2-Un dios griego

1.2K 84 7
                                    

Luego de llegar a la playa estoy un poco más calmada, más tranquila pero sigo sin entender nada, no sé qué tiempo llevo sentada aquí sola, saco mi celular  para ver la hora y tengo 38 llamadas perdidas de Fabián y 16 mensajes que borro sin ni siquiera abrirlos. Me siento realmente mal estoy confundida, dolida y decepcionada, necesito hablar con alguien no estoy preparada para contarle esto a mi  familia así que llamo a alguien que sé que me va a ayudar.

- Hola Vane, ya sé, me llamas porque Fabián decidió quitarte las esposas y te vas con nosotras al bar, mira que valdrá la pena – dice Alison entusiasmada – y yo evito llorar al escucharla pero no lo consigo y pienso “si decidió quitarme las esposas para siempre”.

- Alis, necesito verte, necesito hablar contigo – digo, llorando más todavía que  casi no se entiendo lo que digo.

- Vanessa, ¿estás bien?, ¿estas llorando?, ¿qué te paso?, ¿dónde estás? , voy a buscarte ahora mismo – dice Alison asustada.

- No, dime si estas en la casa voy para allá? – le pregunto.

- Si estoy en casa dale ven, te espero – responde ella ansiosa.

Salgo de la playa  para coger un taxi   hasta casa de Alison y suena mi móvil, es Alison.

- Dime
-Ya estás de camino – pregunta Alis.
- Si, ya cogí un taxi para tu casa no te preocupes, nos vemos en 10 minutos    – le digo a mi mejor amiga.

Me bajo del taxi y salgo corriendo para el apartamento de Alison quien me espera ya en la puerta, apenas la veo me cuelgo a su cuello y empiezo a llorar desconsoladamente.

Ya una vez dentro me da un vaso de agua y me pregunta – que pasó? , Porque estas así?

Y yo empiezo a contarle todo lo pasó  entre llantos.

- Alis no sé qué pasó te juro que todo estaba bien – le digo a mi amiga que todavía me mira como si no lo pudiera creer.

- Amiga, porque no me avisaste antes? , ese hombre no vale la pena, ni siquiera merece cada  una de tus lágrimas, no llores más por favor, ven – y me invita a darme un fuerte abrazo que necesito – hoy te puedes quedar aquí conmigo, te voy a preparar un baño y llamar a Susy para cancelar, ok, no te preocupes por nada todo estará bien.

- Verdad que ibas a salir hoy – digo apenada por haber roto sus planes – no es necesario que rompas tus planes yo me puedo quedar aquí sola.

- Ni se diga, Vane por favor, claro que no, nada es más importante que tu así que déjate de tonterías – dice indignada – voy a cambiarme de ropa y prepárate el baño.

Ya estando sola en la sala decido mandarle un mensaje a mi mamá para avisarle que no llegaré porque no me gusta que se preocupe y ya cuando voy guardar el móvil, suena y es él otra vez,  pero esta vez sí decido contestar.

Apenas descuelgo ya siento su voz que antes tanto me gustaba y ahora me duele escuchar – Vanessa, cariño estas bien? Llevo todo el día llamándote, estaba preocupado por ti las cosas no pueden terminar así tan mal, por favor escúchame – me dice Fabián con una voz que si no hubiera cancelado la boda 6 horas antes, pensaría que le importo.

- Primero, no me digas cariño, ya no lo soy – digo secándome las lágrimas y respirando profundo para que no se note que estoy llorando – segundo tú decidiste que las cosas terminaran así de mal, ¿qué pretendías?, que como si nada tu ibas a cancelar la boda y yo te iba a decir, amor perfecto todo está bien, pues no, me duele, no puedo creer que después de tanto tiempo juntos tú me fueras hacer esto y lo peor es que no entiendo tus razones así que por favor ,ilumíname. – le digo para que me explique a ver si soy capaz de entender como de un día para otro se acabó todo.

Mi verdad eres tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora