Da lo mismo cuál es tu edad y cuánto tiempo tengas con tu pareja, sólo tienes que entender una sola cosa al momento de compartir tu vida con otra persona: la familia y los amigos son tanto o más importantes que tú.
Por eso, si eres inteligente y quieres mantenerlo atrapado en tus redes, hay trucos que puedes aplicar si quieres tener el corazón cautivo de tu galán, porque el desafío de una mujer no es colonizar e invadir el territorio, sino lograr ganarte a todo su entorno y convertirlos en tus aliados.
Porque es mejor hacer el amor y no la guerra, la regla de la diplomacia es ceder y muchas veces morderse la lengua si es necesario; finalmente la tolerancia y el respeto es lo que lleva al éxito de toda relación.
Pero si estás en proceso de conquista tienes que tomar en consideración los siguientes tips, para que no te llegue el sobre azul a final del mes:
Los amigos de él fueron, son y serán parte importante en su vida
Si te invitan a un encuentro social donde van a estar los amigos de siempre, solo tienes una alternativa: adáptate o simplemente morirás en el intento. No te enrolles y trata de hacer que el momento fluya sin forzar ninguna situación; comparte, conversa e intégrate al grupo y olvídate de hacer algún tipo de pataleta, de lo contrario lo único que sacarás es una pelea al estilo Paris Hilton y quedarás como la villana de la película.
Por más que quieras, NO trates de cambiar a tu pareja
¿Crees en el príncipe azul y en la perfección de sus costumbres? olvídalo; tu fantasía incumplida te condenará a una constante frustración. Aunque sí creo que las personas siempre evolucionan, en el caso de los hábitos que odies desde el comienzo de la relación, por más que trates de adiestrar a tu hombre, te llevarán a una vida cargada de peleas y malos ratos. La forma más inteligente es aprender a aceptar a tu compañero con sus defectos y virtudes.
Si es de lo que deja la ropa regada por toda la casa y te molesta profundamente, nada sacarás tratarlo como a un niño, simplemente haz tripas corazón, respira profundo y deja las cosas tiradas hasta que por iniciativa propia se le ocurra levantarlas. Ahora si es del tipo “flojus crónicus” y la ropa sigue tirada por más de dos semanas y no hace nada por el desastre, te quedan dos opciones: decirle con buenas palabras que ordene y si no, abre la puerta y sal corriendo de ahí, te ahorrarás canas y arrugas. Al final si el sapo sigue siendo sapo, lo terminarás odiando y con una relación fallida.
Las amigas de tu pareja NO son tus enemigas
Hay hombres que tienen a mujeres como “mejores amigas”. Probablemente ellas llegaron mucho antes que tú, por ende siempre ocuparán un lugar importante, pero no necesariamente el mismo que tú. Por eso no tienes que mirarlas como competencia y si logras superar a tu ego, al demostrarle a tu pareja que eres capaz de quererlas y compartir con ellas, tal como él, ganarás puntos extra que te validarán y posicionarán como la Top One del corazón de tu galán.
Las demostraciones de cariño de ellas hacia tu pareja, tienes que asumirlas como eso, porque si dejas que te manipulen los celos y terminas en un escándalo de reclamo, lograrás alejarlo y entregárselo en bandeja a las chicas que lo estén rondando. Eres más inteligente que eso, si realmente lo quieres, muéstrale que eres madura y capaz de asumirlo con todo y sus amigas.
A los hombres no les gustan las “niñas”
Una mujer adulta debe actuar siempre como tal. Eso es lo que los hombres quieren ver en ti. Puedes jugar a hacerte la inocente, la niña sexy, a la escolar o todo aquello que las fantasías como pareja les guste hacer, pero si estás con amigos, a solas, en la calle o donde sea, lo único que un hombre espera es que actúes con la madurez propia de una mujer. Por ende están excluidas las pataletas de niña mimada, las escenas de celos, las peleas sin justificación, hacerse la víctima, y menos hacer estos actos en público; si no tienes motivos válidos para actuar de esta manera entonces ¡NO LO HAGAS! Este actuar solo te llevará derecho al borde del abismo.
Con estos consejos verás que convivir con alguien será mucho más simple y fácil.
La vida está hecha para disfrutarla y si no eres capaz de hacerlo, entonces te pondrás vieja y amargada, porque el espíritu de nuestro libre albedrío se basa en escoger y, si eliges tener una vida como “Abigail”, es una opción.
Pero si quieres sentirte plena y llena de felicidad, toma consciencia de tus acciones, apóyate en tu pareja y pídele que su actuar también sea recíproco, esto te ayudará a mejorar la relación que tienes contigo, tu pareja y tu entorno.