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el grupo de chicas ya se encontraba en la casa de los park, estaban tomando algo de café y té para calmar un poco el frío de aquella noche y evitar pensar en lo sucedido con la chica.

"¿ustedes piensan que ha sido nuestra culpa?" pregunta nayeon, la chica con dientes de conejo y mejillas algo regordetas.

"¿qué? no, claro que no, ella me hubiera dicho si algo estaba mal" dice chaeyoung, la taiwanesa había sido su mejor amiga por un largo tiempo y la noticia la había agarrado por sorpresa.

"chaeng... ella nunca fue de hablar sobre sus sentimientos" dice jeongyeon tratando de no soñar tan dura con sus palabras, aunque aquello doliera a chaeyoung, era verdad.

la taiwanesa tenía dificultades con el idioma aún y en verdad nunca había expresado sus sentimientos de buena manera, siempre había sido alguien callada y tranquila, tenía 17 años y sentía tantas cosas las cuales no era capaz de hablar con nadie, incluso con chaeyoung, una chica de su edad.

el lugar era silencioso, los padres de jihyo habían decidido que era bueno ir a dormir, las actividades de las chicas se habían cancelado debido a la fuerte noticia por lo cual tendrían algunos meses para olvidarse de todo aquello.

las chicas dormían repartidas en dos habitaciones, en la habitación de jihyo dormían las cuatro mayores y en la habitación de invitados dormían las cuatro menores, la líder había decidido que prefería dejar su habitación para cuatro mayores debido a los recuerdo con tzuyu que le traía aquel lugar.

mina no podía conciliar el sueño aquella noche, ya eran las tres de la mañana y no podía deje de pensar en la taiwanesa, jihyo estaba igual, ambas se encontraban en el salón mirando por el gran ventanal de la casa.

"¿la extrañas?" pregunta la líder, dirigiendo su mirada a la japonesa la cual demostraba haber llorando como nunca antes.

"más que nunca, jihyo" apoya su cabeza en la cabeza de la líder y llora, la contraria no le dice lo mismo porque si fuera mina, ella haría lo mismo.

"todo estará bien, ella ahora está bien" acaricia delicadamente la cabeza de la japonesa, consolándola y tratando de que esta deje de llorar un poco, podía entender su corazón en aquella situación.

"era mi novia, jihyo... era mi novia y no sabía cómo se estaba sintiendo" llora de manera fuerte, jihyo escucha los pasos de sus amigas bajar por las escaleras de manera apresurada, las ve en los últimos escalones, todas miran de manera triste a mina y corren a abrazarla.

"estaremos bien, mina-unnie..." dice chaeyoung incluso si ella no es capaz de creer en sus propias palabras.

liar | tzuyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora