se encontraban camino a aquella cafetería la cual nayeon había recordado, esta vez se encontraban más calmadas, menos mina, el trafico era inmenso y no creían que lograrían llegar antes de que el local cerrara, mina se encontraba con su frente apoyada sobre el cristal, mirando atentamente cada una de las luces de la noche en seúl, seguramente su novia las hubiera echo detener el vehículo para poder sacar una foto del paisaje.
la menor de las japonesas se duerme sin darse cuenta y cuando abre sus ojos, ve que se encuentra sola en el vehículo, estaban detenidas en una gasolinera, ve que sus amigas están dentro del local comiendo fideos instantáneos y algunos snacks, baja del vehículo sin importarle ponerle seguro, entra al local y frota sus ojos, se acerca a sus amigas y se sienta junto a sana.
"dormiste bastante, el camino es largo, iré por más fideos instantáneos" dice, pero mina toma su brazo, deteniéndola de hacer lo que estaba a punto de ir a hacer, "¿sucede algo, mitang?" la japonesa niega y la suelta, dejándola ir por la comida.
pasan algunos segundos y la rubia llega con la comida y unos palillos, mina toma la comida y le agradece, sana sabe que algo anda mal pero tiene miedo de que mina se sienta mal.
"puedes preguntarme lo que sea, sana" dice mina después de comer un poco y darse cuenta de que la rubia la mira sin tener intenciones de apartar su vista.
"¿realmente crees que sea ella?" finalmente se siente capaz de preguntar, "no estamos seguras de que si es ella o alguien haciendo una broma"
"¿quien haría una broma con algo tan duro?" pregunta mina, evitando responder la pregunta de sana, la rubia está apunto de decir algo pero el teléfono de mina comienza a vibrar en su bolsillo
"ya vuelvo, me están llamando" dice sin más y se para de su asiento, sale de la tienda bajo de vista de sus amigas y finalmente atiende la llamada el número desconocido, "¿si?" dice apenas contesta pero nadie responde, solamente puede escuchar un respiración.
"¿mina?" preguntan del otro lado, mina tiembla ante la voz que escucha y evita llorar porque reconoce a su novia, "por favor, deben ser rápidas"
"tzuyu... yo-" no termina de hablar porque la menor la interrumpe desesperada.
"perdón, en serio lo siento... no quería hacer esto, necesito que lleguen pronto" dice y mina puede escuchar los sollozos de tzuyu, quiere hablar pero de fondo escucha ruidos de puertas abriéndose y cerrándose, continuado de una voz masculina.
la llamada se corta después de que el teléfono de tzuyu cae, mina queda confundida y evitando llorando, entra rápidamente a la tienda, queriendo decirle a sus amigas lo que acaba de suceder.
"debemos irnos, ¡ya!" dice jihyo apresuradamente antes de que mina pueda decirles algo, todas toman sus cosas y corren al gran auto para seguir en busca de tzuyu.