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V

Algo no iba bien, y eso Natasha lo sabía perfectamente al notar el comportamiento de Obadiah.

Tuvo que dejar de lado varias misiones y entrenamientos para no alejarse del Stark. Y eso hizo que Fury se enojara varias veces con ella, pero valía la pena totalmente si era para cuidar a su hermano.

Supo lo del reactor y lo que sucedió en Afganistán. Y lo vio bailar con Pepper desde lejos, feliz de que quizás él por fin encontró a alguien que le quitará lo playboy.

Supo de su nuevo traje y sus movidas en Afganistán.

Esas observaciones y cuidados extremos que tuvo, preocupada a más no poder, hizo que estuviera justo en el tiempo y momento indicados.

-Nat.

-Pep, ¿qué sucede?

-Es Tony. Me preocupa. Lo llamé y no dijo nada en la otra línea, y luego simplemente cortó.

-Iré enseguida.

Colgó y manejó a toda velocidad su motocicleta hacia el lugar, deteniéndose justo al frente de la casa.

Ahí estaba el auto de Obadiah, y supo que debía ser sigilosa.

-Jarvis, no le digas que estoy aquí.

-Por supuesto. Señorita Natasha.

Entró sigilosa y meticulosa, cual araña se acerca a su presa o se escabulle para acechar.

-Este es tú legado... Una nueva generación de armas. Y esto será su corazón -escuchó la voz de aquel hombre y se mantuvo escondida, observando ansiosa cómo Tony parecía estar muriendo. Pero sabía que no debía atacar en ese momento, debía ser precisa si quería salvarlo-. Armas que van a guiar al mundo en la dirección correcta. Y la balanza del poder estará de nuestro lado... Ja, ¿cómo no te enseñé mí prototipo? Claro que no es tan... Tan conservador como el tuyo. Qué mal que involucrasre a Pepper en esto, hubiera preferido que viviera.

El hombre se levantó y fue caminando directo al depredador.

Natasha lo electrocutó con aquellos dispositivos que lo paralizó, para luego darle una patada directamente en su nuca, dejándolo noqueado completamente.

Tomó el maletín y fue hacia Tony rápidamente.

El castaño tragó saliva y jadeó.

-Nat...

-Shh, Shh, ahora estás a salvo. Estarás bien -susurró ella sacando el reactor de la maleta y buscando para conectarlo una vez más con Tony.

El Stark aspiró aire profundamente y Natasha le acarició el hombro.

Sabía que no podría hablar durante un tiempo, así que sólo le sonrió cálidamente y fue hacia Obadiah para amarrarlo y llamar a la agencia.

-Sí, Agente Coulson. Aquí está.

-Buen trabajo, agente Romanoff.

-Ya luego pido un ascenso.

-Se nota que se crió junto a Tony Stark.

-Ya ven a buscarlo, no puedo negar que quizás no respire cuando lleguen -escuchó un quejido de Tony al fondo-. Me tengo que ir, lleguen rápido.

-En 5 minutos.

Natasha colgó y fue nuevamente donde el castaño.

-¿Cómo te sientes?

-De la mierda -logró sonreír el castaño levemente. Cansado a más no poder-. ¿Y Pepper?

-Está a salvo, tranquilo. Está perfectamente bien, asustada, pero bien.

Tony sonrió amplio y le tocó el hombro suavemente.

-Muchas gracias, Nat.

-Cuando quieras. Siempre estaré aquí para ti, Tony.

Sé que son capítulos sumamente cortos, pero no creo que se necesite más para entender lo que sucede.

Pero, ya luego de Ironman 2, esto se hará más extenso seguramente, porque hay varias disputas y situaciones que quedarán perfectas para demostrar la relación de estos dos.