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BoruSara: Mundo shinobi actual.
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| Centímetros |
De solo escucharlo se estresaba, el remolino de vergüenza crecía en su interior. Nunca les había dado importancia a los estúpidos centímetros, pero ¡Ahora sí!
Miró a su compañera de soslayo, los cabellos de Sarada ya habían crecido un poco, tiempo atrás a penas le rozaban los hombros, ahora, las puntas caían más lisas. Ella estaba creciendo y él no.
¡Estúpida biología! ¿Por qué las mujeres se desarrollan antes?
Su altura nunca había sido un problema para él—solo tenía trece años—pero a lado de ella lucía bajito, y no lo era del todo, es más alto que la delegada, Namida y ¿Wasabi? No, ella era más alta que él, pero no le importaba tanto.
"La tía Sakura y Sasuke-san son altos, quizá es por eso" pensó, pero sus padres igual eran altos ¿¡Por qué!?
Era mejor olvidarlo y esperar que la pubertad haga lo suyo, al menos Sarada no se había dado cuenta y esperaba que no lo hiciera, solo eran centímetros, ¿tres o cuatro? Ni eran tantos, solo olvídalo Boruto.
Sonaba fácil y lo era, pero por buda, esa vocecita molesta aparecía como recordatorio cuando Sarada y Mitsuki se detenían a su lado, Mitsuki tenía la altura de ella o quizá unos centímetros más. Suspiró resignado al sentarse a descansar en el suelo de la caballa y Sarada lo notó, esa acción en él era inusual, lo miró curiosa e intentó adivinar que pasaba por su mente para que sus ojos vieran las cosas con fastidio.
—Oye Boruto...—la miró al escucharla— ¿Está todo bien? —se maldijo al sonar preocupada, titubeó y cambió su postura— ¿Qué? ¿esta misión fue mucho para ti?
Las cejas rubias se fruncieron.
—¡Ja! Estas misiones son una pérdida de tiempo dattebasa.
—Si claro —lo miró con burla y fingió un suspiro de decepción.
—¿Cuál es tu problema? —Boruto se irguió y caminó con pasos marcados hacia ella.
Sarada lo miró confusa y se acomodó las gafas.
—¿Mío? —preguntó altanera y se irguió al tenerlo tan cerca, no iba a dejar intimidarse. Lo señaló con su dedo índice— Cuál es el tuyo, mejor dicho, desde la mañana estás así...
Centímetros, eran pocos, pero Boruto se arrepintió de acercarse tanto y sentirse inferior. Intentó no mostrar timidez, pero era tarde. Sarada lo notó, sus ojos negros se arremolinaron con un brillo que recién había identificado, era superioridad, burla y ternura.
—Pe-que-ñín.
Sus mejillas se tiñeron de ira más que de vergüenza al mirarla apretar los labios para no reír.
—¡Tú...!
—Yo soy más alta —dijo con superioridad, sabia que era ridículo por los insignificantes centímetros, pero parecía afectarle de alguna manera y, si algo tenía con Boruto, es que disfrutaba jugar.
Pero parece que él no se lo tomó del todo bien. Sarada se quedó perpleja cuando se acercó aun más, obligándola a retroceder, sintió su tobillo chocar con algo y su espalda contra la pared sin caer.
—¡Repítelo de nuevo dattebasa! —dio un paso sobre la caja y apoyó los brazos a su lado.
Sarada se sintió acalorada por el momento, Boruto la tenía acorralada contra la pared, muy cerca para su gusto, pero tampoco le molestaba, era difícil de explicar, pero por primera vez se sentía inferior de algún modo, Boruto le sacaba casi una cabeza desde esa caja, no estaba acostumbrada a mirarlo desde ese ángulo. Su clavícula y cuello estaba a la altura de sus ojos y el tornillo colgando casi chocaba con ella.
No quería, pero la tentación le ganó y subió la mirada a sus ojos.
Sus labios se separaron sin habla, la manera en la que sus ojos la miraban era... de algún modo, una mirada solo para ella.
Boruto la observó confuso ante su expresión, Sarada lucia diferente desde esa altura, su mirada indescriptible y las mejillas coloreándose ¿era el atardecer verdad? ¿qué sucedía? ¿por qué ese sentimiento profundo de protegerla cobró vida de repente? Sabia que ella podía defenderse sola, pero en ese momento la miraba...linda.
—Eh... ¿chicos? —la voz de Konohamaru-sensei los sacó del trance de un jalón tremendo. Ambos parpadearon y se paralizaron— ¿Boruto? ¿Qué haces ahí? ¡Ese paquete es de materiales frágiles!
—¡BakaBoruto! —Sarada lo empujó y él cayó sentado en el suelo, pateando la caja en el acto y chocando contra la pared.
El sonido del vidrio romper los dejó en silencio.
—¡Todo es tu culpa! —Sarada lo señaló culpable y con vergüenza.
—¡Es tuya por provocarme dattebasaaa!
༄
NOTITA:
No se me da mucho de escribir de ellos en gennin, es cortito, pero se supone que eso es un drabble xd espero que les haya gustado y sino váyanse alv, digo digo ;0 , a leer la novela canónica xD
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