado me había puesto nerviosa a su lado y por momentos anhelaba poder curarlo para que pudiera estar a mi lado pero...—Golden yo soy una enfermera oficial ahora y tú un paciente, cosas como los romances entre nosotros están prohibidos—apenas dije esto, me sujetó delicadamente de la mejilla que había sido golpeada por mi paciente Deuz

—Tienes razón —su mirada pareció perder brillo mientras esbozaba una ligera sonrisa que no me produjo más que inquietud—eres toda una enfermera ahora—comenzó a acariciar la zona lo cual me produjo un gran escalofrío sin embargo, no podía moverme, por primera vez en mucho tiempo aquel dulce paciente me pareció aterrador

—Y-y...yo—no pude terminar ya que puso el dedo índice en mis labios

—Shh—siguió mirándome fijamente—no tienes que decir nada—su voz pasó de ser serena a profunda, pausada, hasta podría jurar que ligeramente burlona, mantuve la vista fija en él hasta que apartó su dedo de mi boca

—Gol...den—mis piernas comenzaron a temblar, era extraño sentir su tacto en esa parte de mi cuerpo incluso podía sentir su calor después de apartarse

—Tu siempre fuiste mi pequeña luz—miró su mano por un instante y luego besó el dedo que tenía posado en mis labios, esto causó que la sangre subiese a mis mejillas ya que podría interpretarse como un beso indirecto—que interesante—lo ví sonreír—yo...—me miró fijamente mientras sus pupilas comenzaban a contraerse —¡ya no siento nada!, ¡no hay nada!, ¡nada!, ¡estás apagada!, ¡pérdida!, ¡te volviste como las otras enfermeras!

Quería salir corriendo de ahí, pero había una fuerza que me lo evitaba. Una parte de mi estaba desconcertada y la otra rota, ¿realmente había cambiado tanto?, ¿cuándo fue la última vez que sonreí sinceramente?. Mi cabeza era todo un lío, sólo quería pasar a saludar, saber lo que pasó el día de la masacre, no quería encontrarme con un Golden destruido. Su forma de tratarme solo logró enfurecerme, ¿acaso veía mis sentimientos pasados como una broma?

—¡Eres un idiota!—solté—¡¿cómo te atreves a hablarme de esa forma?!—mi corazón latía con fuerza y rapidez, estaba asustada pero mas que nada molesta—soy tu enfermera y superior, ¡ten más respeto!—me percaté de algo; estaba comportándome de una manera egoísta, ¿esas palabras habían sido mías?

—¡Eres un cúmulo de cenizas!, ya no hay fuego, no tienes nada, ¡nada!—me encaró directamente

—¡Prefiero ser esto a volverme como tú!

Sálvame [[Fnafhs SICK]]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora