Chanyeol entró al despacho de su empresa luego de una reunión de tres horas con inversionistas japoneses, era cerca de las seis y media de la tarde y ya debería estar de vuelta en casa junto a su conejito pero aún debía dejar unos documentos en su oficina y revisar otros cuantos. Estaba agotado, a esa hora ya sólo quedaban los guardias de seguridad y él realmente quería irse.
- ¿No le parece, Señor Park, que ya es muy tarde para estar trabajando? –la dulce vocecita de Baekhyun fue lo que le recibió al entrar.
El conejo estaba sentado en la silla de Chanyeol luciendo una gabardina lacre con los bordes negros, era larga y del tigre, y ocultaba una pequeña sorpresa para el más alto.
- Baek...
- ¿Sabías además que has tenido muy descuidado últimamente a tu esposo? –el tono que usaba el más pequeño era seductor, atrevido y completamente excitante para Chanyeol.
- Lo siento conejito. –dijo acercándose hasta su esposo quedando frente a él.
- Además olvidaste nuestro aniversario. –reprochó con un puchero en los labios, se puso de pie y continuó diciendo:-, por fortuna traje nuestra celebración a tu oficina –desabrochó la gabardina dejándola caer al piso alfombrado revelando un traje de escasas prendas. Unas medias de red con aberturas en las caderas y y su trasero, y unas bragas de hilo negro que no dejaban nada escondido. A Chanyeol se le cortó la respiración –, también traje la cena pero lamentablemente mientras te esperaba me dio hambre y acabé con la guarnición de zanahorias.
- Yo prefiero comer conejo.
Los labios del tigre devoraron los del pequeño cambiaformas, sujetaba la femenina cintura ajena apegándolo hasta chocar contra su cuerpo mientras sus lenguas se acariciaban, soniditos húmedos mezclados con gemidos suaves provenientes del conejo. Cuando se separaron, Baekhyun caminó dos pasos hacia atrás.
- Y yo te prefiero desnudo –le dijo coqueto caminando hasta el amplio sofá para tomar asiento con las piernas cruzadas-. Puedes deleitar a mis ojos.
Con una sonrisa arrogante el tigre comenzó a desprenderse de su ropa, el saco, la corbata que curiosamente la dejó asentada sobre su buró, la camisa, los zapatos y el pantalón. Vistiendo únicamente un bóxer negro tomó la corbata y se acercó a su adorable esposo, se arrodilló frente a él y le colocó la corbata alrededor del cuello ajustándola sin usar demasiada fuerza.
- Siempre quise una mascota.
- Los conejos somos muy buenas mascotas, somos muy dóciles.
- Veamos que tan sumiso eres, pequeño conejito.
Baekhyun llevó sus manos al bóxer de Chanyeol y metió su mano dentro acariciando la longitud del tigre, estaba duro y caliente.
- ¡Oh, que dicha, he encontrado otra zanahoria! –chilló feliz causando una sonrisa en el rostro del felino.
- Sólo que esta zanahoria la voy enterrar en otra parte además de tu boca.
Rapidamente Chanyeol se deshizo del bóxer y tiró del conejito sobre sí mismo, ambos cayeron al suelo en un suave golpe gracias a la alfombra. Las medias de Baek causaban una sensación interesante sobre la piel del tigre, las piernas del joven se ubicaron a los costados del otro, sentó su esponjosa colita directo sobre el miembro de su esposo amoldándolo a su cuerpo. La pequeña braga negra no cubría mucho del miembro rosado del conejo y eso le encantó a Chanyeol quien acarició la cadera contraria pasando la yema de sus dedos por el fino hilo.
- Quiero mi zanahoria ya Yeolie –pidió como niño pequeño saltando sobre el miembro que tanto aclamaba-, la quiero ahora, dámela por favor. Prometo ser un conejito bueno si me la das.
- Siempre has sido un buen conejito, el mejor –halagó irguiéndose con apoyo de sus manos-, y voy a recompensarte.
Dicho esto el conejito se levantó un poco, lo suficiente para dejar el miembro de su esposo erguido y procedió a retirar su braga haciéndola a un lado para dejarse caer sobre el pene ajeno. El agujero de Baekhyun se estiró conforme el grueso falo ingresaba en él, se sentía caliente y no pudo evitar soltar jadeos y gemidos complacidos. Chanyeol tomó el rostro de su conejito bebé para besarlo fogosamente. Aún después de dos años de matrimonio jamás se cansaba de sus labios ni de su cuerpo, siempre era una maravillosa experiencia sentirlo tan cerca, aunque lo mejor era poder despertar con él cada mañana, sabiendo que entre ellos ya no existía ese muro de concreto formado de malos entendidos.
- ¡Oh, sí! Dame más, por favor.
- Brinca pequeño, gánate tu zanahoria.
Baekhyun meneo su cadera en forma circular provocando que el miembro entrase en lo más profundo de su agujero, su próstata fue golpeada, acariciada antes de ser maltratada deliciosamente por el glande ajeno. La sensación que les recorrió el cuerpo los dejaba exhaustos, agitados por el deseo de más.
- Amo tus orejas –le dijo entre susurros acariciando las mencionadas blancas orejas de conejo.
- Amo que las acaricies.
Chanyeol tiró de la corbata que colgaba del cuello del conejo acercándolo hasta que bruscamente sus labios chocaron, la fuerza con la que lo hacía no llegó a dañarlo pero de alguna forma le incitó a desear estar en una cama amordazado y maniatado siendo salvajemente penetrado por su marido. Su cuerpo se calentó con el simple pensamiento y sintió los temblores de un cercano delicioso orgasmo.
- ¡Ah!
- ... Y así se come a un conejo –le dijo jadeante tras derramar su semilla en el interior de su pareja.
- ... Y así se doma a un tigre.
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Working with the Devil (ChanBaek)
FanfictionBaek, un shifter conejo, es CEO de la empresa Byun, por un robo de uno de sus empleados su empresa empieza a quebrar y tendrá que ir a pedirle ayuda a su rival en Park Industries, Park Chanyeol, para fusionar las empresas. Pero Chanyeol no sólo quie...