Harper || Nicky, Ricky, Dicky and Dawn

Capitulo 6

Por fin la hornada escolar había terminado, los adolescentes estaban saliendo por la puerta principal mientras se dedicaban a hablar sobre cualquier tonteria, luego bajaron las escaleras hablando sobre otro tema que les interesaba a los cuatrillizos. Necesitaban saber para quien era las cartas, si para Ricky o para Nicky

— ¡_______, date prisa!— llamo un castaño de diez años, la mencionda volteo a ver a su hermano menor. El cual estaba desperado, porque su padre volveria de su viaje de negocios, y quería verlo aunque lo negara

— ¡Ya voy, Ben!— exclamo para luego voltear a ver a sus amigos— Bueno, hablamos después de eso. Nos vemos— les regalo una sonrisa

— Adios, _______ — respondieron con una sonrisa a lo que la castaña se dirigió hacia su hermano, el cual solo la agarro de la muñeca intentando que apresurara el paso

La adolescente de quince años se burló del menor por la desesperación que tenía este, era muy obvio que extrañaba a su padre, a pesar que este intentara negarlo con la tipica excusa "A mí no me importa que le pase"

Se dirigieron a su hogar rápidamente mientras hablaban, o más bien, el castaño intentaba ignorar las burlas de su hermana. A él no le importaba el hecho que su padre volvería después de haber estado un mes en ese viaje de negocios, claramente que no le importaba

Bueno... Tal vez un poco

(..............)

Los cuatrillizos se encontraban en la sala de su hogar, pensando para quien podría ser las cartas, y sobre todo, quien las escribio. Soltaron un suspiro pesado al no encontrar respuestas, tendrían que esperar a que otra carta apareciera

— Esto es ridiculo — comento Dicky con molestia, desde que supo que las cartas nos eran para él, se encontraba irritante ante todo

— Solo estas así porque las notas no eran para tí— Ricky lo miro burlon a lo que el de ojos cafes lo miro con enfado

— Ricky, luego te burlas de Dicky— dijo la rubia haciendo que Dicky le lanzara un mirada molesta mientras el de ojos azules solo sonreía — Lo importante ahora es saber para quien va dirigidas las cartas

— Exacto— menciono el azabache con una leve sonrisa, estuvo pensando sobre aquel tema, y puede que fueran para él. Había una esperanza ¿no? Y si no eran para él, lo entendería