Capitulo 16-. Hermanita

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Narración Omnisciente

Aquellos chicos continuaron haciendo pasteles, galletas, mas cosas ricas para su pequeña hermana, ella había les trago demasiada felicidad, durante estos días, y ellos tenían que devolver esa felicidad a su hermana que ahora lo necesitaba demasiado.

Mientras que la cocina era la que más sufría, había montones de masa en el techo, estaban haciendo que las galletas tengan una forma de corazón, pero solo lograban que aquellas galletas parecían solo un ovalo, el pastel se estaba hundiendo.

Las bandejas de galletas estaban hirviendo demasiado que podían agujerar la madera, lo cual eso era muy malo si alguien se lo comía, y más para la niña, algunos panquecitos empezaron a explotar, era un gran desastre en la cocina, pero era una buena intención lo que estaban haciendo, solo que no sabían cómo hacerlo.

Teniendo miles, pero miles de... ¿Dulces?, en una mesa, mientras que intentaban limpiar el techo de la cocina y apagar el fuego que desprendían de la estufa, además de intentar matar aquellas masas que se empezaron a moverse solas.

Ayato-. Hay que limpiar todo antes que venga Reiji y que mate a ore-sama – el estaba intentando matar a las masas que ya tenían cuchillos.

Subaru-. ¡¿Qué chin...Por que esas malditas cosas tienen cuchillos? – el intentaba no ser asesinado por una de esas masas, mientras que con el extintor congelaba a las masas.

Shu-. ¿Por que esta masa no se quita? ¿Quién le puso concreto a la masa? – el intentaba quitar la masa del techo, pero era tan dura que no lo podia quitar ni con una excavadora.

Laito-. ¡ME QUEMO! – Intentando sostener la charola con las galletas, pero sus guantes de cocina se empezaron a incendiar.

Kanato-. Teddy tiene mucha masa al igual que Bunny – el intentaba limpiar a los peluches con un pequeño trapito.

Todo era un desastre, que, si lo ve el segundo hermano mayor, le va a dar un infarto seguro, y quedra ser mortal para morirse, pero bueno por ahora es mejor terminar con el desastre que hicieron, mientras que ellos en su mente juraron ya nunca cocinar.

Durante un buen rato, ya terminaron con todo, las masas mutantes ya fueron destruidas, Laito por fin pudo apagar sus manos, antes de ser quemado por completo, el concreto del techo por fin se pudo arreglar, Teddy y Bunny quedaron muy limpios preparados para una Boda... O para una cita mejor.

Después de ese rato, se oyeron las pisadas del segundo hermano, pensaron que era mejor esconder los cadáveres y poner algo en los techos para que no se vieran los huecos que se habían hecho, además del mini incendio en el bote de basura, antes de que el llegara a la cocina, todo el mundo salió, mirando con atención las escaleras de donde se provenían las pisadas.

Reiji-. Bueno... ___ tuvo que ir a dormir un rato, quedo muy cansada y adolorida de la curación, así que al rato vendrá... -el solo se quedaba mirando a sus hermanos, mientras que miraba que en sus caras estaban un tanto asustados.

Shu-. ¿Ella esta bien?¿ Te dijo algo? – era el que tenía que hablar primero, aun quería descubrir aquel secreto que le ocultaba su hermanita.

Reiji-. Ella... Solo miraba abajo, se sentía muy avergonzada, no quería decirme nada de esto, solo pudo gritar, aquella cicatriz estaba de mal estado... Ella me decía que las enfermeras de la mansión nunca la curaban bien... Temo que esta cicatriz le produzca otra cosa – el solo miraba sus manos pues era algo que no podia evitar, aun tenia pequeñas gotas de sangre.

Subaru-. ¿Cómo que le puede hacer otra cosa?... Es una herida, tu la puedes desinfectar todo el tiempo, ella no puede ponerse mal... - solo negaba al oír aquellas palabras, tenía miedo, tenía demasiado miedo.

Todos los hermanos se quedaron callados, mientras que no sabían que hacer, miraban las escaleras, pensando de que esto es una broma de mal gusto y que la hermanita pequeña va a venir corriendo como siempre.

Reiji-. Hasta que nos diga que paso, yo no puedo hacer muchas cosas, no se si lo que le hago le va a servir en adelante, o la está empeorando – mientras que el seguía lamentándose por no poder hacer nada más, quería poder curarla.

Shu-. Hay que protegerla, ante cada caída, ante cada golpe, hasta que veamos una mejoría, para saber que es lo que le afecta, así que tenemos que cambiar bastante nuestras actitudes, no vamos a pelear mucho, por si acaso ella resulta lastimada de nuestras peleas, al menos no ella presente – el solo miraba a sus hermanos, mientras que se quería demostrar fuerte.

Laito-. Yo la protegeré a toda costa, la pequeña princesa – el estaba viendo en donde se podia caer, para siempre estar en esos lugares y rescatarla.

Reiji-. Eso seria algo bueno, pero tenemos también nuestro colegio, tengo que inscribirla, en su escuela, ya que no podemos dejarla sola, pero lo único malo son... - él estaba caminando hacia la cocina, mientras que pensaba en cosas que tenía que hacer.

Ayato-. No tenemos que ir al colegio, sabes que nosotros no aprendemos casi nada, ya lo hemos vivido muchos años – el estaba furioso por saber que tenia que llevarla a aquella niña en un lugar así.

Shu-. Tiene que superar su miedo Ayato, no puede vivir siempre con ese temor, quien sabe que sucederá adelante, nosotros no podemos vivir sin sangre – el quería darle la razón a su medio hermano, mientras que seguía a su hermano mayor.

Por un momento todos olvidaron lo que habían hecho en la cocina, así que solo se pusieron a alegar el por que ir al colegio, sobre proteger a su hermanita, a tomar otras medidas, de los humanos, tenían un montón de cosas en su cabeza que por ultimo que se les paso en su mente era el desastre que habían hecho en la cocina.

Cuando el segundo hermano mayor entro solo se quedó paralizado, al ver su cocina toda destruida, miro con tanta furia a sus hermanos que parecía ya un verdadero monstruo.

¿Este es el fin de estoshermanos?

La Ultima SakamakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora