Fotografía

5- Amigos

Liah Cooper

El día jueves llegó más rápido de lo que pensé, así que me encontraba con mi cámara tratando de captar algunos paisajes naturales , como un atardecer , siempre me a parecido interesante y hermoso los cambios de colores en el cielo , la intensidad de las cosas que muy pocas veces les damos la debida atención.

Tomé mi cámara y enfoque como las nubes y el cielo se tornan de un color rosa , jugué con las combinaciones que me permitían las ramas de los árboles y capturé el momento antes que desapareciera .

Cerré los ojos y suspiré.

- Ojalá estuvieras aquí papá- susurré-

Guardé mis cosas junto con mi cámara con mucho cuidado , y comencé a caminar en dirección al departamento de mi madre , saqué mi celular buscando el reproductor de música ya necesitaba distraer mis pensamientos por un rato.

Últimamente no dejaba de pensar y eso me estaba ocasionando mucho estrés , sin incluir a mi vecino Matheus que a veces ( todo el tiempo) me provoca tirarle una silla o darle un suave golpe con un ladrillo ... Bueno no tan suave .

La otra vez lo estaba espiando, el no se dio cuenta que estaba escondida detrás de un auto en el estacionamiento y vi como hablaba con una tal Amelia, al final tuve que correr en dirección contraria al ver a su amigo Connor indagando por donde me encontraba.

Bad guy de Billie Eilish invadió mis pensamientos y tras eso un fuerte golpe en la cabeza  que me hizo  tambalear un poco, sin darme cuenta ya estaba en el edificio donde vivía frente al ser humano que menos quería ver en mi vida .

– Liah - me miró con rabia -

– Alan - amenacé- vuelves a golpearme y te juro que te demando

Se acercó amenazante.

– Necesito el dinero , ahora

– Sé que debo pagarte , solo te pido un plazo de 7 días, todavía no me han pagado en mi trabajo

Me tomó por el cuello.

– Estás podrido en alcoholismo- dije al darme cuenta en el estado que se encontraba-

Su mano se manchó de color rojo por la sangre que estaba perdiendo de lado de mi ceja izquierda

– Uufff no te recomiendo eso - miré a la dirección de donde venía esa voz – mucho gusto soy Matheus

Se presentó como todo un caballero y con una enorme sonrisa.

– Sabes , no es mi problema puedes golpearla - dijo-

Sentí que mis ojos se iban a salir de su lugar de tanto que los abrí sorprendida, Matheus no era ese príncipe de Disney pero no sabía que podía ser tan idiota.

– Aunque la verdad- continuó– el maltrato físico hacia una mujer está totalmente prohibido y puedes pasar alrededor de unos 5 años en la cárcel, y por lo que puedo percibir no estás en tus cabales  sino que el alcohol está ocasionando una fuerte confusión en tu cabeza

Alan lo miró con furia , me soltó y dio pasos hacia él

– Esto no es tu problema - habló Alan-

– Si tienes toda la razón, mil disculpas– Alan frunció el ceño al ver que Matheus actuaba diferente – se que Liah puede ser estresante, orgullosa, egoísta, patética, complicada, tonta, bruta, estúpida

– ¡ Vale vale ya entendí!- dije ofendida-

– Pero amigo , no te dejes llevar por tus instintos alcohólicos y cometer un crimen como es el maltrato animal

– Sigo aquí- hablé un poco molesta -

Matheus me miró por unos segundos y supe lo que teníamos que hacer ... Salir corriendo.

Corrí vía a las escaleras escuchando los gritos de Alan maldiciendo y Matheus riendo , sentí que me agarraba del brazo.

–¡ Alan suéltame!- grité -

Pero era Matheus que lo hizo para estar el delante de mí , de esa manera abrió la puerta de su departamento y me empujaba para dentro.

–¿ Qué clase de príncipe salvador barato eres ? - me quejé-

– Uno que te acaba de salvar de una paliza

– ¡ Abre la puerta!- gritó Alan dándole golpes-

–¿ De verdad crees que voy abrir ?-  habló Matheus con sarcasmo riendo-

Matheus era la versión contraria de un príncipe azul, ustedes saben que siempre llega el príncipe justo cuando le va a ocurrir una desgracia a la princesa y él la salva , bueno Matheus tiene una forma bastante rara de salvar a una persona.

– Gracias - susurré-

–¿ Quién es él ?- preguntó caminando a la cocina

– Mi ex - susurré con vergüenza

– Esa bestia es tu ex ¡ Wow que gustos ! - sacó un botiquín de primeros auxilios – siéntate -

– Esto es muy cliché, es típico en las películas o libro, el chico le cura las heridas con cuidado a la chica , es siempre lo mismo - me quejé-

– La diferencia Liah es que no estamos en un libro ni en una historia, estamos en la vida real

– Es más cliché aún - me miró amenazante y me senté-

Mojó un algodón con alcohol y sin ningún tipo de cuidado me limpiaba la herida.

–¡ Auch! Eres una bestia

–¿ Como el de La Bella y La Bestia? Que después se transforma en príncipe

– Tú eres la excepción, te quedarás siendo un hombre... Aunque bueno, entre una bestia y un hombre es de la misma especie

Matheus presionó con fuerza la herida haciéndome gritar.

– Ahora puedes decir con certeza que soy una bestia - sonrió inocentemente-

– Si tú lo dices - murmuré- Matheus ¿ Puedo hacer una pregunta?

–Ya  la hiciste - bufé- vale hazla

–¿ De verdad me odias ?

–¿ Lo dices por lo que le dije a tu ex?

– Algo así

– Liaah no odio a nadie

– Eso no responde mi pregunta

–No te odio, hasta eres simpática - bufé-

– Si, ajá- respondí con sarcasmo-

–¿ Amigos?- preguntó dudoso

– Amigos - asentí -

Después de todo él me había salvado de una buena paliza de Alan, él nunca me golpeó pero casi siempre pasaban este tiempo de escenas donde él perdía el control y después al otro día lloraba para que lo perdonara, lo peor es que yo lo hacía, lo perdonaba porque estaba muy enamorada de él hasta que me di Cuenta que soy muy joven para dañarme la vida con alguien que no sabe que hacer con la de él.

Supongo que ahora le debo a Matheus.