Reflexiones sobre el amor y el cariño

Idas y vueltas

¿Por qué? ¿Por qué vienes y vas? Hay veces que parece que quieres estar y otros que no, como si yo fuera un juguete con el que un día te apetece jugar y 2 no; Y yo que soy tonto, te lo permito.

Actúas como si mi corazón fuera un pub, donde entrar cuando te plazca y una vez hablado (por cumplir parece a veces) te vas hasta que te da por volver. No sabes el daño que me haces a veces al hablarme (sin querer, por supuesto. Si supieras todo, probablemente dejarías de hablar y eso me haría más daño porque en el fondo me caes bien y todo) porque cuando estoy consiguiendo levantar cabeza de este enamoramiento, vuelves y destrozas los cimientos de lo que estaba construyendo al irte de nuevo. Pero es que no saber de tí ni tener notificaciones tuyas me hace más daño. Es como ese vicio que hace daño, pero necesitas más para estar bien... Te has hecho un hueco en mi corazón sin saberlo y sin yo darme cuenta, es una pena que nunca vayas a estar presente.

No puedo obligarte a quedarte, por supuesto, pero un poco de claridad y saber qué pasa me gustaría.

Espero entender todo esto en un futuro, pero de momento, es todo un lío.