Mi papá tocaba la puerta de mi habitación, pero yo no quería abrirla, solo me quedé en el borde de mi cama admirando mi pequeña habitación; a pesar de los golpes incesantes de mi padre, me sentía tranquila y feliz. Los golpes aumentaron de fuerza, y después de uno minutos mi papá logró tirar la puerta después de unas patadas, sin embargo, al entrar, él no me miró en ningún momento, parecía que mi cuerpo colgando en medio de la habitación ganó su atención.
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➤ 𝐑𝐞𝐥𝐚𝐭𝐨𝐬 𝐛𝐫𝐞𝐯𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐭𝐞𝐫𝐫𝐨𝐫.
Horror■ Historias que te pondrán a pensar en el mundo en el que vives, en las personas que te rodean, y en la muerte que te espera. ■ Ninguna historia de las que están aquí me pertenece, yo solo quise compartirlo con aquellos amantes del terror y misterio...