❝Tú sabes que te quiero, no es un secreto que trato de ocultar. Yo sé que me quieres, así que no sigas diciendo que nuestras manos están atadas❞
Santiago de Chile. Diciembre, 2017.
—Mi gente —dijo Christopher —, queremos agradecerles por todo el apoyo y esperamos que disfruten lo que queda del show. Antes de pasar a la siguiente canción queremos recordarles, ¿Qué, qué chicos? Que estaremos en el festival de Viña en febrero —el público grita y las luces se apagaron.
—Cómo olvidar el día que nos conocimos, el primer beso después de tanto rogar. Las piedras que nos aventaron al camino...
Richard inicia cantando. Joel mira el suelo, los flashbacks de sus primeros días con Erick se agolpan en su cabeza y tiene que luchar contra las lágrimas. Lo quiere tanto.
—Dime qué paso con aquella promesa por favor...
Erick tiene una pequeña sonrisa en sus labios que logra ocultar el dolor que lleva aguantando durante días. Sus ojos cristalinos miran adelante el mar de luces. Nunca conectó tanto con una canción hasta ahora y sólo quiere mirar a Joel, pero está seguro que si lo hace llorará. Lo extraña tanto.
Están cada uno en el extremo del escenario, alejados uno del otro. Pero en segundos sus cuerpos poco a poco se atraen, justo en ese momento donde viene su dueto.
—Cómo olvidar el día que nos conocimos...
Joel mira a Erick.
—... Siempre alegres, siempre tan y tan unidos, nada nos iba a separar...
La canción termina. Los reflectores se apagan y sus labios ansiadamente se juntan.
Guadalajara, México. Enero, 2018.
—¡Feliz cumpleaños!
Joel fue el primero en felicitarlo —después de su madre— Erick lo mira con ternura esperando que termine la canción aguantando la risa tapando su boca con sus manos. Era una escena tan tierna. Joel le tiene un cupcake de chocolate y una velita con el número diecisiete.
—Apaga las velitas y pide un deseo, mi amor —dice Joel. Erick llega a creer que Joel está más emocionado que él.
Sin borrar su sonrisa sopla y le da un mordisco al panecillo. Joel lo deja un momento al lado y mira con atención al cumpleañero.
—No hay nada que ame más que verte así de feliz, ver ese brillo en tus ojos, ese brillo sincero y lleno de amor. Tú mereces todo lo bueno en la vida y sé que cosas muy buenas te esperan.
—Gracias por tanto —dice contra su pecho —. Hoy tan sólo quisiera celebrar juntos... A veces lo deseo, ¿Sabes? Tan sólo tomar el teléfono y poder hacer un live juntos.
Joel lo mira con tal ternura sintiendo repentinas ganas de llorar. No respondió, él simplemente le regala una sonrisa cargada de amor y besa su frente acunando a Erick en sus brazos.
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cuando se apagan los reflectores || joerick
FanfictionLos humanos deberían entender que a veces las palabras no nos salen, pero, y los ojos. ¿Cómo le decimos a los ojos que oculten lo que el corazón siente?